Siempre creí tener amigos
de los que te dan una mano
te acompañan en tu camino.
Pero el tiempo me hizo ver y comprobar
que tan sólo era humo,
que buscaban algo a cambio,
y en el momento que no lo recibían,
eras un bicho raro,
una persona a la que se debe destronar
del corazón de los verdaderos amigos.
Eras un adversario en su camino.
Así es como te ven cuando
le das una mano.
Ahora el tiempo,
la madurez o incluso la sensatez
me haces ver con claridad,
sentir la verdadera amistad,
esa que te dice las verdades a la cara,
que llora contigo
y levantan cuando te derrumbas.
yo las encontré en unas guerreras
que ahora luchan a mi lado día a día,
me animan a ser un poco más valiente,
me hacen saber que puedo afrontar todo
lo que antes otros hicieron añicos,
Apoyando no sólo mis hobbies,
si no también impulsando
a ser yo misma.
A mis guerreras gracias por darme
una parte de ustedes,
porque eso ayuda a completarme.
Editado: 26.08.2021