Decido no darle importancia a esto y voy al trabajo.
-Hola Arthur-saludo animadamente a mi amigo.
-Hola pequeña-me responde.-y Emma?
-Nosé, supongo que hoy no viene.
Él solo asintió algo decepcionado de mi respuesta.
Después de unas horas que me parecieron eternas Arthur me da un aventón para llegar a mi casa ya que está lejos.
Me quedo en el sillón esperando a Emma,no recuerdo en que momento me dormí.
Me despierto con el insoportable sonido de ese aparato del demonio llamado ALARMA.
Veo la hora y ya es muy tarde,definitivamente madrugar no es lo mío.Subo a darme una ducha y me topo con una Emma con un aspecto mucho peor que el mío.
-Emma dónde te habías metido?
-Me quedé en casa de mis padres, ayer vino a casa un primo lejano.
-Ah entiendo.
Esto no me cuadra, ella siempre me avisa y sobretodo es muy madrugadora, supongo que no quiere contarme lo que sucedió.
-No es que no te quiera contar simplemente eso fue lo que pasó.-dice haciendo que me sobresalte, ya que a veces parece que fuera un vampiro o algo así,ya que adivina mis pensamientos pero sé que eso sería absurdo cierto?
-Emma no vas a ir al instituto?
-Sí,sólo que se me hizo tarde.-okey,lo admito está está muy raro.
-Ah entiendo,nos vemos en el trabajo.
-Está bien,bye.
Aproveché estos días que estoy suspendida para arreglar la casa,ya que la habíamos descuidado.
Y así pasé la semana:limpiando la casa,luego al trabajo y así.Ha sido horrible ya que Emma ha estado super extraña y distante,pero cada vez que le pregunto que sucede,evade la pregunta o dice que está cansada y se va a dormir.
Estoy odiando esta situación.