El Bosque de las Almas Perdidas

La Batalla de las Almas (Capítulo 10)

Por fin, el momento había llegado. Amy y Diana, la semi-hada “sin alma” y la reina hada oscura se disponían a enfrentarse cara a cara en una última confrontación por el Bosque de las Almas Perdidas. Es aquí donde se define la supervivencia o la destrucción total de todas las almas que habitan el enigmático lugar, así como los árboles y las criaturas existentes en él.

La bruja Sanaél era la única espectadora presencial de la terrible batalla que estaba por desatarse.

 

— “Las almas de los árboles están asustadas. Es como si ambas mujeres desplegaran un enorme poder para confrontarse entre sí. Amy posee un aura blanca pura y bondadosa, que se fortalece con el valor que ha adquirido a lo largo de su viaje con Troy y el resto de sus amigos, por lo que se ha vuelto más fuerte. En cambio Diana, posee un aura negra corrupta y malvada, que a pesar de perder fortaleza, sigue teniendo un poder extremadamente grande y temible. Ahora las dos se van a enfrentar a muerte y el choque está provocando que las almas de este bosque se atormenten unas contra otras en un intento desesperado por soportar la pesada carga de presenciar un choque de fuerzas dispares. Amy, me gustaría poder ayudarte, pero ya no tengo fuerzas para continuar luchando. Ahora el destino de este bosque está en tus manos. Esta será… La Batalla de las Almas.” —Pensaba la veterana bruja.

Y de inmediato las dos hadas se lanzaron al ataque, provocando que el choque de fuerzas se expandiera por todo el bosque.

A corta distancia, los amigos de Amy presintieron aquel choque mientras se enfrentaban cara a cara con los aliados de Diana, los guardianes de sombras, quienes los instaban a defenderse sin darles posibilidad alguna de contraatacar.

De vuelta en el lugar donde comenzó la batalla, Diana comenzó el ataque lanzando conjuros de magia oscura para derribar a su rival, pero Amy, a diferencia de la vez anterior, no esquivo los hechizos, sino que esta vez extendió su mano y dispersó el conjuro a todas direcciones, neutralizando los hechizos del hada oscura.

Aquella se sorprendió por el poder de su rival, pero no se inmutó ante sus nuevas habilidades y continuó atacando a Amy sin piedad.

Sin embargo, la joven semi-hada se defendía instantáneamente de los ataques de su enemiga y con gran pericia, logro dispersar las energías malignas de Diana, a tal punto que ella prácticamente no podía lograr su propósito de aniquilarla de un solo conjuro. La reina hada oscura comenzaba a perder la paciencia.

 

— ¡Asquerosa hada de pacotilla! ¿Cómo hiciste eso? —Se preguntaba furiosa Diana.

Y luego de eso la poderosa hada oscura decidió usar otros conjuros para intentar neutralizar los nacientes poderes de Amy, cosa que logró transitoriamente sin problemas. En cuestión de segundos, la semi-hada quedó paralizada por un poderoso hechizo de anulación mágica que la paralizó al instante, lo que aprovechó Diana para golpear a su rival de una patada y derribarla contra el suelo.

Después de aquello, Diana se dispuso a darle el golpe de gracia a la desvalida Amy, pero fue rescatada por Sanaél, quién utilizó las pocas energías que le quedaban para activar un hechizo de protección contra el ataque final de su antigua aprendiz.

 

— ¡Me sorprende que todavía puedas hacer conjuros después de la paliza que te dieron mis guardianes! —Exclamó irónica Diana—. Lo malo es que ese fue tu último hechizo.

— No te confíes Diana. —Respondió Sanaél—. Tal vez no tenga suficiente poder para vencerte, pero si puedo ayudar a aquella quien te va a derrotar.

— ¡No me hagas reír vieja desdichada! ¿Para qué depositas tu confianza en esa tonta pseudo-hada fracasada que ni siquiera es capaz de tocarme un pelo? Sabes que ella perderá esta batalla. Es débil.

— ¡Te equivocas Diana! —Intervino Amy en ese momento—. Tal vez no pueda hacer conjuros tan poderosos como los tuyos, pero si puedo repeler tus ataques sin importar las consecuencias. ¡No permitiré que este bosque sea destruido por tu egoísta ambición de gobernarlo a costa de todos los seres que viven aquí!

Y en forma inmediata Amy recuperó la movilidad de su cuerpo y extendió su brazo, lanzando su poder contra la misma Diana.

 

— ¡Toma esto! “MANZIO”

Y una extraña energía salió de la palma de la mano de la semi-hada, lo que se tradujo en un relámpago amarillo que impactó de lleno contra el cuerpo de Diana, haciendo que cayera al suelo bruscamente. La reina hada oscura, tras recibir el impacto del hechizo de Amy, se enfureció como nunca antes e intentó contraatacar con un conjuro, pero repentinamente, no pudo ponerse de pie. Había quedado inmovilizada por el repentino hechizo ejecutado por su rival y considerablemente malherida a consecuencia de aquello. Incluso Sanaél, quién ayudaba de cerca a Amy, se sorprendió por la ejecución de ese conjuro, quedando estupefacta por lo ocurrido.

 

— ¡No puedo creerlo! —Exclamaba sorprendida Sanaél—. Jovencita, ¿Cómo es que sabías de ese hechizo?

— ¡No lo sé, señora Sanaél! —Respondió Amy—. Solo… lo dije y ya.

— ¡No es posible! Ese es un hechizo de nivel avanzado que solo puede ser ejecutado por una bruja o alguien con poderes mágicos muy desarrollados.



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En el texto hay: espiritus, brujas, hadas

Editado: 12.11.2020

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