Capítulo 10

Aranza

Caminamos por el largo sendero del bosque. Dijeron que van a explicar todo mientras caminamos ya que la cuidad está a una hora y sería buena idea caminar y descansar después para continuar lo que queda del camino. Rachel empieza a explicar y pongo mi cabeza en alto para escuchar.

—El Bosque de Los Espejos es llamado así porque obviamente hay espejos en todas partes. Pero eso no es la principal razón. Es llamado así porque es el único lugar donde todo el pasado de una persona fluye en este lugar. Hay lagos de donde puedes ver el reflejo de tus recuerdos; puertas de donde puedes ver tus recuerdos estando ahí como si tú fueras una persona extra pero nadie te vería por ser recuerdos que reflejan a ser tocada la puerta; y también están los espejos de diferente tamaño que algunos pueden ser simples pero reflejan las mismas personas pero de diferente época y tiempo del pasado, es decir, que con solo verte en uno de esos espejos, puedes verte a tí misma pero en una época antigua, sea reciente, medieval u otras cosas que pueden aparecer. Todo en este bosque refleja todo con un solo espejo. Cool, ¿no?–lo último dijo emocionada y yo asentí. Ella continuó–Incluso hay espejos de donde pueden darle una oportunidad a fantasmas que quieren volver a vivir en una vida nueva. Cada noche, los fantasmas aparecen y pasan aquí como si fuera un paseo o un evento especial. Es como si pasaran sus buenos tiempos, pero en fantasmas.

—¿Pero por qué yo no veo fantasmas aquí?–pregunté.

—Es porque los fantasmas pueden estar aquí hasta después de la medianoche. Es una regla obligatoria que se convirtió en costumbre para ellos, como lo hacemos todo el mundo: de día puedes salir de la casa a hacer tus cosas de vida hasta la noche donde tienes que regresar y descansar. Así es ese proceso con los fantasmas. En fin, el único día que pueden estar aquí es la luna llena o en un eclipse. Todos estarían aquí hasta el amanecer.

—Ya veo. ¿Y me puedes decir sobre lo que dijeron primero? Que yo era la reencarnación de una chica y quiero saber.

—En eso yo quiero decirle–dijo Liam contento y se puso a mi lado–yo voy a darte la explicación más resumida de lo que esta guía de turistas no quiso–dijo burlón y Rachel se enfada.

—¡Oye pero si le dí la historia resumida!

—Claro, pero no lo suficiente. Hasta me aburrí.

—¡Eres un idiota!

—Oye, no te enojes. Puedo ser un idiota para tí, pero soy sincero. Acostúmbrate.

Rachel se quedó callada y dejó que Liam me explicara.

—Para empezar... mírate al espejo–señaló uno de los espejos pegados en cada tronco del árbol.

Obedecí y acerqué al espejo. Todos se detuvieron para que yo me viera en el espejo. Me sorprendí a ver que mis ojos ya no son negros...sino de color vinotinto.

¿Esto es por el efecto del espejo?

Y a medida que pasaba el tiempo, veo a mí misma cambiándose a otra yo. Me estremecí a verme a mí pero diferente. Sigo siendo yo pero mi cabello y mis ojos eran de color vinotinto y llevaba ropa medieval. Luego me llegó la imagen de la chica encapuchada.

¿Será ella?

Me alejé del espejo y regresé con ellos continuando caminando.

—¿Ya viste?–preguntó Liam estando a mi lado de nuevo y yo respondí asintiendo la cabeza–Ella es la chica original. Su nombre es Natsume. Me imagino que lo escuchaste en uno de tus sueños, ¿verdad?

El nombre Natsume resonó en mi cabeza y me llegó el recuerdo de un sueño sobre la chica encapuchada nombrándome ese nombre.

—Ahora que lo pienso, sí.

—Excelente, entonces no me equivoqué–dijo satisfecho y continuó–Natsume era una humana que nació con un don que cada humano en este mundo nace con un don diferente. Fue conocida como "La Chica de Los Elementos" por el don de manipular los cuatro elementos. Era uno de los dones muy poderosos y el cuerpo de un humano no soportaría, así que ella a convertirse en guerrera, manipula uno o dos elementos a la vez. Mi hermano y yo fuimos Ángeles Guardianes por primera vez gracias a ella. Nos permitió ser sus guardianes por ser elegida para el Alma Celestial, y muchos demonios la estaban buscando.

—¿Y qué pasó con ella?

—Murió siendo el sacrificio para derrotar el demonio más poderoso. Creímos que ella muerta, el Alma Celestial estaría desaparecida, pero por razones misteriosas y normales de los seres vivos, fuiste reencarnada con el Alma Celestial dentro de tí. Y ahora los demonios saben que el Alma Celestial volvió, quieren buscar a alguien que lo aporta y maten. Osea, tú. Por eso te trajimos aquí. Porque hace unos meses supimos que reencarnaste con el alma y regresamos al mundo humano para vigilar y protegerte que ningún demonio te tocara. Y para que los demonios no sepan que estás aquí, teníamos que traerte a este mundo. Y para eso...

—Tenía que conocerlos–completé su oración. Eso explicaría muchas cosas desde el primer día que los conocí.

—Sí. Tenías que conocernos primero para que no sea raro que aparezcasmos en la puerta de tu casa a media noche y decirte que unos demonios te quieren matar y nosotros tenemos que protegerte. Ya seguro pensarías que estaríamos drogados o algo así–lo último se ríe–en fin... en conclusión, hubo problemas, pero estamos aquí contigo y el plan funcionó. Fin de la explicación. Entendiste todo, ¿verdad? Porque no lo voy a repetir–dijo bulón.

—No hace falta. Ya entendí todo–le sonríe. Aunque hay muchas cosas que desarrollar en mi mente pero entendí todo.

—En la pelea del Jorōgumo, cuando esa luz apareció de la nada, debe haber despertado una pequeña parte de ella que podías usar su don, que fue el Fuego Bendito.

—¿Qué es?

—Es una de las habilidades del elemento fuego que consiste que los demonios serían quemados con solo tocarlo.

—Pero yo no ví fuego.

—Eso es porque no es visible para el ojo humano. Tal vez viste solo luz por ser humana, pero para nosotros, vimos cómo fue quemado hasta las cenizas. Y por despertar una pequeña parte de Natsume, tus ojos han cambiado de color y has tenido su don, solo tenemos que enseñarte a controlarlos.