El arte de soñar

Capítulo 2 Un encuentro casual

Nunca pensé en mi corta vida que el simplemente hecho de compartir ideas y opiniones de libros al igual que leerlos sería tan tranquilizante como entretenido para mí, aquella hora que podría parecer eterna para más de uno por fin había terminado, y el objetivo de todo esto se podía cumplir.

-bien ve con Liz no en necesario que me quede-

-¿seguro?-

Por fin la oportunidad de Esteban se presentaba y no la desperdiciaría mientras él podía ver a esa chica, alguien sonriente, alegre con ojos azules y cabello color rubio, podía ver a mi amigo irse y en realidad no me importaba, simplemente caminaría y me iría, pero de nuevo aquel sonido armonioso me detuvo esa chica de nuevo, junto a más personas que apreciaban la música que producía.

-¿sigues despierto amigo?-

Voltee para ver a esteban y Liz ambos parecían que se dirigirían al salón donde provenía esa música

-pensé que se irían-

-perdón, estamos esperando a mi amiga, vivimos cerca así que usualmente nos vamos juntas-

-ahora que lo recuerdo, ¿no usualmente son tres?-

Esteban tenía un talento nato al momento de hablar con los demás, sorprendentemente más hábiles de lo que se esperaría de alguien que se junta con una persona tan introvertida.

-sip usualmente somos tres pero por el taller y las horas extras pues simplemente nos vamos las dos-

-bueno entonces yo me voy-

Sinceramente no quería ser el mal tercio y aunque estuviera hablando con otra persona, preferiría no presenciar y no interponerme en todo lo que intente Esteban, eso es lo que en lo personal preferiría aunque al parecer no importa lo que yo prefiero.  

-¿Por qué te vas?, vámonos juntos-

Me hacer que a el para evitar que alguien más escuchara y susurre.

-no se supone ¿que el punto de todo esto es que estén solos?-

-vamos de todos modos estará su amiga, tal vez incluso por primera vez dejes de ser un amargado-

Decidió que susurrar era suficiente y fue a hablar con Liz mientras esperábamos a aquella amiga, sinceramente no me molestaba aunque entre más me pudiera relacionar de la música y de especialmente los músicos estaría mejor.

-vámonos Sara-

-sí, sí, solo dame un segundo-

Voltee por curiosidad y busque la voz de aquella chica, tanto Esteban como yo no dijimos ni una sola palabra, ambos supimos porque nos quedamos callados aunque esperamos de todos modos pacientemente que la mencionada Sara empacara sus cosas y saliera tranquilamente.

-hola-

-o si, si perdón no los conoces-

Liz lo entendió rápidamente Sara no nos conocía así que era mejor presentarnos rápidamente para poder presentarnos, note como esteban más que sorprendido tenía una sonrisa burlesca, él lo entendía mejor que nadie entendía por qué estaba sonriendo con malicia porque me conocía, alguien que conoce tu pasado es muy fácil que pueda burlarse de aquello que te desagrada.

-el chico con lentes es esteban-

-o entiendo, sabes Liz me ha contado sobre ti-

-espero que este a las alturas de la expectativas-

Esteban siempre hacia eso al conocer a alguien intentaba iniciar con una broma, jamás entendí su sentido del humor la primeras veces que conocía a alguien sin embargo siempre funcionaba para el.

-y él es su amigo-

Como esperaba no conocía mi nombre claro que no lo conocería.

-soy Gabriel, amigo de esteban y al parecer nuevo miembro del taller de literatura-

-¿entraron en el taller de literatura?-

-sí, pensé que sería bueno tener un taller usualmente no solemos estar en alguno pero pude convencerlo de que era buena idea, ya saben salir de la zona de confort, poder aprender y conocer a nuevas personas-

Esteban sonrió tranquilamente dando un momento ameno y empezando a hablar con Liz mientras empezábamos a caminar hacia la parada de autobuses, mientras que decidí rezagarme para darles privacidad junto a Sara.

-supongo que ambos sabemos que esos dos van a terminar saliendo ¿verdad?-

Aquella chica con un estuche de guitarra color negro igual que su cabello, ojos cafés, piel de porcelana y con una altura similar a la mía, espero tranquilamente mi respuesta.

-yo no puedo hablar por el-

-bueno, supongo que tienes razón-

-aunque yo apostaría que si ella decide estar con él no tardaran mucho en aceptarlo-

-vez, es lo mismo que les dije, acepto tu apuesta, yo digo que mmmm 3 meses es suficiente-

Una sonrisa tan clara y divertida, aunque no me gustara hablar mucho con algún músico, simplemente me deje llevar por el momento.

-yo digo que 2 meses-

-sabes que perderás la apuesta ¿verdad?-

-ambos tenemos la misma ventaja, si tú dices algo a tu amiga Liz, yo le diré algo a mi amigo Esteban, así que simplemente el tiempo lo dirá sin que ningún de los dos pueda interferir-



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En el texto hay: romance, musica arte, sueño

Editado: 27.11.2021

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