Universo: Desconocido.
Ubicación: Gran templo sagrado
Media hora después de los acontecimientos entre los dioses más peligrosos de todos los universos.
Sayoko observa seriamente los diferentes planetas que giran alrededor de ella, ya que se encuentra parada en medio de la gran base circular que posee el símbolo de: 8.
Ella sabe que al fin posee todos los manuscritos que le encargó su amo anteriormente y simplemente tiene que esperar para devolvérselos.
«A todos los que me logran escuchar, quiero que se reúnan en el Gran Templo Sagrado », suena la voz de Tsubaki dentro de la mente de Sayoko.
Comenzando Sayoko a ver el suelo completamente seria, ya que presiente que algo malo va a suceder por la situación que se presentó anteriormente.
Detectando ella que varios portales comienzan a abrirse para comenzar a salir Lius, Maltan, Lisa, Rudba y Aslius en ese momento.
—Maldita sea, teníamos que encontrarnos con esta nuevamente —suena la voz de Maltan, observando a Sayoko completamente enojado mientras que Lius no responde nada.
—Se recuperó la maldita —anuncia Lisa observando a la diosa completamente enojada.
—Es un honor que unas simples escorias me visiten —dice Sayoko, comenzando a ver a todos seriamente mientras que todos la observan completamente enojados.
—Vaya, así que la diversión está a pun… —comenta Rudba, siendo interrumpido por la voz de Lius delante de todos.
—¡Silencio! —grita Lius, llamando la atención de todos hacia él—. El gran maestro quiere vernos. Volteando a ver a Rudba seriamente—. Por algo nos citó simplemente a nosotros. Comenzando a negar con su cabeza seriamente mientras que Rudba y todos los demás se ponen serios.
—Maldita sea, tiene razón —dice en voz baja Sayoko decidiendo invocar por medio de su magia: una gran mesa de medidas exageradas llena de comidas y bebidas, ya que las medidas de la mesa son de: treinta metros de largo por quince metros de ancho.
Logrando todos los visitantes observar la gran mesa que ha invocado la diosa, pero todos saben que algo malo se acerca contra todos ellos en ese momento.
—Lo siento —anuncia Lius, llamando la atención de todos hacia él—. No tengo hambre. Decidiendo mirar el suelo seriamente mientras que todos no hacen nada.
Comenzando todos a escuchar los pasos de cierto extraño que se acerca hacia ellos lentamente. Decidiendo Lius y todos los demás prepararse en posición de firmes, ya que les sale a su encuentro Kirika completamente seria.
—¿Por qué los niños más rebeldes de todos los universos están tan calladitos? —pregunta Kirika, decidiendo voltear a ver la gran mesa de alimentos y bebidas para añadir—. E incluso han preparado un gran festín. Observando con una sonrisa sospechosa a la gran mesa mientras que avanza hacia los demás dioses.
—Esa mujer, nunca la he visto —informa Lius, decidiéndose acercar un poco hacia Sayoko mientras que ella lo escucha atentamente.
—Yo tampoco, pero tiene más fuerza que todos nosotros juntos. No logro entender esto —dice Sayoko mientras que Kirika les sonríe en ese momento.
—Bueno, si se están preguntando de dónde vengo, quiero informarles que el ser supremo definitivo Tsubaki me creó con el propósito de detener sus enfrentamientos —anuncia Kirika, viendo a todos con una sonrisa mientras que todos la observan seriamente.
—Pero eres más fuerte que todos nosotros, eso quiere decir que estás al nivel de los dioses más poderosos de todos los universos —dice Sayoko mientras que Kirika comienza a negar con su cabeza.
—No querida, no estoy al nivel de todos ellos. Simplemente podríamos decir que; soy la segunda diosa más poderosa de todos los universos, al igual que todos ustedes —informa Kirika.
—Es imposible, el segundo lugar es el incompetente de Ginjo —comenta Lius—. El tercer lugar soy yo. Viéndola completamente enojado.
—Hmm, según la elección de ese dios podríamos decir que sí, pero ya analizándolo bien e ignorando todas esas estupideces de los rangos existentes. Todos nosotros estamos al mismo rango así como Ginjo. Simplemente no estamos al nivel de los creadores supremos definitivos, al menos de que nos presten sus fuerzas como anteriormente pudieron apreciarlo —anuncia Kirika, decidiendo dirigirse hacia la gran mesa para degustar un poco de alimento en ese momento mientras que todos la observan seriamente.
Dándose cuenta todos que un extraño portal se abre cerca de ellos de forma misteriosa.
—Veo que ya están reunidos lo que quería ver —suena la voz de Tsubaki, saliendo apresuradamente del portal para pararse en medio de la gran base circular.
—Lo… Lo lamento, gran maestro —dice Lius, decidiendo arrodillarse junto con todos los demás a excepción de Kirika que se encuentra degustando varios platillos completamente feliz.
—Tenían que pelearse entre ustedes nuevamente, pero veo que ya se tranquilizaron por la intervención de Kirika —comenta Tsubaki, decidiendo dirigir su mirada hacia Kirika delante de todos—. Bueno, faltan otros más en este momento. Decidiendo chasquear los dedos de su mano derecha para que seguidamente; aparezcan Hastur, Azathot, Ginjo, Wonja y Louzuc.
—Pero, ¡¿Qué… —inquiere Hastur, viendo asombrado el lugar junto con su hermano mientras que son paralizados juntos con los recién visitantes.
—Per… —anuncia Ginjo mientras que todos se dan cuenta que Tsubaki, decide invocar silenciosamente un aura de color azul brillante para que se dirija hacia ellos en ese momento.
Decidiendo nadie hablar en ese momento mientras que el aura desaparece misteriosamente delante de todos.
—Bueno, ya tengo a casi todas mis creaciones, quisiera saber, ¿cómo está la situación? —pregunta Tsubaki, decidiendo dirigirse hacia la gran mesa para comenzar a degustar los alimentos y bebidas mientras que Hastur, Azathot, Ginjo, Wonja y Louzuc se paran de sus lugares para seguidamente seguirlo en ese momento, ya que parece que la magia que los tenía paralizados se ha eliminado de forma misteriosa.