Capitulo 18

Ángela:

Después que Axel y Chris, terminaron de sacar los equipos; empezamos a jugar, el juego llamado fusilado, Christopher me pidio que me pusiera tras su espalda y asi lo hice para que no me pagarán con la pelota; los chicos del equipo contrario daban todo por ganarnos íbamos en empate, luego de que casi todos perdieran quedamos solo Axel, Dax y Greta de su lado de la cancha y del otro lado estamos Mike, un chico de la clase; Christopher y Yo.

Mientras Dax y Mike, estaban concentrados en pegarle al otro , Christopher y Axel calculaban minuciosamente para darse en un lado justo entre ellos; Greta me miró y puso cara divertida y me guiño un ojo "estamos muerta bich" Dax le pego con la pelota a Mike y estos salieron de la cancha, solo quedando Axel, Greta, Christopher y Yo; en un aguil movimiento no esperado, Axel tiro la pelota a Christopher y este la tomo antes de que lo tocara, siendo mas ágil devolvió su propia pelota, golpeándolo en la nariz; haciendo que de ella saliera una fina línea de sangre, Axel maldijo y salio de la cancha y solo faltaba Greta y Yo, pero ella quiso ser tramposa y dirigió su pelota a mi lugar en una fuerza bruta, cerre kos ojos esperando el golpe que nunca llegó, los abrí lentamente yo mire a Greta petrificada en su lugar mirando a Christopher, él tomo la mano donde yo tenia mi pelota y la lanzo a ella golpeandola entre el labio y la nariz, de la nariz salieron dos gotas gruesas de sangre roja y clara y en su labio se abrió una pequeña linea fina que se le estaba empezando a hinchar, ella salió de la cancha, yo pegue saltitos de emoción por haber ganado.

—¿¡Viste eso, lo viste!?
Dije emocionada a Christopher.

—Si.

Seguí pegando saltitos como una liebre feliz, me acerque a Christopher abrazándolo del cuello, el me miró directamente a los ojos, yo deje de pegar saltos al sentir que sus manos rodearon mi cintura atrayendome hacia él, me sentí nerviosa al instante, el quito su mano derecha y la subio a mi cara quitando el cabello que estorbaba, fijo sus ojos en mis labios y yo los relamí pos inercia, volvio su mirada a mis ojos y se acerco a mi tomándome de la mejilla y pegando sus labios en los míos dandome un suabe beso, reafirmó su agarre en mi cintura y apretó suavemente.

«no puede ser bich, ¡nuestro primer beso!»

“Nuestro primer beso, pero el no tenía derecho de humillar me así, no podía seguirle el beso”

—¿¡Que haces!? ¿¡Porque hiciste eso!?
Dije alterada.

—Lo siento fue un impulso.

Todos nos miraban expectantes.
Lo deje plantado hay, fui a los vestidores para cambiarme de ropa.

Me duche y cambie de ropa y me puse la que tenía antes; me arregle el cabello y salí de los vestidores, justo en ese momento ya Christopher estaba limpio esperandome en la puerta de los vetidores de damas.

—¿Que haces aquí?
La pregunta salió de mi boca tan amarga y sin pensarlo.

— te estaba esperando, necesito preguntar ¿que paso en los vestidores de chicas?, todas hablan de algo que hiciste; ¿Que hiciste?

Ahh, conque no venía a disculparece solo venía a saber lo ocurrido en los vetidores.

—soko defendí a unas chicas de la inútil de Greta.

El me miró y sonrió.

—¿Quieres vengarte de ella también?
Me preguntó con su típica aura oscura y cara de Psicópata.

—si, todas las chicas que pasan por maltrato también.

—puedo ayudarte.

Lo mire, creo haberlo escuchado decir eso una vez; la cual ya no m acuerdo.

—¿Como me ayudarias?
Le pregunté.

—primero, ¿Crees en angeles y demonios?

La pregunta me dejó en shock.

—¿Ah?
Fue lo que salió de mi boca, Anabell se me vino a la mente.

—¿Que si crees en angeles y demonios?
Me preguntó nuevamente.

¡Claro que creo, una niña demonio es mi amiga!

—si, creo en angeles y demonios; la verdad le pido más en Lucifer que en Dios, ¿A qué viene está pregunta?

—Necesito mostrarte algo, ya es hora.
Puse cara de poker cuando dijo eso.

—¿Que cosa? ¿Una secta satánica?
«hey bich, no seas tan pesimista »

—No, algo más impresionante, nos tomaremos el resto del día, ven conmigo.

Dicho esto, me tomo de la mano y salimos al estacionamiento donde me hizo hasta su auto y nos subimos, salimos de el rea escolar por una carretera solitaria.

—¿A dónde vamos, Christopher ? — le pregunté. — está solo por aquí.

—Tranquila, más adelante habrán casas y personas, vamos a mi casa queda alejada del instituto; no pienso matarte.

El resto del camino fue silencioso y tranquilo, Christopher no mintió cuando dijo que habrían personas y casas; nos alejamos un poco más del pequeño pueblo y el estaciona el auto frente de una casa que parece abandonada, algo parecida a un castillo, la casa es vieja de un color morado oscuro, está tiene dos torres en la segunda parte, parecidas a las de un castillo antiguo, la puerta es marron; toda la casa tien un aire extraño y misterioso, como el de alguien pero no se de quien.

¿De verdad está es la casa de Christopher?

—vaja, ven conmigo, es misteriosa lo sé.
Me dice Christopher al notar mi impresión.

—¿Por qué me trajiste a tu casa para enseñarme algo?

—ya lo verás, primero; promete que note volverás loca.

Me reí, si; me reí en su cara, Pero el estaba serio, así que deje de hacerlo.

—Lo prometo.

El entro a su casa y Lugo yo lo seguí, coloco la mochilas en un viejo sofa negro , y se quitó su tipica chaqueta negra, me miro fijamente.

—primero, necesitó decirte mi nombre.
Lo mire confundida, porque ya se su nombre.

—Pero ya se tu nombre, es Christopher .
Dije lo obvio.

—No, ese no es mi nombre real, mi nombre real es Dylan Criptón.

Lo mire confundida, ¿como que su nombre es Dylan?

— Para que puedas entender, el porque mi nombre falso, solo debes sentarte y tomar un poco de agua.

Hice lo que me pidió y lo mire.