El Amor en la Pagina

Capítulo 9: Una Revelación Inesperada

No siempre fue así. Mi relación con Luke, digo. Hubo un tiempo en el que él era más que el chico arrogante y popular que todos conocían en la preparatoria. Antes de que los rumores y las burlas, antes de que su grupo de amigos me convirtiera en su blanco favorito, Luke y yo éramos amigos.
Recuerdo perfectamente el día en que su familia se mudó al barrio. Yo tenía unos siete años, y todo cambió cuando la mejor amiga de mi mamá llegó con su familia. Era un día soleado, uno de esos días de verano en los que todos los niños jugaban en la calle. Mi mamá estaba emocionada de tener a su amiga cerca, y claro, yo también lo estaba. Pero la verdadera sorpresa fue cuando vi a Luke por primera vez.
Al principio, Luke no se acercaba mucho a mí. Siempre lo veía jugar solo o con su hermano menor. Era un niño serio, reservado, mientras que yo era más extrovertida, siempre corriendo de un lado a otro, buscando nuevas aventuras en el barrio. Intenté acercarme varias veces, pero Luke se limitaba a observarme desde lejos, como si no estuviera seguro de cómo reaccionar ante mí.
Todo cambió un día cuando tenía unos 10 años. Estaba paseando en mi bicicleta, disfrutando de un día perfecto, cuando perdí el equilibrio y caí al suelo con fuerza. El dolor en mi rodilla fue inmediato, y las lágrimas comenzaron a rodar por mi rostro sin control. Estaba segura de que tendría que arrastrarme hasta casa, cuando de repente, sentí una mano en mi hombro.
—¿Estás bien? —la voz de Luke sonaba seria, pero había una preocupación genuina en sus ojos.
Me miraba fijamente, como si estuviera evaluando si debía intervenir o dejarme llorar por mi cuenta. Pero antes de que pudiera responder, él ya estaba ayudándome a levantarme, limpiando la suciedad de mi rodilla y asegurándose de que no estuviera gravemente herida.
—No llores tanto, no es para tanto —me dijo con una pequeña sonrisa, que aunque rara en él, me reconfortó.
Desde ese momento, algo cambió entre nosotros. Luke se volvió mi amigo, mi compañero de aventuras. Aunque seguía siendo más callado que yo, encontrábamos maneras de divertirnos juntos. Mientras yo hablaba sin parar, él siempre escuchaba, a veces con una sonrisa oculta, otras veces con esa mirada pensativa que siempre lo caracterizó.
Flashback: Preparatoria
Pero las cosas cambiaron cuando empezamos la preparatoria. Luke, que siempre había sido el chico serio y distante, empezó a hacerse popular. No solo por su apariencia, que atrajo a más de una chica, sino porque se volvió más sociable, más abierto con los demás. Mientras tanto, yo me convertía en "la nerd". Siempre con mis libros, mis historias, y siendo la favorita de los profesores. Y claro, eso no me ayudó en lo social.
Las burlas empezaron pronto. No era un bullying violento, pero sí constante. Los chicos siempre se reían de mí, de lo mucho que leía, de lo seria que era en clase. Decían que me creía mejor que ellos, que era "la favorita de los profes". En el fondo, no me importaba lo que dijeran, pero lo que sí me dolía fue cuando Luke comenzó a alejarse.
—Gaby, tenemos que dejar de pasar tanto tiempo juntos —me dijo un día, su tono era más frío de lo habitual—. No es personal, pero... tengo una reputación que cuidar.
Mi corazón se hundió. Sabía exactamente a qué se refería. Luke había hecho nuevos amigos, chicos que pasaban el tiempo molestando a otros, haciéndose los graciosos a costa de los más débiles. Yo, claro, era uno de sus blancos favoritos. Me dolió más de lo que quise admitir, pero asentí, fingiendo que no me importaba.
—Claro, no hay problema —dije, intentando sonreír, pero por dentro sentí que algo se rompía entre nosotros.
Y así fue. A partir de ese día, Luke empezó a formar parte de ese grupo de chicos que se reían de mí, de mis libros, de mis buenas calificaciones. Pero lo que más me dolía era cuando, de vez en cuando, él se acercaba. Traía regalos, como si intentara compensar algo. Me invitaba a salir, a dar una vuelta o simplemente a pasar el rato, pero esas salidas siempre terminaban siendo una trampa. Sus amigos lo usaban para obtener información sobre mí, algo de lo que pudieran reírse después.
