12 de enero de 2978…
-Llévensela-
-¿Qué está pasando? ¿Quiénes son ustedes?- tratan de caminar hasta donde estoy sentada.
-Llévensela rápido- tomo con fuerza el pequeño cuerpo que tengo entre mis brazos.
-ALEJENSE DE MI- tengo miedo, no sé quiénes son estos hombres.
-Entrégales a la bebe - ¡¿Cómo?! Mi madre se tuvo que volver loca.
-¡NO! Nadie se llevara a mi hija – la abrazo más a mi pecho.
-Señor, usted dijo que ella era consciente de esto, y no veo que se así - ¿mi madre planeo esto?
-LO QUE ELLA DIGA NO IMPORTA, LLEVENSE ES COSA DE AQUÍ- esto no puede ser real.
Uno de ellos me toma de los brazos, y el otro me quita a mi pequeña niña.
-NO, NO, DEMEN A MI HIJA-
-VAYANSE, LLEVENSELA-
-Mamá, no, mi hija, regrésame a mi hija-
-Ella ya no es tuya, y ella nunca tuvo que nacer-