El Deseó De Ángela

Capitulo 17

Ángela:

Camine por los pasillos del instituto, para llegar a la clase de deportes, llegué a los vestidores femeninos y todas las chicas me observaron; Blanca estaba en otra clase pues hizo cambio de horario, todas murmuraban sobre mi repentino cambio de look, fui hasta mi cubículo correspondiente para cambiarme y colocarme el uniforme de deportes; la puesta del los vestidores se abri y entraron las «chicas pesada» les apode asi por que ellas eran un grupo de chicas de cinco, les gusta molestar a las demas que no se pueden defender, como yo; he sido objeto de ellas unas cuantas veces pero no como las veces que lo soy de Axel y Dax, me quite una de las sandalias plataformas cuando, Rosmary la mejor a miga de Génesis, la lider de ellas fue a un grupo de chicas.

—¿Que dicen? Repitan.
Ella les pregunto asía el grupo de chicas.

—Ella, su cambio es muy repentino, y vino de negro y sin su típica ropa de Hello Kitty o su espantoso cabello y se maquillo; se ve muy hermosa.

—si, y me encanta su vestido.
Dijo una de ellas.

—Quiero saber de que marca es su labial.
Dijo otra.

—¡Ya cállense! ¡Génesis! Estás chiquillas están diciendo que la dientes de lata es hermosa, por su cambio de look

La nombrada me miró y se acercó a dónde yo estaba y se paró delante de mí mirándome de arriba a bajó.

—¡Ho, mira te hiciste un cambio de look! casi ni te reconocí; pero no pienses que por ese cambio te voy a dejar en paz.

—Mira, se oscureció el cabello y ya no usa lentes y...abre la boca ahora, por las buenas.

Antes de que me tomarán y me obligaran a abrirla, le obedecí y la abrí; mostrando que mis frenillos ya no estaban.

—No tiene frenillos.
Me empujó.

Me tambalee y pegue contra el casillero donde estaba la ropa de deportes.

—Adiós pero ni creas que te libras de nosotras.
Se dieron media vuelta y salió de mi cubículo.

Me acomode en mi lugar y empecé a cambiarme de ropa, quite mi vestido y todo lo demas y lo deje en el casillero, me coloco frente del espejo para atarme el cabello en una coleta alta y dejar los mechones rebeldes caer por los costados de mi cara, tomo la camiseta de tiras azul de deporte cuando escucho un estruendo afuera, salgo con la camiseta a medio piner y veo a Génesis, Greta y Rosmary golpeando a una chica, la chica lloraba y intentaba cubrirse el rostro, en un impulso m hacer que a donde ellas estaba y tome a la chica que lloraba de un brazo y se las quite a las que la golpearon.

—¡Estúpida dientes de lata, suéltala o ya verás que t toca a ti!
Chillo Greta.

—¿¡Por qué no la dejas en paz, no eres feliz si no golpeas a alguien!? Puedes golpearte a ti misma, o a alguien que sepa defenderse; no a una pobre chica que no se sabe defender.

No sé que rayos me pasaba, solo se que sentía ira por todo mi cuerpo, sentía mi sangre arder en llamás, estaba apunto de hacer erupción.

—¡Tu te lo buscaste te zorra!

Justo cuando lanzo el puñetazo, mi cuerpo reaccionó al instante y tomo el puñetazo en el aire; ella me miró con los ojos como platós, y sin entender el por qué de mi reacción, pues nunca me había atrevido a alzarle la mano; ella lanzo otro puñetazo y mi cuerpo se desconecto de mi mente, no quería golpear a Greta, nunca había aprendió a defenderme por más que le dictaba órdenes a mi cerebro mi cuerpo no las captaba, mi cuerpo entro en modo de defensa que jamas en mi vida havia sentido y experimentando; ella lanzo el puñetazo con mi otra mano tome su otro puño y los cruse a su espalda en una técnica que jamas habia echo en mi vida, jale sus brazos cruzados en forma de abrazo y puse la rodilla en su espalda, jalando asi sus brazos, pense que se los iba a arrancar; segui dandole órdenes a mi cerebro, las cueles no captaba; eschuche el asombro de las chicas que estaban presentes y la súplica de Greta.

—¡Sueltame por favor!
Se escuchaba adolorida.

—Antes de eso dime; ¿Seguirás lastimando a personas que no se saben defender?
Le pregunté en un tono frio y oscuro, casi parecido al de Christopher.

—¡No!, ¡ya sueltame joder, me arrancaras un brazo!
Dijo en un jadeo.

—Podria arrancarte los dos, así no lastimas a nadie más.
Sonreí de una forma psicópata casi desquiciada.

No sé que le pasa a mi cuerpo, pero una parte de mi se siente bien, al ayudar a personas que no se saben defender.

—Te voy a soltar y en menos de cinco segundos todas ustedes están afuera, en la cancha para ser específica.

Dije señalando a las cinco chicas que me miraban asustadas.

—Esta bien ya sueltame.
La solte dejando que callera al piso.

—No las veo salir ¿Quieren que las saque de este jodido lugar, como le acabo de hacer a esta inutil?

Todas parecieron captar la orden y salieron de los vestidores.

Cuando sali de los vestidos fui directo a la cancha y mire un grupo de personas y entre ellos Axel y Christopher en el medio de la cancha u supe que ellos serian los capitanes de los equipos.

—Puede elegir tu primero.
Dijo Axel a Chris.

—Esta bien, me llevo a...
Parecía buscar a alguien con la mirada.

—¡Angela ven aquí!
Me llamo Christopher.

Fuí y terminó de sacar el equipo...

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

Espero lo hayan disfrutado; recuerden votar y comentar.

Los quiero un montón.

Ya saben mis redes sociales.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.