Ángela:
—el medio el cuerpo y luego de dos semanas y media un hombre devastado por perder a su familia, en un accidente de auto grito que no quería vivir, que se llevaran su alma que el ya no la necesitaba pero yo si, fui hasta un bar donde se encontraba esa noche tomando Whisky, y le pregunte.
—¿Que ha dicho la noche de ayer en el accidente de su familia? — El parecido extrañado por la pregunta, así que le dije — ¿aun quiere su alma? — el hombre no dudo.
— No, ni quiero mi cochina vida alma o cuero.
Así que pregunte.
—¿esta diciendo que no quiere su alma, si yo la tomo estará bien?
—si, llévatela si quieres.
—¿y que hiciste despues? —pregunte curiosa—¿le quitaste el Alma?
—En ese momento fui feliz, saque el fracaso donde tenía que entregar el alma, me lo había dado mí padre una semana antes, cuando le pregunte como la tomaría, me dio ese frasco de cristal con una espacio de ramificacion parecida a la raíz de un árbol era en forma cilíndrica del tamaño de una botellita de agua; en donde lo abrí delante del el hombre y su alma entro directamente en él; su cuerpo cayo inerte delante de mí, sin vida, llegue a una calle solitaria y llame a mi padre que me dijo.
—pense que tardarías más.
Yo le respondi que no.
—¿como la conseguiste?
—un hombre no la queria, me la ofrecio y la tome; listo.
—Despues de eso, mi padre cumplió su parte del trato me convirtió en su hija, en la princesa.
—wow todo lo que me contaste parece...
—irreal, lo se.
Ella completo mis palabras.
—podrías hacer una película, con la historia de tu vida. —ella me miro sonriente — ganrias dinero y mucho.
—ya ahí una película, pero no es ni la cuarta parte de la historia de lo que fue mi vida, es una copia de las mas baratas. — La mire asombrada.— lo único verdadero es, que yo habite en el cuerpo de esa muñeca.
—¿la película que hablas, es la que conozco? ¿donde salen los Warren ? — ella asintió — si me da un poquito de miedo, pero no tanto como tú.
— por lo menos, ya no titubeas al hablar o te retuerces las manos al hacerlo; me perdiste el mie...
Se le cortaron las palabras, antes de que una nube de un denso humo negro apareciera en mi cuarto, que se iba deshaciendo poco a poco dejando a una figura alta como de un metro noventa y cinco alas grandes negras y pies parecidos al de un águila, ojos sin iris completamente negros, y el cabello un poco largo que le caía a la mitad de las orejas que parecían de elfo, su nariz puntiaguda parecía quere sacarle un ojo a alguien y sus dientes listo para comerse a alguien vivo; si su cara era de un monstruo la que puso al ver a Anabell fue de un demonio muy enojado.
—¿que demonios haces aquí Anabell?
Le dijo la cosa a Anabell; pero ella lo miro con una sonrisa de angel en sus labios.
—visitando a una amiga, Dy.
El parecido mas enojado aún.
—padre te esta buscando Anabell, y si sabé que estas en la tierra te castigara; y no quieres eso, tu amiga humana puede esperar — La voz de la cosa era gruesa.
—dame un momento para despedirme de An.
Ella se acercó a mí sonriendo; puso mala cara cuando me vio horrorizada y casi apunto de caerme de mi cama.
—Dy ¿puedes cambiar tu cara, la asustas?
El la miro y sus ojos se tornaron un poco amarillos.
—¿No? Ok esta buen.
Me miro.
—tengo que irme, prometo que volveré y si no lo hago, no te preocupes.
— Adiós anabell, y no prometo no preocuparme eres mi amiga.
Ella sonrió y me abrazo — pero el tal Dy me miraba fijamente, solté a Anabell y él me siguió mirando, me daba cada vez mas miedo; Anabell se acerco a él y se desaparecieron de mi cuatro.
—¿esto esta pasando? claro, ¿Dy? ¿quien es? — me dije.
Me acomode en la cama, y me acurruque bien cerrando los ojos; de repente la cama se hundió a mi lado y una respiración chocaba en mi frente, sentí unos dedos rozar mis mejillas, deje respirar y sentir mi extremidades del miedo que tenia en mí cuerpo, salí de la cama corriendo y encendí la luz, no habia nada...
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