“Te mereces todo lo que hiciste a otros” lo leí en un posteo de mí adorada amiga Yamila. Es un dicho que siempre lo escuche, pero la imagen entre paréntesis contenía lo siguiente, que nunca reivindiqué (tú sabrás si eso te da miedo o felicidad) es una oración y un contexto fuerte, con mucho peso para meditar y reflexionar. Nunca, lo retuve en mi mente de esa forma. Porque en algunas situaciones lastimamos sin querer, y a algunas personas lastimamos y ni siquiera lo notamos, puede ser en alguna palabra, un gesto, una mentira, etc. La mente humana individual es muy compleja y cada cabeza es un mundo. La cuestión de la primera oración “te mereces todo lo que le hiciste a otros” es certera, no mentiré, durante muchos años hice referencia a esa frase, no seré hipócrita. Entrando en una época más adulta, como la que estoy transitando. Cambie la oración por “que dios o el universo lo ayude” dejando de lado emociones vengativas, que con los años aprendí, que la ira, el rencor nos lastiman a nosotros y a nadie a más. Y entrando en este juego de palabras, yo me replanteo “tú sabrás si eso te da miedo” ¿y si esa persona obro mal, sin darse cuenta? ¿Tiene que merecer sufrir? Si, lo realizo consciente a mi punto de vista, y me refiero a actos pequeños con intención de lastimar, no se lo deseo. Porque la persona que lastima, y al principio cuesta entenderlo, fue muy lastimada. Y cree que haciendo daño, que otro padezca lo que esa persona sufrió, le es gratificante, es una cadena que no se corta, creando un círculo vicioso. Y todos podemos arrepentirnos, pero el dolor causado esta efectuado, lo importante es reconocerlo y pedir perdón “saber pedir perdón es un privilegio”, no todas las personas admiten su error. Es un poco contradictorio porque la segunda parte “tú sabrás si eso te da felicidad” acá en esta oración, también sabemos cómo obramos y si ayudamos al prójimo desinteresadamente, tu vida te brindará grandes momentos de felicidad. Si ayudas por interés, no. En cuestión y redondeando el tema “te mereces todo lo que le hiciste a otros” sostengo, desde mi humilde opinión, que es una frase fuerte. Creo que nadie es juez y “todos tenemos un muerto en él ropero” otro dicho muy conocido. Y concluyo, lo que pude deducir de estas frases que me dejaron repicando… el que forjó actos malos sin darse cuenta o que no es consiente, puedo introducir otro dicho “el que esté libre de pecado que arroje la primera piedra” y el que hizo el bien a otros, se merece bendiciones y que su camino en la vida o la cruz que lleva no sea tan pesada, si realmente actuó desde el corazón.