Amanda
Lo primero que hago es acostarme en mi cama, las historias se van entrelazando solas, y me parece interesante, es increíble como inconscientemente me veo inmersa, ha estado anotando todo lo que me han dicho en un diario, es como un juego y yo puede verlo todo, pero prefiere no interferir, es más interesante dejar las cosas que fluyan solas.
Pero estoy aburrida, y tenía una idea de cómo distraerme, toma mi celular y marco un número, al tercer timbre una voz contesta.
- ¿hola, Amanda?- dice la voz de un hombre que claramente esta confundido.
-si ella misma, hola Isaac, llamaba para saber ¿cómo estás? - digo con fingida preocupación.
-ya mejor, simplemente no le estoy dando importancia, en realidad no es algo tan importante- dice Isaac detrás de su teléfono, y lo imagino haciendo una media sonrisa eso me entristece un poco, pero recuerdo para que lo había llamo en realidad.
-sabes mañana faltare a clases, ¿quieres faltar conmigo? - pregunta esperando un si automático, los hombres son predecibles.
-no, no puedo faltar, lo siento- dice con firmeza Isaac.
- ¿Por qué no? ¿Tienes alguna prueba o algo así? - pregunto con curiosidad, no estoy acostumbrada a que me rechacen con tanta seguridad.
-no, pero yo no falto a clases- dice Isaac con la misma firmeza. -pero si quieres podemos vernos después de clases- propone él.
No sabía que decir, él me dijo que no, solo porque era responsable, eso era nuevo, y estoy dispuesta a ver dónde me llevaba todo esto.
-bueno después de clases, te parece en el centro, es el punto más neutral de la ciudad- y espero a que Isaac me confirme.
-bueno, cualquier cosa te llamo, buenas noches estoy muerto de sueño, hasta mañana Amanda- se despide Isaac. -buenas noches Isaac hasta mañana- corto y miro la hora, eran la 1 de la madrugada, y yo también debía ir a dormir, mejor estar con energía mañana...