El chico popular [en edición]

Capítulo 24: La enfermera.

Todos ya habíamos terminado de comer solo estábamos mirándonos y esperando regresar a las clases programadas de este dia, pero finalmente yo rompo el silencio, que habia despues de las 3 cosas que dije en voz alta y le habló a Andrea delante de todos los de la mesa “VIP”.


 

-Oye, Andrea. -La miró fijamente.

 

-Si?. -dice confundida

 

-Tenemos que hablar. -le digo en seco, mientras me paro de mi asiento.

 

Andrea asiente y me sigue a donde yo la llevo.



 

**

 

Llegamos al salón de clases y estaba solo, justo lo que quería.


 

-Si, quieres siéntate. -le digo a Andrea.

 

Ella se sienta en un pupitre y yo me quedo al frente de ella parado.


 

-Sobre lo de la vez que te fui a verte a tu mansión… 


 

Andrea me interrumpe. -Lo siento fui grosera, tu solo querías ayudarme. -dice avergonzada.


 

-Okey, pero yo quería decirte…



 

Andrea se para de su asiento y me da un beso, interrumpiendo lo que estaba por decirle.

 

Yo estoy congelado, porque realmente no se que pasa por la cabeza de Andrea, hace unos 30 minutos he dicho que amo a una persona demasiado y a Andrea eso parece importarle, nada literalmente.


 

-Pero qué haces Andrea. -dice furioso Jhon y a la par de él estaba Aura.

 

Yo reaccioné y apartó a Andrea de mi.


 

Jhon agarra a Andrea del brazo y la lleva para la salida del salón de clases. Yo ya no quería hablar más con ella, porque siempre se comportaba de la misma forma “obsesionada” por mi, entonces grite lo que le quería decir, ese fue siempre el objetivo al hablar con ella; disculparme por mi reacción de la vez de la mansión.


 

-Lo siento, por como te trate antes. 


 

Andrea voltea a mirarme, de una forma como si se hubiera dado cuenta de que desde el inicio, para eso la había traído a un lugar sin nadie. Se miraba que se había arrepentido de su comportamiento de besarme, por Jhon.



 

-Como la trataste?. -me dice Aura, intrigada por la información que ella no sabía.

 

-Es un asunto familiar de ella y yo me comporte como un idiota, eso es todo. -le digo a Aura.



 

Le dije a Aura lo que podía decirle, por que no es un asunto mío como para contarle cada detalle, no me gusta hablar de cosas que no me corresponde hablar, no es apropiado.

Para suerte mía, Aura es alguien con quien se podría decir que compartimos “Mentalidad”, entonces Aura no se cuestiona nada y no me pregunta más.



 

-Okey. -me responde Aura, sería por lo que miro; por lo del beso.

 

-Lo que miraste… yo estaba congelado de lo sorprendido de la acción de Andrea, lo siento si te lastime. -le digo con sinceridad a Aura.


 

-No, no te preocupes por eso, yo sé cómo es Andrea. Además ya sé lo que sientes por mi y de la forma en que me amas. 

-dice Aura tranquila, al mirar que no evadí la situación sucedida.

 

-Gracias y yo no te lastimaré jamás, prefiero salir lastimado yo en vez de ti, creeme.

 -me toco el pecho al lado de donde está ubicado mi corazón, en señal de promesa.

 

-Te amo. -me dice Aura.

 

-Te amo. -le digo a Aura.

 

-Vamos. -me dice Aura, mientras que me agarra mi mano y me lleva a los baños unisex.


 

**

 

*LLegamos al baño unisex.*

 

-¿Qué hacemos aquí?. -le digo confundido a Aura.

 

-Venimos a que te cepilles los dientes. -me sonríe amablemente, Aura.

 

-Que?. -le digo yo sumamente sorprendido y con ganas de estallar de la risa.

 

-Si, esperame aquí. -finge tener autoridad de mí y me señala el lugar donde estoy parado.


 

*Espero a  Aura, mientras tanto miro mi teléfono y leo unos cuantos mensajes del grupo de whatsapp “Los admirables”, literalmente estaban contando hasta que color de camisas llevábamos y todo exactamente lo que dije en la cafetería.

 Los de ese grupo lo saben todo, TODO. Miro que Aura se acerca y dejo de mirar mi teléfono para enfocarme en ella.*


 

-Ten. -me da un cepillo de dientes nuevo y pasta de dientes.

 

-Pero cómo conseguiste todo esto. -le digo sorprendido.

 

-La enfermería. 

 

Yo la miro confundido aún, entonces ella me explica.

 

-Soy amiga de la enfermera desde hace tres años, creo que esos años… -piensa y continua. -No, si desde hace tres años. -me dice Aura, segura.

 

-Porque?. -le digo con curiosidad a Aura.

 

-Pues nadie se acercó a mí cuando llegué aquí, a hacer amistad conmigo y yo tampoco me acerque a nadie por miedo de como me tratarian. Entonces la enfermera me miró muy sola en las horas del almuerzo, cuando ella iba a la cafetería por su almuerzo y hubo un día en que se acercó a mi mesa, me preguntó que si se podía sentar conmigo, le dije que si.

-Aura, se emociona.

- Y así empezó nuestra amistad, en la cual ella se convirtió en mi psicóloga, ella está estudiando para esa profesión, imaginate y también es enfermera, ella es genial. 

 -Termina por contarme Aura, con mucho sentimiento. 


 

-Guau. Me alegra que ella sea tu amiga. -le digo a Aura comprendiendo todo lo que habrá pasado, antes de que yo llegara a este instituto, continuó diciéndole; -Me alegra que alguien te haya cuidado y querido, mientras yo no estaba. -le sonrió, casi lagrimeando.



 

El solo pensar todo el ac0so verbal que habrá sufrido, me pone muy mal, me pone muy triste. Cómo es que algunas personas son así y cómo es posible que piensen que no lastiman a las personas con sus palabras o gestos. Todo eso me pone triste.




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