El asesinato de Creeg Ston

PERSECUCIÓN (parte I)

El oficial Cleithon regresó al pueblo a juntar a las personas que seguían vivas y ahí quisieron planear algo para detener a Creeg Ston pero por ahora las circunstancias no lo permitían y decidieron esconderse hasta que pudieran hacer algo para detenerlo: 
-Tenemos que hacer algo para detenerlo, pero primero esperemos a que pase el invierno… 
En el fondo se escuchó una voz femenina: 
-Tenemos que hacer algo ahora mismo o si no él nos matara uno por uno… 
-Aunque hagamos algo ahora no podremos contra él, debemos esperar a que el invierno pase para poder hacer algo… 
Al final todos estuvieron de acuerdo menos ella así que se separó del grupo y desde ahí nadie la volvería a ver. Todos se fueron a la comisaria del pueblo en donde estarían seguros y se instalaron, pasaron unos minutos cuando un ruido se escuchó afuera, nadie saldría a ver qué es lo que pasaba afuera pues todos tenían el mismo miedo, morir en manos de Creeg Ston. Creeg Ston seguía afuera esperando la oportunidad de tener a alguien cerca y solo para poder asesinarlo y así hasta terminar de matar a todos los del pueblo para seguir con otro pueblo y así aumentar su lista de asesinatos. El oficial Cleithon era el encargado tanto de la comida como del agua y las cobijas, él era quien haría las primeras guardias de la noche. Al día siguiente cuando todos aun dormían incluso el oficial Cleithon, uno de los hombres encargados de la guardia de la mañana salió a tomar aire por solo un momento pero ese tiempo fue suficiente para que Creeg Ston atacara, el hombre no quiso poner en peligro a los demás así que salió corriendo a lo más profundo del bosque a despistar a Creeg Ston y así salvar a los demás, aun así sabía que podría morir ahí dentro pero eso por ahora no le importaba, solo quería terminar con todo eso. Mas lejos de ahí, el hombre tropezó y Creeg Ston lo alcanzo y logro golpearlo tan fuerte que lo desmayo, aun no lo mataba, lo llevo a la casa en la que vivía y ahí lo amarro a una viga, cuando despertó lo empezó a torturar de muchas maneras, lo golpeaba con un palo o le quemaba las manos y los pies con un encendedor, pero no lo mataba aun, solo quería divertirse por un rato con sus gritos y su dolor: 
-¿En dónde están los demás? 
-No te lo voy a decir, prefiero morir antes a que lo sepas… 
-Claro que morirás, me lo digas o no me lo digas, así que te cumpliré tus caprichos ahora mismo… 
Así que tomo el encendedor y quemo la casa desde afuera para que el muriera quemado, el humo llego hasta la comisaria y todos se escandalizaron, el oficial Cleithon calmo a todos y ya no se escuchó ruido, al poco tiempo se escucharon los gritos de aquel hombre que moría quemado mientras Creeg Ston reía afuera de la casa. Todos se alarmaron más al escuchar los gritos del hombre y era más difícil para el oficial Cleithon controlar a todos esta vez. Creeg Ston escucho el alboroto y  trato de llegar hasta allá pero una tormenta se acercaba, era demasiado arriesgado para él ir así y solo entro a una casa que le quedaba cerca, después de la tormenta ya todos en la comisaria estaban tranquilos y en silencio, por lo que Creeg Ston no podría encontrarlos y solo fue de casa en casa para poder matarlos a todos como lo hizo antes, quemándolos a todos juntos, antes de que Creeg Ston llegara a la comisaria, el oficial Cleithon los saco a todos, se dirigían hacia una bodega que se encontraba afuera del pueblo, todos llevaban comida, agua y cobijas para no tener frio durante la noche. Tinna Coulson se quedó atrás y nadie lo noto, ni siquiera cuando ya estaban instalados en la bodega, todos contaron los suministros de comida y agua y vieron que solo tenían para una semana de alimentos, entonces no les daría tiempo dejar que pasara el invierno para poder detener a Creeg Ston: 
-Ya no podremos esperar más para acabar con esto oficial Cleithon, debemos hacer algo antes de que la comida se termine… 
-Sé que debemos hacer algo pero es muy peligroso salir en estas condiciones a buscarlo, podría encontrarnos antes y no me gusta la idea de perder a alguien más… 
Ya no sabían que hacer y uno de ellos se propuso como voluntario para encontrar a Creeg Ston y así matarlo para que no causara más daño al pueblo. El oficial Cleithon se lo impidió pues era demasiado arriesgado dejar salir a solo un hombre allá afuera así que otros dos lo apoyaron y ahora serian tres los que buscarían a Creeg Ston allá afuera, Michael, Petter y Simon se prepararon para salir a buscarlo, tomaron linternas, cuchillos y palos para asesinar a Creeg Ston. Todos adentro seguían protegidos de Creeg Ston, el oficial Cleithon proporcionaba alimento y agua a las personas aunque en porciones muy diminutas para que toda la comida durara un poco más. Allá afuera cuando Michael, Petter y Simon llegaron al pueblo una gran tormenta se acercaba y entraron a la primera casa que encontraron, solo que cuando entraron se encontraron con una gran sorpresa, ahí estaba una de sus compañeras, Tinna Coulson: 
-¿Qué estás haciendo aquí? Deberías estar con los demás… 
-Me he quedado un poco atrás y los he perdido de vista quise buscarlos pero fui atacada por algo allá afuera, no vi que era, solo salí corriendo y justo cuando comenzó la tormenta desapareció y entre aquí. 
Creeg Ston seguía en la misma casa y no quiso salir así pues era mucho más arriesgado que la vez anterior. 
 



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En el texto hay: aventura, suspenso

Editado: 06.09.2019

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