Universo: Eifell
Lugar: En algún lugar del Mar
Horario: ¿? horas, planeta Tierra.
Tiempo: Dos años antes del acontecimiento de La novela: La Senda De La Venganza
—¡Todos, no dejen que sigan avanzando! —suena el grito de Rislek mientras que todos los tripulantes del barco continúan atacando por medio de cañones y trabucos contra sus enemigos.
—¡Necesitamos defender el estribor! —grita la voz de una joven chica que se encuentra a un lado de él.
—¡Lo sé, Chloe… ¡Todos sigan atacando! —ordena Rislek mientras que más de veinte marineros trabajan duramente en la defensa en todo momento.
En este momento todos se encuentran ubicados en una carabela con bandera de símbolo: “Ж” de acuerdo a su nación. La nave está elaborada de madera de excelente calidad y resistencia, pero debido a los ataques continuos; esta se está destruyendo de poco en poco. El barco cuenta con cinco cañones de guerra de los cuales: dos están en el babor y estribor y solamente uno se encuentra hasta la proa, donde inicia el Bauprés para atacar frontalmente; una estrategia dada por el capitán Rislek desde un principio.
Se logra ver que el capitán Rislek posee un conjunto de unos pantalones de color azul, una camisa blanca con chaleco de color azul, posee un cinturón de oro, unas cubre botas de color negro brillante y un sombrero grande de color azul, tiene pelo largo ondulado de color negro, su edad es de treinta y tres años, no está tan musculoso y posee un trabuco dorado de aproximadamente de 40 centímetros.
Chloe por otro lado, posee unos pantalones de color negro, una camisa de color blanca con un chaleco de color negro, posee un cinturón de oro, unas cubre botas de color negro brillante y un sombrero grande de color negro, tiene pelo rojo brillante y un collar de oro. A pesar de que aún tiene veintiocho años, posee un excelente cuerpo, ya que sus medidas son aproximadamente de: 110-80-99.
Pudiéndose observar que más de cinco carabelas se acercan contra ellos a gran velocidad, ya que en medio de todos los reinos se está desarrollando una fuerte batalla entre más de quinientos barcos de guerra de todo tipo.
—¡Este barco no va a soportar! —suena la voz desesperada de un tripulante cerca de ambos.
—¡Chloe, llegó la hora de contraatacar! —ordena Rislek, volteando a ver a su compañera seriamente.
—¡Llegó mi hora… ¡En el nombre de la Diosa de la Conquista, declaro que esta victoria es mía! —grita Chloe, comenzando a brillar el barco fuertemente de color morado para seguidamente aparecer junto con ellos más cañones de guerra que no pesan absolutamente nada de manera mágica, siendo todos un total de diez, contando las que poseían anteriormente para seguidamente; comenzar a disparar a diestra y siniestra por todos lados sin la necesidad de que algún tripulante las esté manipulando. Impactando las balas de los cañones fuertemente contra varios objetivos para eliminarlos en tan poco tiempo mientras que avanzan.
—¡Excelente Chloe, buen trabajo! —grita Rislek, viendo que los barcos enemigos que se encontraban cerca de ellos, han sido eliminados con gran facilidad y que los barcos que se encontraban luchando fuertemente en medio de todos; comienzan a escapar hacia sus respectivos destinos apresuradamente.
—¡Los enemigos se retiran! —suena el grito de un marinero, observando que un poco más de cincuenta barcos; escapan hacia sus respectivos reinos.
Decidiendo Rislek comenzar a dirigir el barco hacia otro lado por medio del timón mientras que todos festejan la gran victoria.
—¿Por qué no los asesinamos? —pregunta Chloe, volteando a ver confusa a Rislek delante de todos.
—No Chloe, necesitamos esperar ordenes con respecto a esto —responde Rislek mientras que Chloe se enoja—. No podemos hacer nada, ya que podemos crear un gran problema político en todos los reinos. Volteando a verla seriamente delante de todos.
—¡Este día hemos vencido, pero recuerden las ordenes que nos dio nuestro soberano! —grita Rislek delante de todos mientras que Chloe decide voltear a ver hacia otro lado—. Hoy vencimos, pero tenemos que esperar órdenes por parte de nuestra majestad para poder ir a conquistar. Decidiendo enfocarse en manejar el timón para dirigirlos hacia su respectivo destino.
Decidiendo Chloe no responderle nada para seguidamente dirigirse hacia otro lado seriamente.
«Perdónenme todos, sé que les gustaría vengarse contra todos esos enemigos, pero hemos cumplido nuestra misión por parte de nuestra majestad… Chloe, no te desesperes », piensa Rislek.
Lográndose ver que el barco avanza hacia un gran reino conformado de una gran vegetación y avance tecnológico tranquilamente.