Capítulo 29

-Jamie te amo más que a mi vida, se que este bebé nos unirá más allá de nuestro amor y nos completará como pareja.

-Él será lo mejor de nosotros dos, sobre todo espero que salga tan tierno y dulce como su madre.

-Por favor no hablemos más, hazme tuya porque quiero sentir todo tu amor.

-Mi mayor deseo es mostrarte todo mi amor.

Alejandra

Nos paramos los dos y nos sacamos la ropa dejándola desparramada por el piso. Estamos parados un frente al otro, veo como Jamie se arrodilla apoyando sus manos en mi vientre y acerca su boca.

-Pequeñito todavía no te conozco y ya te quiero, espero que heredes todo de tu madre. Ahora si me permites voy a adorar a tu bella madre.

Verlo hablar así con nuestro futuro hijo me emociona mucho, pero ahora ahogo esas lágrimas que quieren salir porque solo quiero unir mi cuerpo al suyo. Me arrodilló para poder besarlo, él me recuesta sobre la mullida alfombra.

-Quiero mirarte a los ojos y poder leer en la línea de tus labios que deseas quedarte a vivir para siempre entre mis brazos.

Esas palabras hacen que me cueste más contener la emoción, pero sentir el roce de sus labios en mi cuerpo , sus besos sobre mi cuerpo me excitan y son bálsamo en este momento. Succiona mis pezones que ahora los siento más sensibles y se yerguen mucho más rápido. Desciende por mi vientre con una suavidad única, como si así cuidara de nuestro hijo. En el momento que su lengua toca mi clítoris el deseo me domina y mi cuerpo ya no me pertenece. El entrar y salir de sus dedos junto con lengua juguetona me llevan al orgasmo.

Jamie

La atraigo hacia mi para colocarla a horcajadas, ella toma mi pene y lo introduce en su vagina. La observo comenzar a moverse lentamente, sus ojos aunque cristalinos emanan una pasión desbordante. Me embriaga su pasión, siento que me posee con todo su amor. La tomó por la cintura para ayudarla, nos acompasamos con movimientos muy sensuales. Presiento que el clímax esta cerca, me incorporó para que nuestros cuerpos queden en contacto. Tiene los ojos cerrados y su boca esta abierta en busca del aire que necesita. Me hundo en su interior más y más, su tersura interior que abraza mi miembro acelera mis movimientos y observo como llega al orgasmo tirando su cabeza para atrás y con un gemido que me atraviesa de tal manera que llegó al mío. En ese instante ella apoyo su cabeza en mi hombro y la rodee con mis brazos. Su cuerpo sucumbe entre mis brazos, tengo la sensación que esta llorando, le habré hecho daño sin querer. Con dificultad me levanto del piso con ella para llevarla a la cama.

-Corazón por qué esas lágrimas, no quiero que llores. Te dañe de alguna manera.

-No mi amor. Son de felicidad. Hoy empecé el día recibiendo una noticia que sacudió mi mundo y cuando pensé que todo se derrumbaba me di cuenta que estabas a mi lado. Entonces comprendí finalmente que nunca estaré sola para recorrer el camino de la vida. Se que tu lo estarás haciendo junto conmigo. Te amo.

-Si me dejas quiero ser siempre la persona que este a tu lado, que seque tus lágrimas con besos, que te apoye cuando sientas que no puedes seguir y sobre todas las cosas amarte más allá de esta vida. Te amo.

Alejandra

Nos quedamos en silencio sabiendo que ambos sentimos lo mismo, que el destino nos unió hace mucho percibiendo que un día como hoy el amor nos iba a unir para poder completar nuestras vidas. Ahora estoy en mi lugar en el mundo, en sus amoroso brazos que me relajan y me quedo profundamente dormida.

Unos días después

-Jamie hoy al mediodía tengo turno con mi ginecóloga, vienés conmigo?

-Eso ni lo dudes tesoro, ya te dije que te voy a acompañar en todo y más con nuestro hijo. Estaba pensando que tendríamos que avisarles a mi familia la buena noticia.

-Quisiera primero ir a la consulta para confirmarlo bien y estar más tranquila.

-Me parece bien. Yo también quiero sacarme unas cuantas dudas cuando vayamos.

Jamie

Al mediodía fuimos al hospital a ver a la ginecóloga. Ale estaba un poco ansiosa por saber que le iba a decir sobre nuestro bebé.

-Adelante que la doctora los esta esperando.

-Muchas gracias.

-Por favor tomen asiento. Soy la doctora Dora.

-Un gusto Doctora, soy Alejandra y mi pareja Jamie.

-Por qué es su consulta.

-Hace unos días me entere que estoy embarazada y me recomendaron que la viniera a ver a usted.

-Felicitaciones, es una buena noticia. Recuerda cuando fue su última menstruación?

-Muchas gracias doctora. La verdad que estuve con muchos problemas y no lo recuerdo.

-No se preocupe. Le voy a realizar una ecografía transvaginal para que podamos ver bien al bebé, ya que todavía es muy chico para verlo con la otra.

-Eso no daña al bebé, verdad.

-Tranquilo Jamie. Perdón, no le molesta que lo llame así.

-Para nada doctora.

-Es un método poco invasivo que nos ayudará a saber el tiempo que tiene de embarazo. Pase atrás del biombo, sáquese la pollera y la ropa interior, recuéstese en la camilla y tápese con la sabana que ya traigo el ecógrafo.

Alejandra

Hago lo que me dice la doctora, me acuesto en la camilla y la espero. Por suerte no tarda mucho. La veo preparar todo y cuando ya está listo lo llama a Jamie.