El sonido estridente de la alarma me taladra el cráneo- ¡Por Dios! - quien creo ese adefecio debe arder en los confines del infierno, odio las mañanas, detesto madrugar, soy un ser nocturno, me gusta la noche y más cuando hay luna llena, anoche me acosté muy tarde ensimismada en mis pensamientos.
La alarma vuelve a sonar avisándome que ya han pasado 10 minutos del primer aviso para salir de la cama para ir al instituto, odio el instituto, bueno creo que en las mañanas odio todo.
-¡Neftally cielo ya ha sonado dos veces cariño, sal de la cama o se te hará tarde! - me grita mi mamá desde la cosina, seguro ya está preparando el desayuno.
-YA PARA EL CULO DE LA CAMA POR QUÉ MADRE VA SEGUIR LLAMANDO- me dice mi loba Tea, ella definitivamente odia las mañana más que yo.
-Mmmmm uggh- pateó las sábanas y me levanto, entro al baño y hago mis necesidades, me visto con unos jeans, una sudadera rosa neón y unos tennis blancos, miro en el espejo de cuerpo completo, me veo bien, la verdad es que me veo muy bien-digo analizandome-, soy muy bonita, con una piel súper blanca y suave, tengo el pelo rubio y abundante casi blanco, tengo los ojos grises, nariz respingona y labios saludables, no soy ni muy alta ni muy bajita mido 6,7 atlética con una figura esbelta y ágil en un mes voy a cumplir Dieciocho años y también es cuando terminó el instituto para luego ir a la universidad, estoy muy deseosa de que llegue ese momento, voy a estudiar medicina. Peino mi cabello y me hago una coleta.
Salgo de la habitación y bajo las escaleras, me llegó el delicioso aroma del desayuno.
- ¡Buenos días papá!- me acerco a mi padre y le doy un beso en la mejilla. -¡Buenos días mamá!, - hago lo mismo con ella que está delante de la estufa- e ignoro a mi hermano que está sentado al lado de mi padre.
-¡Oye, oye, pequeña y yo!- levanta las manos como si no lo estubiera viendo, sigo de largo a mi asiento y lo ignoro, mis padres se rien de los ademanes de mi hermano por llamar mi atención.
- jajajajjjaja ya gigante voy a darte tu medicina diaria- me acerco a el y le estampó un beso mojado en la mejilla lo que hace que se retuelsa para salir de mi abrazo con cara de asco, así es mi familia todo risas y amor por todos lados.
-Que asco Nef, no seas tan asquerosa- dice mi hermano limpiando su cara, muerto de risa, todos los días es lo mismo, dice que le da asco Pero le gusta que lo abrace.
Las mañanas comienzan con desayunos ruidosos y llenos de risas, donde las bromas y los planes para el día se compartían con entusiasmo, somos una familia normal por así expresarlo, está mi papá Robert Simons un lobo de rango beta de nombre Bret, muy fuerte y respetado en la manada por ser uno de los mejores querreros, a pesar de su exterior fuerte es un devoto esposo y cariñoso padre con pelo negro y rasgos atractivos muy alto y dormido, nunca e visto un amor como el que tienen mis padres, quiero algo así para mí.
Luego está mi bella y maravillosa madre Carolay, ella es una loba de rango Omega llamada Cecil, pelo Rubio y ojos grandes azules y es sin duda la mujer más amable y bondadosa de todo el mundo, su familia es su vida, y lo expresa cada vez que puede.
Mi hermano es la copia exacta de mi papá, comparten tanto personalidad como físico y el mismo nombre, Pero le decimos Rob tiene veintiun años y está por terminar la universidad, su lobo es Beta y se llama Bran, muy fuerte y dedicado a su entrenamiento para convertirse en querrero cuando el próximo Alfa tome posesión del puesto.
Terminamos el desayuno y nos ponemos todos de pie, mi hermano sale primero de casa por qué su universidad queda a 45 minutos de casa, mi papá hace lo mismo se dirige a la casa de la manada hacer lo que sea que haga ahí, yo voy directo a la cárcel, salgo de casa y entro a mi pequeño bebé un precios mini cooper convertible, regalo de mis padres por mis quince, lo amo.
Me dirijo al instituto escuchando mi lista de reproducción para conducir, cuando llego al estacionamiento cambio mi semblante, no tengo amigos, nadie quier hablar con la chica que supuestamente no tiene loba, mejor así, no es que sea una marginada ni nada, los maestros son muy buenos conmigo y hay algunos que otros chicos que me hablan y me saludan, pero nadie se detiene más de unos segundos, se suponía que tenía que transformarme en mi loba a los Quince años y luego poder reconocer a mi mate a los Diecisiete, Pero a ojos de los demás no lo e echo y por lo tanto soy defectuosa, no tengo valor alguno para ellos.
-SABES QUE ES MEJOR ASI, NO NECESITAS A NADIE, ME TIENES A MI, A PAPÁ, MAMA Y EL TONTO, ¿QUE MAS NECESITAS?- me dice tea
-Sabes que por eso te amo mi amor, jajajaja eres la mejor, Pero te estás olvidando de alguien.-
-SIIIII, EL COMPLETARA EL CÍRCULO CUANDO NOS RECONOZCA XOMO SU MATE, YA QUIERO QUE NOS OUEDA NOTAR.- da muchas vueltas y volteretas emocionada.
-Y pensar que eres una loba ansentral, viéndote así pareces una cachorrita,- la molesto
-AHHHHGGG YA ME DAÑASTE MI MAÑANA CON LO BUENA QUE ESTABA YENDO!!!- dicho esto cortó el link.
El pasillo vibraba con una sinfonía de risas forzadas y pisotones apresurados de adolescentes. Yo, navegaba por este río de hormonas y expectativas, aferrándome a mis libros como si fueran un salvavidas en un mar de popularidad superficial. Y allí estaban ellas, el trio plástico que gobernaba los pasillos con una mezcla de labial brillante y miradas condescendientes: Lyra Blackwood, en el centro de su constelación de seguidoras, Tiffany y Brittany (o quizás eran Brandi y Chelsea; la verdad, sus nombres rotaban más que las fases de la luna).
-"Oh, miren,"- siseó Lyra, su voz un hilo de terciopelo con alambre de púas, mientras nos bloqueaban el paso frente a la puerta de Transformaciones. Sus ojos verdes, tan gélidos como un lago en invierno, me recorrieron de arriba abajo.
-"La pequeña Luna parece haberse desorientado de nuevo. ¿Sigues buscando tu loba perdida, Simons? ¿Quizás la dejaste en tu imaginación?"-
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sobrenatural y romance, personajes magicos, amor predestinado
Editado: 14.05.2025