Enojo
Maximiliano no supo en qué momento llego a la oficina de Sofia, pero al encontrarla allí sentada concentrada en su trabajo de pronto le pareció hermosa, lo era sin lugar a dudas solo que él había querido ignorar ese hecho durante mucho tiempo, también se percató que nunca había entrado a esa oficina desde que Sofia tomo el puesto y un sentimiento amargo invadió su corazón, ¿había descuidado hasta ese punto a su esposa?, la pregunta en ese punto le pareció tonta, claro que lo había hecho y aun cuando tenía sus razón en ese momento sintió que todas eran insignificantes para el trato que él le había dado a Sofia, estaba herido y en el fondo su intención es que ella se alejara de él, que no sintiera que debía quedarse a su lado, quería darle libertad para irse con la persona que en realidad amaba, pero ahora todo eso le parecía confuso.
Cuando sus miradas se cruzaron todos sus demonios se calmaron y solo dejaron al hombre confundido y perdido en sus sentimientos que estaba dentro de él.
- ¿Qué pasa? – Cuestiono Sofia sorprendida por la forma tan abrupta en la que Maximiliano había entrado, pero más aun al ver que una vez entro solo se quedó allí observándola en silencio, pero con lo que parecía ser una tormenta que se reflejaba en sus ojos.
- ¡Ah! – Dijo Maximiliano para volver a la realidad, se había perdido en sus recuerdos y emociones que lo llevaron con ella, pero, ¿Qué quería hacer? Se pregunto, ¿reclamar?, es probable, aun así, ¿con que derecho?, se preguntaba.
- ¿Estas bien? – Pregunta nuevamente Sofia un tanto preocupada, las expresiones de Maximiliano cada vez eran más extrañas.
- Si. – Responde Maximiliano reponiéndose lo más rápido que puede, tomando de nuevo control de sus emociones y volviendo a una postura relajada para comentar. – Disculpa que entre tan abruptamente, es solo que estaba pensando que tal vez deberíamos tomarnos un tiempo mañana para revisar lo del proyecto del parque ecológico, ya leí todos los documentos y creo que es bastante viable. – Dijo para dejar a Sofia en la luna, ¿Qué si su esposo se está volviendo loco?, hasta los signos de interrogación sobran, pues para ella es un hecho comprobado.
- Está bien. – Dice dudosa, pues no sabe qué más puede decir.
- Bien, eso era todo, te dejare trabajar, adiós. – Se despide Maximiliano para salir de la oficina aún más rápido de lo que entro, todos los empleados del piso lo observan anonadados con la repentina acción, pero Maximiliano sale con su habitual cara sin expresión y los va saludando con un asentimiento tranquilamente, pero internamente solo se maldice por actuar tan impulsivamente, pero es que cuando vio esas fotos ya no pudo pensar solo actuó.
Una vez ha llegado a su piso, Erick se levanta rápidamente de su puesto para ir con su jefe con cara de absoluta preocupación.
- Señor, ¿le puedo ayudar en algo? – Pregunta rápidamente, pues la cara con la que salió su jefe no presagiaba cosas buenas, pero ahora había vuelto y su expresión era peor, ya que no expresaba nada.
- No, puedes volver a tu trabajo. – Responde Maximiliano, pero después de un segundo agrega. – Sabes que sí, necesito que me ayudes con algo.
- Dígame señor. – Dice Erick prestando total atención.
- Quiero que investigues el origen de estas fotos. – Indica Maximiliano pasándole su celular. Con lo que Erick queda frio las fotos son de la señora con otro hombre, pero haciendo uso de su inteligencia no hace ningún comentario al respecto.
- Inmediatamente, señor me llevare su celular un momento, ya se lo devuelvo, contactare a alguien de máxima confianza. – Afirma Erick pues mejor que nadie sabe que esas fotos no se pueden hacer públicas.
- Te lo agradezco. – Responde simplemente Maximiliano, no hace falta decirle a Erick que el asunto se debe manejar con extrema discreción.
Después de eso decidió concentrarse en su trabajo, pues hasta no tener una imagen más clara de la situación no quiere hacer nada, no quiere cometer los mismos errores del pasado, en ese momento recordó cuando Erick entro a su oficina informándole que Sofia se había marchado el vacío en su corazón fue demasiado fuerte, aunque apenas lo está notando, para ese momento no es tan consciente de sus sentimientos, pero ahora lo era y sabía lo que le había dolido, así que si llego la hora de hablar con Sofia lo hará después de tener más clara la figura.
Mientras tanto,
- ¿Las enviaste? – Pregunta con emoción la mujer al hombre que se encuentra desnudo a su lado.
- Claro que sí. – Responde orgulloso de su excelente trabajo.
- Muy bien, entonces solo debemos esperar noticias. – Dice con un brillo de maldad en sus ojos mientras se levanta de la cama para tomar su ropa y dirigirse al baño. Parece que las cosas tomaran de nuevo su cause o eso es lo que ella espera.
HOLA,HOLA TENEMOS UN NUEVO CAPITULO, ESPERO QUE ESTEN DISFRUTANDO DE LA HISTORIA, NO OLVIDEN DEJAR SUS COMENTARIOS, GRACIAS