El amor es Maravilloso como también Doloroso

PRÓLOGO

— No, no quiero — negó entre risas. Su voz sonaba ronca, hace un tiempo que nos estábamos riendo, soltando unas sonoras carcajadas. Aquel tono era tan maravilloso, digno de ser escuchado.

Estábamos en el parque, era de noche, cada fin de semana nos reuníamos en lo profundo del lugar. En este día, al igual que los encuentros pasados, nos encontramos riendo, llegando a terminar roncos o mínimo con dolor de garganta. En ese instante no nos importaba como terminamos, lo que importaba era nuestro momento el cual era mágico, hermoso, algo inefable.

Sí, si quieres — hice el intento de un puchero. No resultó ser tierno, pero si gracioso. Mientras él volvía a reír, yo me deleitaba escuchando su voz.

— No lo haré — volvió a negar. Aún tenía una sonrisa formada en sus hermosos y carnosos labios. Eran tan irresistibles y apetecibles.

Todo él era inefable. Su físico, su voz, su personalidad, sus gestos, su carisma, todo él, era encantador. Enloquecía a la persona que con tan solo cruzar palabra o  con solo una mirada.

Lo amé, lo amo y lo seguiré amando.

De repente todo se volvió borroso y negro

¿Que pasaba? ¿¡Por qué no estoy con él!? ¿Dónde estoy?

Estaba muy asustada, no sabía dónde estaba o que hacía aquí. No se veía nada.

— ¡Mereces morir!

De la nada salió un recuerdo fugazmente.

— ¡Eres una desgracia!

Otro

— ¡Te odio!

Otro

— ¡Es mejor si nunca hubieras nacido!

Y otro

— ¡Eres repugnante!

Otro más

— ¡Déjenla quieta! ¡Ella no tiene la culpa!

Le agradezco eso, y siempre lo haré

— ¿Tú no lo hiciste verdad? — la persona que me defendió, ahora duda de haberlo hecho

— ¿Qué? ¿Por qué preguntas? — con nerviosismo, pregunté

— Solo digo, no quiero quedar como tonto al tapar a una... — su pausa me dió temblor — ya sabes, eso. Lo que eres o bueno lo que dicen que eres — terminó con simpleza

— No lo soy — sin más, declaré

— Okay — de hay no me volvió a defender

No sé lo agradezco, para nada.

Los recuerdos no se detenían, pero ya no los escuchaba, solo eran caras que me torturaban cada miserable segundo de mi vida.

— ¡No, no, no! — empezé a gritar. Ya no los soportaba — ¡Déjenme! ¡No fue mi culpa! ¡Yo no lo hice! — con lágrimas brotando de mis ojos, empezé a gritar con más fuerza — ¡Lo amaba, y lo sigo amando!

— ¿Lo mandaron a matar? — preguntó el abogado. Su mirada trataba de analizar mis gestos.

— Afirmé — Se quienes fueron, pero no puedo decirlo. Si lo hago me van a matar

— ¿No es eso lo que quieres?

— Negué — No quiero morir, no lo merezco. Él fué el amor de mi vida. Él me dejó un regalo y es lo más preciado que tengo

Él me prometió estar para mí. Prometimos cuidar de nuestro regalo.

_________________

«INEFABLE: ALGO TAN INCREÍBLE QUE NO PUEDE SER EXPRESADO CON PALABRAS»

_________________

¡ Primer capítulo !
¿Cómo están mis bebés?
Estoy emocionada por empezar esta novela que desde hace tiempo digo: ¡Voy a completar la novela!

Bueno, espero lograrlo. ¡Ánimos!

Nos vemos en el próximo capítulo. Besos.

Atte: Karla Rodríguez :3



#6611 en Thriller
#2617 en Suspenso
#3585 en Misterio

En el texto hay: suspenso drama misterio romance

Editado: 13.06.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.