26°Tres hermanos

Trago saliva al escuchar la palabra <<sobrino>> , mi cuerpo se tensa y no puedo evitar la incomodidad que me causa.

Me mantengo en la misma posición con los brazos cruzados frente a él y Holland a mi lado.

— ¿Y bien? — insiste y agradezco para mis adentros cuando escucho a Holland aclararse la garganta para poder hablar.

— Como ya dije, Eric no murió en el incendio como te hicieron creer hace años – comienza

— Eso puedo verlo — dice tajante al escucharlo decir lo obvio — Lo que quiero es saber es, ¿porque carajo me vengo enterando de esto hasta ahora? Quiero nombres, direcciones, quiero todo para poder refundir a todos los involucrados en prisión — demanda molesto — Quiero saber de donde sacan tantos cajones un pueblo de mierda al tratar pasar por sobre la ley.

<<Creo que después de todo si nos parecemos en algo. En el carácter >>

— ¿Escuchaste sobre el caso de Nashville? — pregunta el oficial y Jackson asiente

— Seguimos sin encontrar al psicópata. ¿Pero eso que tiene que ver?

— Ese psicópata era tu hermano. Jonathan — suelto antes de que Holland responda

Frunce el ceño confundido y por un segundo baja la guardia de <<Policía malo>>

— Explícate — le ordena a Holland quien no duda en ir a la mesa con la carpeta de información

— Springholl no es lo que aparenta

<<si me dieran un dolar por cada vez que escucho esa frase>>

— Los asesinatos en Nashville coinciden con los que han ocurrido en Springholl, y en Texas con los amigos de Eric — continúa

— No sabía de los asesinatos en Springholl — lo interrumpe

— A eso me refiero cuando digo que Springholl no es lo que aparenta ser — repite — Accidentes de auto, Homicidios, atentados, mentiras, falsas muertes, archivos que son eliminados, ocultan evidencias

— ¿Como saben todo esto?— pregunta curioso mientras analiza los papeles sobre la mesa

— Mis amigos y yo hemos estado investigando — respondo — el asesino nos ha dado pistas que nos han ayudado a descubrir parte de la verdad, como el hecho de que mi nombre real es Jason y que soy el hijo de un Asesino

— Mi hermano murió

— Pero el otro sigue vivo

Me analiza

— ¿Que sabe sobre Julian Barnes?— pregunta Holland

— Tengo un hermano tres metros bajo tierra y el otro desaparecido desde ese dia, no he sabido nada de Julian en años — responde tajante — ¿Porque creen que es Julian? Puede ser cualquier otro desquiciado de este pueblo

— Me dejó una nota hace unos días y firmó con J.B

— Somos tres hermanos con las iniciales J.B, incluyendote Jason — alega

— Mi nombre es Eric — reitero sacando la poca paciencia que me queda.
<<¿hablar con el es como hablar conmigo? Es molesto y me saca de mis casillas su actitud >> — Yo no me auto envié la estúpida nota, y claramente tu tampoco ya que no sabias de mi, pero Julian sigue afuera, probablemente vigilandome al igual que a mis amigos.

— ¿Porque mi hermano mataría personas? — cuestiona — y lo de Nashville es una estupidez — encara a Holland — No puedo creer que me hicieras venir hasta aquí con cuentos baratos de un adolescente al que medican por esquizofrenia — vuelve hacia mi — eres mi sobrino, y no entiendo como mierda fue posible que unos ineptos te adoptarán sin contactar a algún familiar antes de hacerlo

— ¡No soy esquizofrenico! — lo encaro tomando su mismo tono de voz — Tu maldita familia son un montón de enfermos que lo único que me han traído a la vida son desgracias. ¡Mató a mi novia, Mató a dos de mis mejores amigos, Mató al padre de Jesse, al padre de April, su madre se suicidó por eso, y por su culpa todos me tachan como un psicópata! ¿Quieres saber que son esas malditas píldoras que supuestamente son para la esquizofrenia? — gruño hirviendo de la ira al recordar todo — ¡son malditas drogas que me han hecho olvidar toda mi puta niñez! Me han mantenido dopado toda mi vida para que yo no recordará quien era realmente y todas las malditas mierdas que Jonathan ha hecho — no dice nada pero se mantiene firme escuchando como exploto — maldigo el puto momento en que llegué a este pueblo de mierda, maldigo el momento en que nací siendo un Barnes — suelto dándome media vuelta para tratar de tranquilizarme un poco pero es imposible, todo tiene punto de quiebre y yo llegué al mío. Lo único que quiero es gritar y sacarlo todo — Este pueblo oculta cosas para aparentar ser perfecto cuando en realidad es un maldito nido de ratas, son unos hipócritas que señalan a Black Hollow por ser el hogar de criminales pero no ven que son iguales o peores que ellos. Al menos en Black Hollow no fingen ser perfectos.

— ¿Te drogaron? — pregunta. <<¿de todo lo que dije eso fue lo unció que le llamó la atención?>>

— Toda mi vida ha sido una maldita mentira — resoplo — No necesito que vengas y seas el tío que nunca tuve, ni mucho menos que te hagas cargo de mi para tratar de recompensar el tiempo perdido. Lo único que necesitamos es que seas un agente del FBI y nos ayudes a detener a tu psicópata hermano, porque me hice la promesa de hacerlo pagar por la muerte de Jess cueste lo que cueste.

— Eric tranquilo... — habla Holland tratando de tomar mi hombro pero lo alejo

— Esta fue tu idea — le reprocho — a mi el me importa una mierda. Y si no nos ayuda ya veremos que hacer pero que se largue del pueblo porque no me interesa ser un Barnes — lo miro — ya tengo un nombre y un apellido. Y aunque los Hale sean unos mentirosos y quiera odiarlos con todas mis fuerzas, no puedo porque me dieron un hogar, una familia, una hermana, me dieron cariño y eso no puedo olvidarlo de la noche a la mañana, aunque quiera. — vuelvo a centrar mi atención en Holland — Fue un error acudir a ti — espeto — y fue un error que lo trajeras aquí — suelto y me encamino a la puerta dispuesto a marcharme pero..

— Tu madre sigue viva  — Suelta Jackson haciéndome detener en seco antes de poder abrir la puerta. Mi pulso se acelera y por un momento siento como si me fuera a dar un paro cardíaco — Evangeline acudió a mi cuando se enteró del incendio en Springholl — continúa — no salieron noticias pero ella siempre estuvo al pendiente de ti desde lejos y fue como se enteró y como me enteré yo de lo que había sucedido — me giro y lo observo en silencio sin saber como reaccionar — La destrozó