El Comienzo de los Ultimos Dias

Nada es lo que Parece Pt.2

...

Tape fuertemente mis oídos con ambas manos mientras me dejaba caer rodillas contra el suelo. Hice esto con la esperanza de que el pitido y las fuertes pulsaciones en mi cabeza pararan de una buena vez.

Por unos breves momentos no pude escuchar nada mas a mi alrededor. Solo veía a la gente moverse, parecía que unos cuantos guardias intentaron retomar el control de esta habitación, disparando a aquellos que habían sido afectados por la granada.

Lo hubieran conseguido de no ser por que sorprendentemente Sara, a pesar de los efectos de la granada aturdidora que acababa de estallar momentos atrás, tuvo la suficiente fuerza para mantenerse firme y empuñar su arma para matar a sus atacantes.

Los guardias cayeron muertos en cuestión de segundos.

Mi respiraron se volvía mas acelerada. El miedo volvía a recorrer mi cuerpo y a afectar mi mente, y este maldito pitido en mi cabeza que no me dejaba pensar con claridad.

¡Esto es demasiado! ¿¡De verdad vamos a sobrevivir!?

Mientras me sumía en la desesperación, pude escuchar claramente una voz extraña que me hablaba.

Que vergüenza... No es el momento de tener miedo ahora.

¿Que? ¿¡Quien me habla!?

Por fortuna, el pitido por fin se desvaneció. El sonido de las alarmas y los disparos a lo lejos volvían a hacerse presentes, pero esa voz aún no desaparecía. 

Supongo que ahora tendré que darte una mano.

¿Quien... Quien eres?

Pronto, aquellas emociones que me atormentaban hasta hace poco, parecían desvanecerse en segundos. Mi cuerpo se relajaba a pesar de la situación tan precaria en la que me encontraba.

Me sentía bien... ¿Como...?

De un momento a otro, otra voz comenzaba a escucharse desde fuera.

—Sujeto Numero cuatro. Sabemos que te escondes dentro de esa sala. Si te rindes en estos momentos, te aseguro que permanecerás con vida.

¿Sujeto numero cuatro?  Siento que ya lo he escuchado antes...

Escucha niño. Para salir vivos de este lugar, necesito que me des el control justo ahora.

¿El control? No te entiendo ¿De que hablas?

—¡Nos tienen acorralados! ¿¡Que hacemos!?

Ryan que se encontraba cerca de la puerta junto a otros tipos mas, nos alertaba a todos lo que estaba pasando. Para antes de que pudiéramos hacer algo mas, varios objetos mas salieron disparados hacia nosotros.

En cuanto estas tocaron el suelo, rápidamente estallaron, dejando escapar un fuerte torrente de humo que en pocos segundos cubrió toda la habitación.

La gente alrededor empezaban a toser muy fuerte al respirar este humo. No entiendo, ¿tanto les afecta el humo?

Es gas lacrimogeno. Al parecer, esos bastardos quieren capturarnos vivos.

Un sujeto que estaba a mi lado parecía caer poco a poco por este humo. Podía ver como sus fuertes tosidos le dificultaban mucho el poder respirar. Pude ver como sus ojos enrojecidos empezaban a lagrimear por esto.

—¡Oye! ¿¡estas bien!?-lo sostuve como pude para evitar que cayera al suelo. 

No entiendo. Si en verdad es gas lacrimogeno ¿Como es que esto no me hace daño?

No te hace efecto porque yo estoy aquí contigo. Pero deja eso, necesito que te prepares ahora. Puedo sentir como se están acercando, si quieres que tu y tu grupo sobrevivan, tienes que dejarme tomar el control de tu cuerpo.

Es cierto, podía escuchar las pisadas y los gritos de aquellos que estaban a punto de entrar. Pero ¿tomar el control de mi cuerpo? Para empezar, ¿que va hacer con mi cuerpo?

Oye, ¿crees que es tiempo para dudar? ¡Vamos!

¡Esta bien! ¡esta bien! ¡Haz lo que debas!

Tome el arma del sujeto al que sostenía hace unos momentos.

Espera espera. Se que dije que la tome, pero ese claramente no fui yo.

Fui yo. Como dije, tomare el control de tu cuerpo.

El humo a mi alrededor parecía hacerse cada vez mas denso. Los pasos de mis agresores se hacían cada vez mas fuertes. 

A pesar de ello, apunte mi arma hacia adelante, justo en la dirección en la que provenían los pasos. 

¿Que esta haciendo? No podemos ver nada. Es imposible que le de a alguien así.

Sin dudar, apreté el gatillo causando que el arma se disparase hacia en la dirección a la que había apuntado. Segundo después, pude escuchar los gritos de un hombre que se quejaba por el dolor.

—¡Agh! ¡Me dieron! ¡Me dieron!

—¿¡Que!?

Wow ¿De verdad le di?

Y esto apenas empieza.

Comencé a correr hacia adelante para salir de aquella habitación, encontrándome así con un grupo de cinco guardias armados en el pasillo.

Wow wow wow, ¿¡que estas haciendo!?

Lo mejor en estas situaciones.

Sin dudar, me lance hacia aquel grupo. Apunte mi arma hacia los primeros dos guardias que vi y jale varias veces el gatillo. Ambos cayeron muertos al suelo. 

—Lo siento, no quería...

Grite de manera desesperada, pero inevitablemente fui a por el tercero, tomando rápidamente su rifle y desviando su cañón para que este no me apuntara.

—¡Maldito engendro!-exclamo el guardia con mucho enojo tras verme.

—¡Perdón...!-solo pude responder con cierta pena en mi interior.

Aprovechando que los otros dos de atrás no podían dispararme, pase mi arma por el costado del tercero y les dispare a ambos, haciendo que estos cayeran al suelo por mis balas.

—¡Oh rayos...!

En cuanto hice eso, el tercero que se encontraba cerca de mi, aprovecho para clavarme un pequeño cuchillo en mi brazo. Cuando lo solté por el dolor, este aprovecho para dar prudentemente un par de pasos hacia atrás, con su arma, disparo varias veces a mi pecho.



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En el texto hay: zombis, accion, sobreviviencia

Editado: 23.08.2021

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