Capitulo 37: ¿Una cita?

Luke toma mi mano,
—Vamos cariño.

—No tienes que llevarme a ningún lugar, no he venido a divertirme, vine porque tu padre está enfermo y quería ver cómo estabas.

Clarissa me ve con una sonrisa,
—No te preocupes Isabella, yo cuidaré de Frederic, si sucede algo llamaré a Luke.

Suspiro, sin poder contradecir a todos,
—Está bien, muchas gracias

Luke me ve y sonríe, pero su sonrisa no es la misma que me transmitía paz, ahora se que el no está bien, el está sufriendo suspiro y tomo sus manos, lo veo a los ojos fijamente, el no dice nada, lo acerco a mi pecho y lo rodeo con mis brazos fuertemente el comienza a llorar,
—Isabella debí ser un mejor hijo.
—Tenía que llamar a papá más seguido.
—¿Por qué lo deje solo por tanto tiempo?
—Clarissa sabía de su problema con el cancer, si hubiera sido una mejor persona con ella, todo esto no estuviera pasando.

Lo dejo que se desahogue, mientras sigo abrazándolo, el llora como un niño,
—Luke, nada de esto es tú culpa, tenías todo el derecho de estar molesto con el, ahora tu padre pasa por una situación difícil, pero tú estás aquí para cuidarlo, esa es una oportunidad, no te lamentes por el pasado, no lo podemos cambiar, pero tú puedes cambiar el futuro, tienes la oportunidad de vivir de la mejor manera con tu padre, de superar sus diferencias, de volver a empezar, se que no es fácil enfrentar la muerte de un ser querido, pero tienes la oportunidad de construir lindos recuerdos con el, tienes la oportunidad de vivir los últimos días de tu padre junto a él, así que no sufras, se feliz, disfruta cada segundo con el, perdónalo y sobre todo ámalo.

Luke me abraza fuertemente y besa mis labios, dice susurrándome al oído,
—Isabella tú eres la mejor, te amo, no se que haría sin ti, muchas gracias.

Niego mientras limpio sus lágrimas,
—No tienes que agradecer, tú me ayudaste cuando estaba a punto de rendirme con mi vida, solo trato de devolverte un poco de lo mucho que me ayudaste.

El ríe dulcemente, mientras besa mi frente,
—Isabella no tienes que pagarme nada, lo hice porque fuiste alguien especial para mi desde el día que te conocí.

—No importa, quiero devolver lo que tu hiciste por mi.

El toma mi mano,
—Está bien, ¿en que hotel, estás registrada?

Llevo una mano a mi cabello, algo apenada,
—Este, no me he registrado en ningún hotel, al llegar al aeropuerto, tome un taxi y me dirigí al hospital.

El me ve sorprendido, pero sus ojos brillan con emoción,
—Isabella, eres increíble, ¿dónde esta tu equipaje? Primero te llevare a casa, debes estar cansada.

—¿Mi equipaje?—Acabo de recordar que deje mi equipaje en el aeropuerto, al bajar del avión corrí a buscar un taxi,
—Olvide mi equipaje en el aeropuerto.—Digo con mis mejillas sonrojadas por la vergüenza.

El comienza a reír,
—¿Qué haré contigo Isabella?

Frunzo el ceño,
—Disculpa por preocuparme por ti.

El sigue riendo,
—Lo siento, no quise molestarte, solo que no puedo creer que olvidaras tu equipaje.

Comienzo a reír con el, me siento feliz al verlo reír, si tengo que actuar como una idiota por ver esa sonrisa lo haré con mucho gusto,
—Sabes que soy muy olvidada, debería ir al aeropuerto.

El, abre la puerta de su auto y me pide que suba,
—Mi hermosa novia, la invito a una cita.

—¿Una cita?—Pregunto algo confundida.

El asiente rápidamente,
—Así es, hace mucho que no te veía, así que quiero salir contigo.

Sonrió,
—Eso sería genial, pero no estoy vestida para una cita.

—Primero iremos a la casa de mi padre, buscaremos un lugar y te compraré algo de ropa, en cuanto a maquillaje o algo así tú ya eres hermosa, no lo necesitas.

Mis mejillas se sonrojan automáticamente,
—Luke no digas cosas así, me sonrojas

El besa mi frente,
—No tienes porque avergonzarte, solo digo la verdad.

Estamos en un restaurante muy hermoso, con vista al cielo, hoy tenemos una hermosa noche estrellada, me siento muy feliz, Luke viste una camisa verde mangas largas, la cual hace que sus bellos ojos carmesí resalten más y un pantalón negro se ve muy guapo, en cuanto a mi, llevo un vestido rojo sin mangas, tenía muchas dudas si usarlo o no, por mis cicatrices, pero creo que para superar todos mis problemas debo aprender con aceptar mis cicatrices.

Luke me ve fijamente,
—Bajo la luz de la luna y las estrellas, eres aún más hermosa.

Niego repetidamente, sin saber cómo responder,
—Gracias, pero tú dices eso porque soy tu novia, no soy tan hermosa.

El sonríe de lado y toma mi mano, dice de forma seria,
—Gracias Isabella, por estar aquí conmigo.

Aprieto su mano,
—Luke no debes agradecerme, lo hago de corazón, tu eres mi novio y quiero que sepas que estaré contigo en los buenos momentos, pero te apoyare con todas mis fuerzas en los malos momentos.

El sonríe y pide al camarero el menú,
—También estaré contigo siempre, pide lo que quieras.—Me entrega un menú.

Pido una cena, hoy pase demasiadas cosas, no imagino cómo se siente Luke, pero no importa lo que suceda yo estaré con el.

Luego de cenar ambos volvimos a casa de Luke, Clarissa no llamo, lo que significa que todo está estable, Luke me presto su habitación, el dormirá en la de su padre, me siento algo nerviosa, es la primera vez que estoy sola con Luke.

Ambos entramos a la casa y todo está oscuro, Luke enciende las luces, decido sentarme en el sofá de la sala, Luke se acerca a mi,
—¿Quieres ir a ducharte?

Asiento rápidamente y sigo a Luke, el me entrega los productos para ducharme, antes de decir algo el dice,
—Estaré afuera, si me necesitas solo llámame.

—Está bien, gracias Luke.

Luke
Isabella está en la ducha de mi habitación, las hormonas no se me tranquilizan y no dejo de pensar en ella, me siento nervioso, esto es demasiado para mi, ella es tan hermosa y estamos solos en la casa.