Salida De Chicas

Narra Allisson

Nos encontrábamos frente a la casa de Chris, habíamos llegado media hora antes, por el simple hecho de que no me gustaba ser impuntual en cuanto a compromisos, tocamos el timbre y esperamos un poco, a que alguien nos abriera la puerta. Debo admitir que me sentía un poco nerviosa, pero no estaba muy segura si era por ver a Alex o por Samantha.

Pasados unos cuantos segundos la puerta se abrió, por ella se encontraba la señorita Thomson sonriendo alegremente. 

- Chicas, pasen.- se hizo a un lado para dejarnos pasar. Ambas le regalamos una sonrisa de boca cerrada y entramos.- Alex, me comento que vendrían.- nos dio un pequeño abrazo de saludo y cerro la puerta a nuestras espaldas, desapareciendo por una puerta.

Estábamos tan nerviosas que no nos dimos cuenta que nos habíamos quedado paradas en medio del pasillo. Mientras recorría la planta baja con mis ojos se cruzaron con los del rubio, se encontraba sentado en uno de los sillones individuales y nos estaba regalando una pequeña sonrisa.

- Ally,- menciono Chris, que se había puesto de pie- Hola, que sorpresa.

- Hola Chris- le di un pequeño abrazo como saludo.

- Emma- menciono Chris mirando a mi amiga, quien solo asintió con la cabeza.

- Pasen, no se queden aquí paradas, vengan- nos indico que lo siguiéramos a la sala, Emma tomo asiento en el sillón individual, lo que ocasiono, que yo me sentara a lado de Chris.

- ¿Cómo va tu tobillo?- me pregunto Chris regalándome una sonrisa.

- Va mejorando. Aun no puedo hacer todo lo que hacia antes, pero  ya casi estoy recuperada al cien.

- Me alegro. No puedo creer que tu y Alex se hayan intoxicado de lo mismo.

- Seguramente fue algo en el sendero. Esa mañana salí a correr y por lo que vi hoy Alexander también corre, así que supongo que fue eso.- note como Chris ponía cara de sorpresa, pero no dijo más.

- Y ¿Porqué están aquí?- pregunto con curiosidad.

- Samantha, nos pidió de favor que le mostráramos la ciudad.- dije con un poco de tristeza.

- Veo que ya la conocieron- me miro como si estuviera analizando mis sentimientos.

- Sí, - lo mire intentando disimular todo lo que estaba ocurriendo en mi interior- ¿Sabes en donde se encuentra?

- Alexander fue a buscarla a su casa, supongo que no tardan en regresar.

- ¿Su casa?- lo mire, pidiendo una pequeña explicación.

- Se mudaron no hace mucho. Creo que llegaron cuando a ustedes los cambiaron de habitación.

- Y ¿Williams lo sabia?- pregunte sin saber realmente el porqué. O sí, quería saber si ese beso realmente significo algo para el o si fue simplemente una forma de divertirse conmigo. Mientras esperaba por una respuesta, mordí el interior de mi mejilla.

- No,- pronuncio y sentí como volvía a respirar- el no lo sabia. 

- Cambiando de tema, ¿Cómo estas?- intente sonar más alegre y menos depresiva.

- Podría decirte que bien, pero eso seria mentira.- el brillo de sus ojos se apago un poco.

- ¿Por?- mire como se pasaba sus dedos sobre su cabello rubio y sus ojos esmeralda se posaban en mi.

- Es solo que la llegada de Samantha, altero un poco el humor de Alex.- se recargo en el sillón y puso sus manos atrás de su cabeza. 

- ¿A qué te refieres?- lo mire frunciendo el ceño.

- No, creo que deba ser yo el que te cuente lo que ocurre.- lo mire seria y no pregunte más, se veía como el tema le incomodaba.

Estaba a punto de mencionar otra cosa cuando la puerta se abrió de un golpe, llamando la atención de casi todos.

- ¡Alexander!- grito la señorita Thomson, mientras se dirigía a la puerta- ¡¿Qué te pasa?!- se acerco a el y le susurro algo al oído, cosa que hizo que volteara a verme.

- Un disculpa- menciono a regañadientes, sin quitar su mirada de mi. Sabiendo que el no rompería el contacto me gire a mirar a Chris, quien había sacado su celular.

Quería preguntarle que estaba viendo, cuando por la puerta entro la morena intentando llamar  la atención de todos. Chris volteo los ojos, por lo que la chica había hecho y se giro a mirarme. Estaba a nada de decir algo, cuando una figura se planto frente a nosotros.

- ¡Ally!- chillo la chica- no te había visto, pensé que llegarían más tarde.- Mire la hora en el reloj que tenían en la pared y note que eran exactamente las tres.

- Samantha- mencione yo mientras me ponía de pie para saludar. Sin previo aviso, me abrazo, apretándome entre sus brazos.- Supongo que ya estas lista, para nuestra salida de chicas.

Me miro un poco sorprendida, pero al final sonrió.

- Claro, que estoy lista. Solo una cosa más llámame Sam, eso de Samantha no me gusta mucho, siento como si estuvieran enojados conmigo.- asentí con la cabeza y le regale una sonrisa. 

Gire a mirar a Emma, quien estaba entretenida jugando a algo.

- Emma- la llame, haciendo que apagara su celular, se giro a mirarme y me regalo una sonrisa- Es hora, tenemos que irnos.- le señale a Samantha con la mirada.

Casi al instante se puso de pie, para saludarla. Tardamos un poco en salir mientras nos despedíamos de la gente. Chris se había ofrecido varias veces para acompañarnos, pero yo le repetía que era una Salida De Chicas, lo que significaba que solo, seriamos Emma, Sam y yo.

Habíamos decidido comenzar nuestro recorrido en el parque que se encontraba cerca de la escuela, tenia planeado caminar un poco y luego comer en la heladería que se encontraba a unas cuadras.

- Y ¿Cómo conocieron a Alex?- Samantha rompió el silencio que se había formado.

- Nos lo presentaron en clase- Emma, pronunció sin muchos ánimos.

- De hecho yo lo conocí en la dirección- ambas chicas frenaron y sus miradas se posaron en mi.

- ¡¿Enserio?!- me miro Emma- ¡Cuenta!- me tomo de la mano y nos condujo a una de las bancas.