Historias de amor por todas partes

MASON

— ¿Qué hay? —Arthur me saluda por detrás, con un golpe en la espalda.

Lo volteo a ver molesto. —Tus saludos me van a romper huesos.

Erick sonríe y se acomoda en su asiento. En esta clase no estoy con Karlie y eso no me gusta, desearía poder acompañarla todo el día. Seguramente la está pasando mal luego que el mayor idiota de todos, la haya rechazado.

No puedo creer que la rechazó, realmente es un idiota.

Nick llega también y nos saluda con choques de puños, se sienta adelante de Erick. — ¿Quién de ustedes me va a prestar treinta?

—Nadie —contesta Arthur, sentado a un lado de él y frente a mí.

Nick se estira y toma el brazo de Arthur para sacudirlo. —Por favor, vamos, los necesito. Conocí a una chica en la fiesta y prometí invitarla en la hora del almuerzo.

Arthur resopla. —No es mi problema —sin embargo, se mueve y saca dinero—. Pero ahora tienes que darme copia de todo lo que te pida.

Erick sonríe. —No es como si Nick fuera la mejor fuente de información.

Nick se lleva un dedo a la boca. —Shh, Erick, me los va a dar, no digas nada.

Arthur le entrega el dinero. —Ten, se feliz con tu historia de amor.

Nick lo toma y sonríe. —Hablando de historias de amor —me mira—, ¿Ya sabes lo que sucedió con Karlie?

Asiento, sintiendo enojo de nuevo. —Ella me lo dijo.

—Pensé que estaría llorando —Nick afirma—, pero la vi en la mañana y se ve como siempre, bueno, incluso mejor.

Arthur se gira para hablar. —Ahora me desagrada mucho más.

Erick exhala. —Es una lástima, Karlie estaba ilusionada —Erick me dijo que Rossy y Mel le contaron todo.

Arthur levanta las manos. —Al menos ya no estará rogando por su amor, no la merece.

Nick asiente. —Ahora vas tú —me señala—. Ve por ella.

Trago saliva. —Um, ¿se dan cuenta que el viernes sucedió todo eso? ¿Creen que sería lo mejor buscar robar su corazón?

Arthur me da una mirada. —Mira Mason, hasta el profesor Rilley debe pensar que a ti te gusta Karlie, no sabes disimular y si no actúas ahora, Adam volverá a jugar con ella.

— ¿Pueden darle un respiro? —pido—. Karlie no se debe sentir bien, es fuerte y por eso no está llorando pero eso no significa que no le afectó. Ella lo quería, tal vez aun lo hace.

Erick hace una mueca. —Estoy de acuerdo con eso de darle tiempo pero quizás, podrías ser un poco más proactivo.

— ¡Hola hermano! —Lila se aparece a mi lado, esta es una de las pocas clases que llevo con ella—. Hola amigos de mi hermano.

Todos la saludan, no le hablan mucho pero son amables. —Hola Liliana —digo yo para molestarla.

Ella me golpea el brazo. —Tonto —se asoma por encima de mi escritorio—. Erick, ¿viste el video que te envié? ¿No es muy gracioso?

El rostro de Erick se ilumina totalmente. —Sí, sí, lo es, me reí mucho.

Yo miro a mi amigo intentando no sonreír por su expresión emocionada. A pesar que se conocen desde hace muchos años, Erick sigue luciendo muy feliz cada vez que ella le habla.

— ¿Por qué no te sientas aquí, Erick? —Señalo mi escritorio—. Así puedes hablar con Lila del video o lo que sea.

Lila sonríe y asiente varias veces. — ¡Si, ven aquí Erick!

Él se rasca varias veces la mejilla, como siempre lo hace cuando está nervioso. —Um, no sé si…

Me levanto y no dejo que termine. —Ve, no me importa.

Erick me mira y no se levanta, así que lo tomo de los brazos y lo muevo a un lado. —Ya, ya, lo hago yo —toma sus cosas y se mueve a la derecha—, um, hola, Lila.

Nick me da una mirada y me encojo de hombros. —Entonces, Mason, ¿Quieres que ahora te ayudemos a conseguir a tu chica?

Nick habló demasiado alto pues Lila entorna los ojos. — ¿Qué? Mase, ¿Tienes una novia y no me has dicho? —Mira a Erick—. Dame toda la información.

Erick niega. —Yo no sé nada, no tengo idea de nada, no diré nada.

—Buena respuesta —le digo—, por eso tienes mi corazón.

Lila me señala. —No uses a Erick para distraerme, ¿Quién es? —Abre sus ojos—. Oh, ¿es ella? ¿Karlie?

Arthur levanta una ceja. — ¿También lo sabe tu hermana?

Lila se encoje de hombros. —Somos gemelos y nos comunicamos telepáticamente, lo sé todo de él.

Nick frunce el ceño. — ¿Es verdad? ¿No es un mito?

Suspiro. La realidad es que cometí un error hace unas semanas, fui con mis hermanas y les pregunté sobre cómo saber si le gustas a una chica y ellas me interrogaron sin parar hasta que tuve que confesarles que conocía a una chica del club de música y solo tenía curiosidad.

—Lila, si fuera así, sabrías que el amor de mi vida es este muchacho atractivo a mi lado —miro a Erick.

Erick se acerca para empujarme el hombro. —Cállate.

Arthur y Nick ríen. —Voy a comenzar a creerlo —dice Nick.

Lila niega, tocándose el cabello. —No lo hagas, Mason siempre usa a Erick para distraer a todos —afirma—, cuando mamá le preguntó un día si se le gustaría casarse en el futuro respondió que solo lo haría si era con Erick.

Erick arruga la nariz. —Mason, no eres mi tipo.

Hago un puchero en su dirección y él rueda los ojos.

Nick levanta la mano. —Esperen, entonces, regresando al tema principal, ¿Tu hermana sabe que te gusta Karlie?

Recuesto mi rostro en mi mano. —A este punto, todos lo saben.

Lila suspira. —Invítala a salir, eres mi gemelo así que eres un poco atractivo, solo un poco.

— ¿Por qué no inician un concurso de citas? —Digo, viendo hacia el reloj, esperando que la profesora llegue rápido para terminar con esta conversación—. ¿O una de esas aplicaciones? ¿Por qué no simplemente ignoran mi vida personal?

Arthur cruza los brazos. —Mira Mason, no hablo sobre mí pero estoy seguro que alguien del club podría invitar a salir a Karlie en cualquier momento, así que, apresúrate.

Lila asiente. —Karlie es linda y agradable, tienen razón, perderás tu oportunidad.