El canto de las almas tristes

Realidad

Miro al techo todo el día

un pijama es mi uniforme

me pesa vivir la vida

porque no se siente mía

Arrastro mis pies descalzos

si alguna vez dejo la cama

vago por los rincones

de una casa desocupada

Escucho reír a la gente

en las calles ajetreadas

todos ellos viven su vida

como si no importara nada

¿Cómo se hace eso?

me pregunto por las noches

¿cómo vivir la vida

feliz y sin reproches?

Otro día: otro pesar

ya no tengo energías

mis ojos están hinchados

por llorar todo el día

Miro al balcón. Miro los cuchillos

y me doy cuenta de mi cobardía

¿Soy cobarde por no matarme

o soy valiente por seguir viva?

Miro tu foto… sonrío

para ti, no para mí

tú querías que fuera feliz

o al menos eso creía

¿Cómo aprendemos a depender

de aquel que nos da amor?

Si no lo hiciéramos, se salvarían

las desdichadas almas como yo

No debí amar; era peligroso

era un arma de doble filo

debí escuchar a mi madre

cuando dijo que no había cariño

Y ahora siento como me llama

con su voz fría de ultratumba

tal vez sea hora de seguirla

y acabar con la penumbra

No hay nadie que llore por mí

quizás no noten que me he ido

imagino mi cuerpo inerte

sin que nadie lo lleve a su nido

¿Vivir… o morir?

todos tememos a la muerte

pero cuando es una opción…

¿es conveniente ser indiferente?

Miro al techo todo el día

un pijama es mi uniforme

ya es hora de acabar con esto

querida madre… voy a tu encuentro




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