Empecé a soñar con el mismo sueño de siempre; estando en el bosque de los cerezos de noche con sus millones de estrellas y con su luna brillante de tono rosado.
Luna de las Flores.
Pude recordar el nombre de ese eclipse; pasa una vez al año en el mes de mayo, y en esa fecha, muchas flores empiezan a florecer de noche como llegada de primavera.
En el mismo proceso de siempre, estoy parada en el mismo bosque con la noche acompañada con la luna de rosado claro y estando parada en el sendero sin poder caminar ya que las imágenes llegaron en mi mente otra vez.
Cielo rojizo. Árboles secos. Alas de ave y de murciélago. Ojos azules. Ojos rojos.
Esta vez llegaron más pero horrible.
Fuego. Sangre. Sonidos de espadas. Gritos de la gente...
Parecía una guerra. Y cuando abrí mis ojos volví a estar en el lugar donde estaba el hombre que apareció de la nada y que gritaba. Esta vez estaba sola, sin saber que hacer. Luego de un rato, aparece una persona parada lejos de mí; no se veía quien es ya que llevaba la capucha y la capa negra puesta, cubriendo todo el cuerpo pero tenía el cabello suelto. Era largo y liso de color rojo, y cuerpo se vería pequeño. Escuché a la persona susurrar pero no lo escucho. Me acerqué un poco a la persona y a medida que me acercaba, ví sangre saliendo de la capa y me detuve en seco aterrada.
—Huye–lo escuché. Era una voz femenina–Huye–volvió a repetir y yo solo la mirada aterrada–HUYE–gritó demasiado fuerte que resonó un horrible eco en mis oídos haciéndome taparlos.
Era demasiado fuerte y luego los otros gritos llegaron a mis oídos e intento taparlos pero no sirvió y llegaron las imágenes con sonidos demasiados fuertes como los que ví en mi mente pero con sonidos. Escuché sufrimiento y miedo de la gente, espadas sin detenerse y para terminar, el grito de hombre que lo escuché anteriormente y una imagen de él llegó en mi mente pero es muy borroso. Todo fue borroso.
Me desperté de golpe casi a punto de gritar y estoy cubierta de sudor frío. ¿Qué rayos está pasando con el sueño que ahora se convirtió en una pesadilla? Me sobresalté cuando la puerta de mi habitación se abre de golpe y veo a mi padre muy histérico con un bate de béisbol en sus manos listo para ser usado.
—¡¿Qué sucede?!¡¿Qué ocurrió?!¡¿Estás bien, Aranza?!–preguntó apresurado y muy alterado. Está despierto con los ojos muy grandes como platos y no controla el tono de su voz.
—¡Wow papá, cálmate!¡No ha pasado nada!–intento calmarlo–solo tuve una pesadilla.
—¿Una pesadilla?–preguntó sin cambiar su cara y sin bajar el bate.
—Sí. No ha pasado nada. Lo juro–le sonrió para demostrar que estoy bien.
—Pues a mí si me ha pasado algo. El grito me está robando mis pobres 8 horas de sueño–dijo sin cambiar el tono de su voz.
—¡Papá!
—¿Qué?solo digo.
—Papá...–me levanto de la cama y me acerco a él–vuelvo y repito, no ha pasado nada. Sólo tuve una pesadilla, eso es todo.
—¿Segura?
Asentí con una sonrisa y mi padre se tranquilizó y bajó el bate. Sus párpados están muy caídos y su cuerpo tambalea un poco.
—Estás muy cansado papá, vuelve a la cama. Que descanses.
—Bien. Buenas noches–dijo saliendo de mi habitación con el bate siendo arrastrado.
Veo la hora de mi reloj.
4:30 am
Regresé a mi cama y me acosté e intentar dormir.
En la escuela, estaba hablando con Liam mientras compro una vaso pequeño de café. Bostezo y Liam me mira un poco preocupado.
—¿Dormiste bien?–preguntó.
—Más o menos–dije un poco cansada–no he podido dormir bien por una pesadilla que tuve.
—¿Una pesadilla?
—Si, una pesadilla. Fue tan intenso que se me dificultó el sueño, y ahora estoy muy cansada. Y estoy segura de que mi papá estaría durmiendo en su oficina en este momento–lo último me río si eso pasaría en verdad, o ya pasó y de verdad está durmiendo en su trabajo. Espero que no lo regañen por mi culpa.
—Por cierto, ¿Qué te pareció mi "agradable" hermano?¿Te cae bien?–sonríe burlón.
—Sí, ¿pero siempre es así?
—No siempre es oscuro
Por fin me entregan el vasito lleno de café me alejé de la cantina lo más cuidadoso posible para que no se me bote. Llegamos a la mesa y cuando por fin me puedo estar un poco aliviada, alguien chocó conmigo y el impacto me derramó el café cayendo en el piso, en mi brazo y mi camisa. Suelto un gemido por lo caliente que estaba y Liam trata de ayudarme limpiando los restos del café con servilletas antes de que se me empeore si eso mantiene en mi piel por mucho tiempo. Escucho a alguien riéndose y yo conozco esa risa. Lola.
—Ups–se burla.
—¡Ay, Lola!¡¿Por qué lo hiciste?!
—Porque estás en mi mesa y eso es romper las reglas, rarita.
—Oye, aquí no de es propiedad de nadie. Es de esta escuela–frunce el ceño molesto.
—¿Y a tí, a quien te preguntó, niño bonito?¿Por qué estás con esta rara?–gruñe.
—Primero te diré que somos compañeros de clase con 17 años de edad y no me molesta tu actitud. Pero lo que si me molesta es que estás molestando a una estudiante de 16 años que solo es rara por su naturaleza.
Awww, pero Auch.
Liam continuó hablando.
—Además, es mi amiga. No dejo que alguien como tú la moleste de esa forma. Si sigues así, tendré que hablar con el director ahora mismo.
—¡¿Me estás amenazando?!
—Sí, te está amenazando¿y qué?–una voz extra sonó un poco cerca de nosotros.
Reconozco muy bien esa voz. Suena igual que Liam. Entonces miré a la dirección de donde escuchó la voz y me sorprendí a verlo aquí. Era Ian. Algunos estudiantes nos están mirando, y en especial con las chicas. Se le alborotaron las hormonas. Lola también lo vió y quedó también sorprendida.
—¿Tú eres su hermano?–preguntó de manera tonta. Ian rodeó sus ojos ámbar apagados y los cerró para volver a abrirlos.
#5198 en Novela romántica
#1336 en Fantasía
angeles y demonios, seresmagicos, tragedia poderes sobrenaturales
Editado: 17.11.2025