Despertando a la Realidad
Enrique Selver
Las apariencias importan en toda familia, y en la mia era aún mas, amaba y amo a mis padres, pero el que me alejen de la persona que mas amo me alejaba de ellos.
Casi no me gustaba ir a sus obras benéficas, cenas y almuerzos aburridos en donde solo importaban las apariencias, pero escaparme para ver a esa niña que me desconectaba del mundo en el que vivia me hacia la persona mas feliz.
.. -tú mamá no te regañara al saber que te escapaste de nuevo Enrique-...
... - descuida Elisa, le dije que saldria a dar un paseo con Camille, asi que eso es suficiente, pero era importante que viniera-...
... - y eso, pasa algo, te veo un poco triste-..
..-Elisa, me ire de ciudad Dorada por dos años, a estudiar la secundaria, pero volvere para seguir la universidad y al volver nadie podra separarnos-..
Ese dia vi en los ojos de Elisa una tristeza profunda, pues esos dos años serían una eternidad para mi, yo estaria muy vigilado para no escapar, pero gracias a mi incondicional amiga Camille, podia hablar con Elisa cada vez que se presentaba la oportunidad.
Los dos años aunque fueron eternos pasaron y no veia la hora de regresar a ciudad Dorada, Camille me mantenia al tanto de lo que hacia Elisa. Pero al Llegar tenia que advertirle a mi primo Joan, que frenará sus sentimientos por Elisa, solo asi ambos dejariamos de tener problemas, sin embargo me entere que después que me fui, estuvo cuidandola de los problemas que mi madre le ocasionaba, pero el se fue de ciudad Dorada antes de que pudiera agradecerle, mas eso no cambiaba el que el fuera un rival en el amor para mi.
Elisa y yo nos veiamos mas a menudo, iba a recogerla a su universidad de vez en cuando y para vernos mas a menudo mi amiga Camille penso en el plan perfecto, actuar como si fueramos novios, asi mis padres no me vigilarian, pero lamentablemente mi madre lo descubrio y dejo de confiar en Camille a causa mia.
Ahora los ojos de mi madre estaban puestos en los Alarcon, una familia adinerada de ciudad Dorada, eran dueños de una de las empresas mas grandes del país "Zeus Technology", dos hijos y dos hijas, una de ellas llamada Ann, el objetivo de mi madre.
Joven bien portada y perteneciente al club de la sociedad Elite, lo tipico, señoritas que se preocupan por su apariencia y cuanto dinero y poder tiene su familia. Lo poco que la conocí me di cuenta que no era nada de lo que yo queria, ella no se parecia a Elisa, pero para que mi madre no le hiciera males, tenia que fingir ser un romántico.
Mas aún sabiendo que a pesar de que Camille, se ofreciera a casarse conmigo y permitir que yo fuera feliz, yo no quería arrastrarla a ese modo de vida. Pues ya le había hecho mucho daño al no poder corresponder sus sentimientos.
*flashback*
... - Enrique yo te amo, es verdad, pero si tu me pides que me case contigo, para que puedas ser feliz con Elisa, yo lo hare con la mejor de las intenciones y no sufrire-....
... - como puedes decir eso Camille, no puedes sacricarte por mi y mis sentimientos, esta decidido, me casare con Ann Alarcon, tú no puedes cargar con eso, no dejare que cargues con todo eso-...
Ella estaba dispuesta a casarse conmigo y dejar que yo fuera feliz con Elisa. Pero no podia permitirlo, por mas tentadora que fuera la propuesta. Y saber que Elisa nunca lo permitiría, ella no, ella es un ser puro y que jamas dejaria que alguien mas se sacrifique por ella por lo que jamás permitiría que Camille llegue a tal punto. No había marcha atrás, Ann Alarcon tendría que cargar con todo.
Ser cariñoso con ella me costaba, aveces tenia que respirar profundo, cuando estaba con ella, y mas me extrañaba que pudiera haberse enamorado tan rápido, encajaba perfectamente en el papel de señorita que mi mamá quería, nunca pense que fuera tan fácil entrar en su vida, pero no era momento de lamentarse.
Con los dias me di la oportunidad de conocerla mejor, queria que almenos una vez casados hubiera algo que pudiera hacer que su cercanía no fuera tan dura para mi, en efecto, era cariñosa, en especial con los niños del orfanato manos unidas, almenos ya habia algo que me ayudaba a estar sin incomodidad junto a ella.
Los momentos mas duros vinieron cuando nos invitaron a la boda de Darren, buen amigo del padre de Ann. Elisa asistió a la boda, me carcomia el alma verla bailar con Joan mi primo, quien ahora vivía con nosotros, por mas que queria no podia frenar mis sentimientos. Yo queria ser quien bailará con ella, deseaba con todo el corazón que me dieran la libertad. No pude mas, cuando vi a Joan abrazarla, no pude evitar golpearlo y llevarme a Elisa fuera de aquel lugar, mientras en el auto teniamos una acalorada discusión.
... - por que golpeaste a Joan, tu prometida estaba en la fiesta y la dejaste Enrique, que van a decir tus padres-...
...- en este momento no me importa nada Elisa, solo tú, por favor pídeme que nos vayamos de ciudad Dorada y yo lo hare, pideme que deje a Ann y lo hare, no la amo y nunca lo hare-..