El carretón de los perros contentos.

"Eso" Que no tiene explicación.

 

  - ¿Qué te pasa que te veo muy contenta?

Le dice doña Cata a Erly, al verla sonriente, mientras sacaba de unas bolsas algunas cosas que se había comprado.

  - ¡Es que todo lo que me compré está muy bonito! –contesta la chica sin mirarla.

  - ¡No te hagas, muchacha! Que tengo más de 20 años de conocerte y jamás te había visto así, no será que “Eso” te está sucediendo al fin.

Doña Catalina Rodríguez era una mujer mayor, tal vez de más de 70 años, pero se conservaba muy saludable y ni siquiera aparentaba su verdadera edad, vestida de manera sencilla lucía una belleza natural, sin maquillaje, tal vez el único rasgo de su verdadera edad era su cabello entrecano, atractiva y sin ser tan espectacular, porque su salud le proporcionaba su belleza, y la de su cuerpo, sin el más mínimo síntoma de obesidad.

  - ¡” Eso” no nos pasa a las quilianas! Además, tú ya sabes que “Eso” también les está dejando de pasar a los humanos, y que, si no recapacitan en el desarrollo de su sociedad, muy pronto serán depurados, y todo su índice de maldad desaparecerá para siempre de los anales de su historia, con todo y sus anales, además yo soy una felina de Quill; ¿Cómo crees que me va a suceder “Eso” con un primate de tu planeta?

  -¿Y cómo se llama ese homo-sapiens? –pregunta doña Cata, inquisitiva.

  - ¡Billy! –contesta Erly, suspirando, y mirando hacia el techo.

  - ¿Y cómo es?

Vuelve a preguntar doña Cata, haciendo como que no se había dado cuenta de su ensoñamiento, mientras fingía desinterés en la plática en lo que preparaba chocolate, que era la bebida favorita de la felina.

  - ¡Me creerías que es más alto que yo! Con la piel morena clara, cabello largo, hasta parece uno de esos chicos que tocan en los conciertos de Mtv, es muy atractivo, su rostro es hermoso, con unas manos así de grandes y unos brazos así de fuertes, usa barba de candado y tiene los ojos grandes y oscuros, se le ven hermosos, entre tiernos y rudos, aunque no sean de color como los de los felinos, también tiene las espaldas anchas, las piernas fuertes, y esa voz tan grave y modulada, me hace sentir que está cantando cuando tan solo está hablando, en fin, de todos los primates que he conocido, es el bono especial de su especie.

  - ¡Pero si nunca has conocido a ninguno, muchacha! Al menos desde que te conozco, y la verdad es que ni idea tengo de por qué te animaste a salir al fin con uno de los habitantes de esta sociedad tan primitiva y a punto de colapsar, cómo dices tú, que, si no ha sido erradicada, no ha sido gracias a ti, porque durante los últimos 5 años has votado por nuestra erradicación.

Dice doña Cata, mientras le servía su chocolate caliente, aunque en el interior de aquella casa no se sentía el frío de afuera, gracias a la tecnología Quiliana que creaba hábitats artificiales que controlaban la temperatura y limpiaban el aire, para hacer más cómodas sus estancias, igual les fascinaba a las dos el chocolate bien caliente.

  -No me empieces a reclamar que tú bien sabes en que consiste mi trabajo, y nunca he votado por la depuración total de la humanidad, como lo han hecho los demás tripulantes de la Tierra, mi voto, aunque ha sido constante durante los últimos años, tan solo ha sido de nivel rojo, y los que han votado a favor de la depuración, lo han hecho con nivel purpura, con el cuál ni tú, ni nadie en este planeta, podrá seguir rompiendo ninguna de las leyes del universo.

  - ¡Pensar que este año tan solo nos salvamos gracias al tripulante del Medio Oriente! Que votó en contra de nuestra erradicación, tal vez al Rell que nos permitió sobrevivir un año más, le pasó algo que lo hizo comprender que merecemos otra oportunidad, ojalá y “Eso” también te pase a ti. –dice doña Cata.

  -Los Rell provienen de Nómona, un planeta acuoso donde sus sociedades se rigen por normas muy estrictas y sistemas muy metódicos, aunque tardaron millones de años en dar el salto al espacio sideral, porque en el agua no se puede desarrollar la tecnología más común de toda la galaxia, la que se basa en el fuego, su desarrollo mental no les permite dejarse dominar por sus emociones, así que “Eso” es imposible que le suceda a un Rell, cuya tecnología se basó en el control mental de las moléculas del agua, algo sumamente difícil, y que muy pocas especies en planetas acuosos han logrado, y sin embargo sus civilizaciones son las más avanzadas de la galaxia, las primeras en alcanzar los máximos niveles, para que te des una idea, cuando los de Nómona encontraron a mi planeta, apenas éramos del tipo 3, y ellos ya hacían viajes interestelares.

  - ¡Y si lo lograron es porque tuvieron el tiempo suficiente para desarrollar su tecnología! No que ustedes y su ministerio de la primera ley, no les han dado tiempo a las razas a desarrollarse, ni mucho menos a la humana, que, según tú, ha sido erradicada más de 10 veces, mucho antes de que naciéramos todos, incluso mucho antes de que tú nacieras, de no ser por su intervención, tal vez los humanos ya viajáramos entre las estrellas.

  -O como primates que son, ya la hubieran destruido, como lo hicieron los Tartesios, que no solo destruyeron la Tierra, si no todos los planetas que habían colonizado en el sistema Solar.

  -No somos primates, somos homo-sapiens.

Dice Cata, que al igual que Erly, conocía muy bien las historias de las civilizaciones perdidas de la Tierra.




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