El Compañero De La Muerte

I

Pasaron los años y sutilmente su presencia se esfumó aunque el miedo de los mortales jamas se fue.

Olvidaron al extraño y hermoso joven que una vez existió.

Al paso del tiempo todos aquellos que alguna vez lo conocieron o miraron.

Se fueron...

Les había llegado el dia...

El fatídico día de su muerte 
Aunque sin saber que serian juzgados y no habría piedad para ellos.
Pensaron en la paz eterna, sin embargo, el castigo les fue otorgado y sus corruptas y desdichadas almas obtuvieron el castigo Divino? Jamas .

La muerte disfruto sus deseos de venganza y placer al ver aquellos mortales.

Un vals de muerte.

Disfruto observar la agonía de aquellos traidores.

Sufrirían por siglos eternos, sin encontrar la paz anhelada.

Y el estaría en primera fila para observar el espectáculo.
 

***

 

Aunque el tiempo transcurrió y las cosas iban cambiando con el paso de los años, la Muerte vivió en soledad mirando el sufrimiento de aquellos condenados, y cansado de estar observandolos decidió pisar nuevamente la faz de la tierra.

Un 9 de Diciembre de 1768-Inglaterra.

La Muerte camino nuevamente por la tierra y anduvo por muchos lugares, pueblos, ciudades etc, buscando algo que fuera atrayente y fuera digna de su atención.

Así fue un tiempo, que caminaba por la tierra, sin nada más que hacer, lo único que la distraía solo un poco era recoger esas almas corruptas que merecían su castigo.

Iba por pueblos esparciendo temor y deseo, pues no era nada normal ver a alguien con una belleza irreal, y lo que más les llamaba la atención a los mortales era la temible aura que poseía pues te abrumaba y no podías dejar de verlo y desearlo.

No fue hasta que un 26 de febrero de 1769, la Muerte paso por un pueblo, anduvo por sus calles y como siempre nada llamaba su atención, pero a medida que caminaba por ellas algo logro captar su atención.

En un lugar de esos que poseía plantas vivas y consideradas hermosas y juegos eso que los mortales habían llamado Parque?.

Pero en cambió este parecía yacer abandonado, las plantas marchitas y secas, los juegos descuidados, todo parecía haber sido sacado de una película de horror, pero en medio de esa inmundicia había una pequeña cría de humano que sollozaba sentado en un columpio, balanceando sus pequeñas piernas.

El pequeño mortal de inigualable belleza, una piel lechosa, unos ojos sumamente raros pero hermosos puesto que uno era Azul y el otro era color Miel, y un cabello muy inusual de un color que igualaba a la nieve, Blanco y se notaba muy sedoso.

Una pequeña belleza.

Eso sin duda capto la atención de la Muerte y sin dudarlo se desplazo hasta llegar a el donde lo observó unos segundos.

El niño sin ser consciente de que era observado siguió derramando sus lágrimas, entonces la Muerte decidió tomar su apariencia humana, se acerco al niño y con el dedo índice de su mano levanto el mentón del pequeño, que cabizbajo se encontraba 
El pequeño al sentir el contacto se asusto y por la sorpresa fue directo a dar al suelo.

La Muerte se inclino y lo levanto con sumo cuidado.

—Porque lloras pequeño mortal?—

—....

—Qu..qui..quien eres tu!!?—pregunto el pequeño con notable temor.

La Muerte sonrió

—Yo, yo no soy nadie pequeño, ahora dime, porqué llorabas?—

El pequeño sin saber que hacer, le contesto con la voz quebrada.

—soy huérfano y por lo tanto, los demás niños se aprovechan de ello se burlan de mi y me pegan—

Respondió el niño sin ser consciente de lo triste y rota que sonaba su voz y lo que causo en aquel ser de las tinieblas, la Muerte sintió una furia incomparable. Sentía las ganas de hacer sufrir a esos mortales tan insignificantes por haber tocado a esa preciosura humana y no necesito pensarlo dos veces cuando esa palabra llego a la mente de la Muerte.

SU pequeño

Si, su pequeño, porque de ahora en adelante, la muerte velaría por el bienestar de ese niño. Y algún día volvería por el y lo reclamaría como Suyo.

—No te lamentes más pequeño-acarició sus cabellos— y dime cuál es tu nombre?—

El niño sonrió ante la caricia y le respondió con una sonrisa

—Altaïr, mi nombre es Altaïr

—y tu como te llamas?—pregunto curioso el niño.

La muerte lo miro y pensó unos momentos antes de responderle, pues si bien era, la Muerte no tenia un nombre.

Y la muerte sonrió cuándo decidió el nombre por el cual seria llamado, pues que ironías en la vida, y quiso reír a carcajadas.

Caín aquel al que Dios había castigado por su insolencia y pecado contra su hermano Abel.

—llámame Caín—

El claro atardecer ya iniciaba y la muerte había pasado las horas hablando con el pequeño mortal,
El niño reía de alegría porque por fin alguien no lo maltrataba por su físico.

Y cuando el bello atardecer paso, el pequeño había caído dormido cómodamente en el regazo de la muerte, la muerte observaba con creciente devoción al pequeño mortal los dos ajenos a todo lo que los rodeaba.

La Muerte un ser del Inframundo...
El un pequeño Mortal del podrido mundo humano...

Dos entidades en desgracia...

Dolor...

Sufrimiento...

La muerte a pesar de no querer irse y dejar solo al pequeño, tenia que irse y seguir con su trabajo, así que tomo al pequeño en brazos y con solo un movimiento de su mano se apareció frente a un gran edificio que se encontraba en muy malas condiciones

"Esperanza"
 


 

Ese era el nombre que aparecía en el gran letrero desgastado.
 


 

La muerte se apareció dentro del edificio y busco la habitación del pequeño Altaïr 
 



#11232 en Joven Adulto

En el texto hay: gay, muerte, chicoxchico

Editado: 26.07.2020

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