Hoy se suponía que tenía que ser mi día especial, hoy era el famoso baile de graduación, un día que llevo esperando con ansias, desde que inicie el colegio, para ello llevaba preparándome desde hacía semanas, para tener todo listo y que esta noche fuera mi noche inolvidable, tenía al chico perfecto, el vestido de mis sueños, el peinado que había resaltar mis facciones, todo al mi alrededor parecía estar perfecto.
Todo estaba listo para que disfrutara esta noche con mis mejores amigos.
Pero al parecer el universo tenía planes muy diferentes…
6 MESES ATRÁS
-¡Allison! – gritaba mi madre, después de que apagara tres veces seguidas - ¡Date prisa, llegaras tarde a tu ultimo primer día de colegio!, ¡Además la loca de Emma no tarda en llegar! - suspirando y sin ganas de levantarme tome mi celular y confirme lo obvio, me había retrasado, tomando un respiro coloque el celular en su lugar y salí de la cama, tras dar un par de pasos llegue hasta el baño, cerrando la puerta tras de mí, mire mi reflejo y era en pocas palabras espantosos, llevaba el cabello desordenado a más no poder y no quería ni imaginarme lo enredado que se encontraba, sin perder más tiempo abrí la llave de la regadera, importándome poco como se encontrara el agua entre sin pensarlo. El golpe de agua fría despertó por completo mis sistemas y tomando la ducha más rápida de mi vida salí del baño y me puse uno de los atuendos que Emma y yo habíamos estado eligiendo el día de ayer.
El cual consistía en un vestido blanco con flores azules, cuatro dedos arriba de la rodilla y una chaqueta de mezclilla, con unos converse blancos. Después de batallar con mi desastre de cabello, me maquillé lo más sencillo posible, repasando una última vez mi reflejo sonreí con lo que me mostraba.
Tomando mi bolso y por último mi celular, salí de mi habitación rumbo a la cocina, donde mis padres me esperaban con un rico desayuno, dedicándoles una sonrisa y su respectivo buenos días, estaba dispuesta a probar los panecillos que mi madre había preparado, cuando el ruido de un claxon se escuchaba a unos cinco metros de distancia.
-Creo que tu trasporte ha llegado – mencionaba mi padre con ironía. Conforme un segundo pitido se hacía sonar, en definitiva, Emma estaba loca, con todo ese ruido estoy segura de que ya ha despertado a toda la cuadra.
– Es mejor que te apresures, cariño o los vecinos vendrán a quejarse. – mi madre me regalo una de sus sonrisas de diversión, al mismo tiempo que depositaba un dulce beso de despedida en mi mejilla.
-¡Nos vemos! – grite desde la puerta de entrada, y antes de que Emma volviera a sonar su nueva adquisición por parte de sus padres, cerré la puerta, y camine hasta ella.
La rubia de ojos verdes se encontraba recargada en su coche, con un hermoso vestido blanco, un saco rojo y unas zapatillas del mismo color, llevaba puesto un maquillaje que resaltaba sus hermosos ojos verdes, pero lo más impactante era el labial rojo que hacía resaltar sus carnosos labios.
-¡Oye , guapa! Te quedaras ahí como una tonta admirándome o vas a dejar que me muera de frio aquí afuera. – mencionaba, conforme me abría la puerta haciendo una boba reverencia, en forma de broma.
- Muy amable – continue con su juego, cerró la puerta y dedicándome un bailecito rodio el capó del carro, abriendo la puerta tomo asiento y me dedico una de esas sonrisas de complicidad. - ¿Qué es lo que tramas? – la miré con sospecha e inmediatamente comprendí lo que pasaba.
Sin esperar un segundo más arranco el carro y el estero comenzó a sonar con nuestra canción favorita Party in the USA de Miley Cyrus.
So I put my hands up
They're playin' my song, the butterflies fly away
I'm noddin' my head like, yeah
Movin' my hips like, yeah
I got my hands up, they're playin' my song
They know I'm gonna be okay
Yeah, it's a party in the U.S.A.
Yeah, it's a party in the U.S.A.
Cantábamos desafinadas hasta que Emma paro repentinamente, provocando que ambas fuéramos sacudidas. - ¡Pero que te pasa! – mencione alterada - ¡Estas completamente loca!, ¡Pudiste provocar un accidente o peor aún matarnos!
-Sí, lo siento, pero…- me mostro una sonrisa enorme, de esas en la que muestras los dientes. – No podemos iniciar nuestro primer día sin nuestro tradicional…- se estiro para tomar algo del asiento trasero y sacudió un vaso con café en mi cara.
- No puedo creer que casi nos matas por un café- aceptando la bebida caliente, chocamos los vasos, dándole un gran trago y volvimos a ponernos en movimiento.
- Aún recuerdo ese día.
- Y cómo olvidarlo, nos metimos en tantos problemas.
Flashback
Llevábamos más de la mitad del ciclo escolar y era la semana exámenes, la mayoría de los estudiantes incluyéndome, se encontraban en la biblioteca, afortunadamente tenía un par de horas libres que junto con mis compañeras Lila y Emily decidimos aprovechar para dar un repaso a un par de cosas antes de nuestra penúltima clase, el tiempo se fue como agua y solo faltaban quince minutos para la clase.
-Ally, nos vamos adelantado, te apartamos un lugar, vale.
- Sí, chicas, en un momento las alcanzo.
Tras una última lectura, note que faltaban cinco minutos, para que fuese la hora. Apresurada me puse de pie y comencé a guardar todas mis cosas, con el tiempo en mi contra no note, que a mi lado una persona pasada, así que al tomar mi termo y dar un giro un tanto brusco choque con ella, derramando así la bebida, logrando que ambas termináramos empapadas.
-Lo siento, tanto – mencione completamente apenada por lo que claramente había provocado.
- No te preocupes, los accidentes pasan. – decía la chica, con la que había chocado, mientras intentaba quitarse el líquido de las manos. – Sabes que olvídalo – se dio por vencida y por primera vez se dignó a mirarme.
De la nada, un presentimiento se me hizo presente, algo en ella me resultaba muy familia. - ¿Nos conocemos? – en eso ella me miro de la misma manera, como si intentara recordar algo y así fue su mirada se ilumino en un instante.