Sam y yo esperábamos por Sabrina en la planta de abajo. Luego de que nos mandara a cambiar deje mi cabello suelto, me maquille un poco y me puse unos tacones negros. Sam por su parte se recogió su alborotado pelo rizado en una cola alta, un pantalón alto rasgado y un top cruzado.
-Por amor a Dios...- dijo Sam- ¿POR QUE RAYOS TARDAS TANTO?- grito a Sabrina.
-¡Ya estoy lista!- exclamo bajando las escaleras. Se había puesto pintura de labios roja y cargaba la ropa que la había visto llevar al baño, un pantalón, una blusa escotada vino tinto, y unos tacones del mismo color. Era mas baja que nosotras, aun con tacones.
-Aghh al fin- me queje.
-Para ser bella, hay que ver estrellas- dijo Sabrina.
-Estrellas vas a ver cuando te golpee- dije yo.
-Son las 8:30 nos vamos ¿o que?- dijo Sam mirando la hora en su teléfono.
-Vamonos- dije. Salimos del departamento, yo estaba pasando el seguro a la puerta, Sabrina presionando el botón del ascensor y Sam junto a ella.
-Deja de presionar el botón Sabrina- dijo Sam. Esta se rió. Me dirigía hacia ellas cuando la puerta del ascensor se abrió. Alexis y Chase salieron de el.
-Hola chicas- dijo Chase saludando. Sabrina estaba que babeaba. Sam le dio un codazo discreto.
-Hola- salude- Chicos ella es Sabrina. Sabrina el es Chase- lo señale- y el Alexis- señale al rubio junto a el.
-Un placer conocerlos- dijo Sabrina sonriendo.
-¿Van de salida?- pregunto Chase.
-Si. Sabrina acaba de llegar de florida y quiere "festejar"- hice comillas.
-Aishhh. Ellas son unas amargadas, tienen pinta de que no salen- se quejo Sabri. Chase rió.
-Yo no estaría tan seguro de eso- dijo sonriendo divertido.
-Cállate- dijimos Sam y yo al unisono. Lanzando le nuestra mejor mirada asesina.
-Mejor nos vamos ya.- dijo Sam empujando a Sabrina dentro del ascensor.
-Adiós- dije subiendo rápidamente y presionando el botón antes de que Sabrina hiciera una pregunta, o Chase abriera mas la boca.
-¿Que fue eso?- pregunto Sabrina mirándonos y entrecerrando sus ojos marrones acusatoriamente.
-Nada- respondí simplemente- No le hagas caso, esta loco- dije.
-Sam- susurro Sabri al oido de Sam, con la esperanza de que no la escuchara pero lo hice.
-¿Mmm?- fue su respuesta.
-¿Crees que entre el tal Chase y Can pasa algo, o son ideas mias?- pregunto entre susurros.
-Yo también lo creo- susurro Sam de vuelta.
-¿Saben que las estoy escuchando?- espete. Rieron.
-No es mi culpa que tengan cara de "si te descuidas, te violo"- dijo Sabrina riendo. Sam la siguió. Puse los ojos en blanco.
-Solo somos amigos- dije secamente. ¿Por que a todo el mundo le costaba creerlo? Debe ser que no hay mas chicas con amigos lindos en el mundo, solo yo. La puerta del ascensor se abrió y entramos al estacionamiento. Subimos a mi auto.
-¿A donde vamos?- pregunte mirando a Sabrina por el retrovisor. Esta se encogió de hombros.
-No lo se... ¿Que lugar es bueno?- pregunto.
-Vamos al Florence- sugirió Sam.
-¿El Florence es nuevo?- pregunto Sabri
- Sip. Es muy concurrido, cualquier día de la semana- respondí
-Entonces vamos- dijo Sabrina recostándose en su asiento. Sam encendió la radio y todas coreamos la canción hasta llegar al club.
"Boomclap
The sound of my heart
The beat goes on and on and on and on and
Boom clap
You make me feel good
Come on to me, come on to me now
Boom clap
The sound of my heart
The beat goes on and on and on and on and
Boom clap
You make me feel good
Come on to me, come on to me now"
Aparcamos en el estacionamiento del Florence. Emma y Kate nos esperaban dentro. Pasamos junto a la larga fila de gente el guardia apenas nos miro, enseñe mi targeta V.I.P y nos dejo pasar. La gente en la fila se quejo y el hizo un gesto a lo "La vida es así". Sabrina estaba asombrada.
-¿Puedo verla?- pregunto. Se la tendí. Al verla silbo.- Yo quiero una. Pagaría por ver de nuevo la cara de la gente en la cola al vernos pasar- rió.
-Que mala eres- dijo Sam.
-Creo que tengo una sobrante en mi casa- dije a Sabrina.
-¿Por que no simplemente enseñas tu carnet de conducir? Al ver tu apellido, te dejarían pasar sin necesidad de la tarjeta- dijo Sabri.