Cada vez que sucedía, me alejaba más y más de él. Mis sentimientos eran una mezcla extraña de confusión y decepción. Quería creer que el Luke que había conocido seguía ahí, pero cada broma cruel, cada comentario sarcástico, me demostraba lo contrario. Hasta que un día decidí alejarme por completo. Dejó de doler cuando dejé de esperar algo de él. Me volví más solitaria, más reservada. Aprendí a no depender de nadie.
Ahora, mirando hacia atrás, me pregunto si alguna vez significamos algo el uno para el otro. Todo lo que hemos pasado parece una confusión interminable, un tira y afloja de emociones que no debería haber permitido que durara tanto.
Durante años, guardé silencio sobre lo que realmente sentía por Luke. Tal vez fue una amistad que siempre quiso ser algo más, o tal vez solo era una ilusión que nunca debió haber existido. Lo que sí sé es que Luke, de alguna manera, siempre tuvo un lugar en mi corazón, aunque tratara de negarlo. Pero esa mezcla de cariño y traición me hizo levantar barreras que nunca había planeado construir.
Lo peor de todo es que, aunque me duela admitirlo, una parte de mí sigue esperando que el chico que me levantó del suelo aquel día, el que me limpió las lágrimas y me dijo que no llorara, regrese. Pero no sé si ese Luke todavía existe o si todo fue una ilusión que inventé para protegerme de lo que en realidad es: el chico que me lastimó más de lo que jamás admitiré.
Presente
La cafetería estaba inusualmente tranquila, solo unos pocos estudiantes revisaban sus apuntes en silencio, sumergidos en sus propias preocupaciones. Gaby, sentada en una de las mesas más apartadas, intentaba concentrarse en su novela, pero sus pensamientos se interrumpían con recuerdos de los últimos días. Las palabras de Luke resonaban en su mente: "No soy ese tipo de persona". A pesar de su enojo, había algo en su mirada que la hacía dudar de su propia conclusión.
Mientras tanto, su teléfono vibró. Era un mensaje directo de @YourLove99, su misterioso seguidor que había sabido darle consuelo y apoyo en cada conversación.
@YourLove99: "Hola, Gaby. Hoy me acordé de una canción que creo que te gustaría. Se llama 'Tan fácil' de Kany García. Habla de cómo, a veces, complicamos lo que debería ser sencillo. ¿La conoces?"
Gaby sonrió. Era como si @YourLove99 siempre supiera qué decirle en el momento exacto. No podía evitar sentirse intrigada por esta conexión tan fuerte con alguien a quien ni siquiera conocía en persona.
Gaby: "Sí, la he escuchado. Y es cierto, a veces lo hacemos todo más complicado. Supongo que es nuestra forma de protegernos... y evitar lo que nos hace sentir vulnerables."
Se quedó mirando el teléfono, como si las palabras de aquel desconocido pudieran darle alguna pista sobre su identidad. Y de repente, una idea cruzó su mente. Había algo familiar en esa manera de escribir, en la forma en que entendía sus sentimientos. Sin pensarlo dos veces, envió un nuevo mensaje.
Gaby: "¿Sabes? Siento que eres alguien que conozco... Es extraño, pero siento como si pudiéramos habernos cruzado."
La respuesta de @YourLove99 no se hizo esperar.
@YourLove99: "Tal vez nos hayamos cruzado, Gaby. A veces la vida nos conecta con personas de maneras inesperadas. No descartes lo que sientes; a veces, nuestras corazonadas nos llevan a descubrir la verdad."
Gaby no podía apartar los ojos de la pantalla, un nudo de nerviosismo y emoción se formaba en su estómago. ¿Y si @YourLove99 era alguien más cercano de lo que imaginaba? ¿Y si era alguien de su propia universidad?
Decidida a descubrir la verdad, Gaby respiró hondo y escribió:
Gaby: "¿Podríamos vernos? Creo que necesito saber si mis sospechas son ciertas."
Después de unos segundos, llegó la respuesta que estaba esperando.
@YourLove99: "Por supuesto, Gaby. ¿Qué tal si nos encontramos mañana en el parque detrás de la biblioteca? Al mediodía."
Gaby sintió una mezcla de nervios y emoción. Finalmente, iba a conocer a su misterioso admirador, aquel que había sabido calmar sus miedos y comprender sus dudas. Cerró el chat y, con el corazón acelerado, comenzó a pensar en todas las posibilidades de quién podría ser.
Al día siguiente, Gaby se encontró esperando en el parque, su corazón palpitando más fuerte con cada minuto que pasaba. Y cuando alzó la vista, vio a alguien acercándose a ella… alguien que no esperaba.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.