Capítulo 49:

Oliver.
Llego la hora,estoy nervioso, ansioso,las manos me transpiran.
Me siento fuera de lugar,todos se ven tan relajados,porsupuesto que saben lo que hacen y yo no tengo idea.
Rebeca me aprieta la mano fuerte cada vez que le viene una contracción ,yo solo puedo apoyarla.
Como padre, ser testigo codo a codo de la sabiduría y poder de la mujer que tengo al lado hace que mi admiración y amor hacia ella crezca enormemente, y sin duda esto nos unirá aún más como pareja.
Lo único que me queda es estar aquí y  presenciar en Rebeca tal valentía, fuerza y ​​resistencia durante el parto.

_¡ Felicidades padres!es una niña hermosa. - nos dice la médica cuando la coloca encima de Rebeca para que puedamos tener aquel primer contacto.

Presenciar el parto; sin duda es lo más cercano que hay a un milagro y esto te hace cambiar la perspectiva de  tu vida, todo cobra otro sentido.
Sentir ese llanto tan tierno,miro esa pequeña criatura en los brazos de la mujer que amo y no puedo creer lo afortunado y feliz que soy.
La felicidad y el amor que nuestra primera hija trajo a nuestras vidas son inconmensurable. Su llegada es tan gratificante.

La enfermera la lleva a otra sala y voy con ella mientras terminan de atender a Rebeca,le doy un beso en los labios.

_ Iré con nuestra pequeña,¿estarás bien mi amor?. Gracias por esto. - digo tan emocionado que una lágrima corre por mi mejilla.

_ Nos vemos en un rato en la sala. Te amo. - me responde.

Lo hace tan tranquila,¿Cómo es posible que pueda recuperarse tan rápido cuando acabo de ver el trabajo y sufrimiento que ha tenido al traer a nuestra hija al mundo? La admiro y admiro a cada mujer que ha traído un hijo al mundo.

Rebeca.
Me siento muy agotada,pero feliz. Estoy ansiosa por tener a mis hija en brazos. 
Acaban de traerme a sala,aquí está lleno de flores ,globos y regalos. Un peluche enorme y una canasta llena de cosas. No estoy en condiciones de mirar nada con detalles,pero por lo que veo desde mi cama ,todo es hermoso. Aunque lo único en que puedo pensar ,es en mi Sofi .

_ Pronto traerán a tu pequeña. El papá está con ella, aprovecha y descansa unos minutos. Pues después ya no podrás hacerlo. - me dice la enfermera mientras sonríe y termina de arreglarme en la cama.

_ Gracias,pero no creo poder hacerlo hasta tenerla en mis brazos. - sonrío.

_ No permitiré visitas hasta que estés con tu pequeña y puedas descansar. Necesitas hacerlo y recuperar energías. ¿Está bien? - dice y se retira.

Recuesto mi cabeza en la almohada y siento que alguien entra a la habitación.

_ Aquí está mami,hola mami, llegué. - dice Oliver.

Muero de ternura al verlo entrar con ella en brazos y hablando así.¡ Si,mi pequeña está aqui!
Oliver se acerca ,me la entrega tan delicadamente,cuidando su cabecita,y ese pequeño cuerpecito tan frágil; me besa la frente.

_ Ten,es nuestra pequeña princesa. Gracias por hacerme el hombre más feliz del mundo. No necesito más que esto,ustedes son todo para mí. - sus palabras hacen que las lágrimas corran sin parar.

_ Es hermosa Oliver,es tan pequeña. Gracias a ti por hacerme madre. Gracias por estar aquí. Te amo. - digo admirando lo hermosa que es mi niña.

Intento alimentarla,ya que está muy dormida,pero es necesario,ya me lo advirtió la enfermera. Enseguida se prende en mi pecho,se alimenta desesperada. 
Y con la pancita llena,sigue durmiendo. La dejo en la cuna , recomendando a Oliver que no despegue un ojo de ella. Pues yo intentar descansar un momento.

_ Tranquila preciosa,descansa que cuidare a ambas. - me besa.

_ Cualquier cosa ,me llamas. - digo.

 No quiero dormir,pero lo necesito. Necesito recuperar bien para estar como nueva.

Despierto con unas voces a mi alrededor. Son Erik y Mía. 
Erik ve que he despertado y solo me he quedado observandolos.

_ Hola ¿Como te sientes pequeña?- me pregunta mientras me besa la frente y se sienta a mi lado.

_ Ya soy mamá,mi pequeña está aqui. No lo puedo creer. - digo observandola en brazos de Mía.
_ muy pronto tendrás al tuyo en brazos también. - le hablo a Mía y sonrío .

_ Vamos con mami,mami ha despertado. Felicitaciones mami. - me entrega a Sofi .

_ ¿Dónde está Oliver? - pregunto.

_ Fué a cambiarse ,ducharse y alimentarse. No es por nada,pero realmente se veía mal .- Erik ríe.

_ Ya cállate. - Mía le da un golpecito en el brazo.
_ dijimos que fuera tranquilo,que te cuidariamos.

Alguien golpea la puerta,es Roxana y Javier.

_ Hola,¿podemos pasar?- dice Roxana.

_ Claro,adelante. Debes conocer a tu nieta. - se la entrego.

Ella y el señor Olmos se quedan allí ,admirando a mi pequeña princesa. Quien diría que está señora cambiaría tanto así.

_ Saben…- hace un pausa y acaricia las mejillas y manitos de Sofi._ Tiene los ojos de Oliver cuando nació,pero sin dudas es muy parecida a ti Rebeca. Se que no he Sido una buena madre últimamente. Te trate muy mal porque solo quería lo mejor para mis niños. Pero mis niños,ya no son tan niños.- sonríe.
_ han crecido y no se en que momento. Soy abuela y no quiero perderme esto. - dice Roxana con los ojos humedecidos.

_El amor de una madre es sin duda el más grande e infinito. Entiendo perfectamente como te has sentido.
No necesitas reconciliarte  entre abrazos y besos si no lo deseas. Lo importante es que siempre estés presente en la vida de tu nieta. - hablo mirándola a los ojos.

-Cuando los nietos llegan, el corazón  ya es lo suficientemente grande luego de haber sido padres, hemos aprendido mucho de las experiencias buenas y malas de la vida y ahora somos más pacientes y más generosos. Por eso, el amor de los abuelos hacia los nietos es más intenso y mucho más puro.- dice el señor Queen mientras va entrando a la habitación.

_ Sostenla. Es nuestra nieta. Es realmente hermosa. - añade Roxana.

_Para los abuelos, los nietos son un regalo en el atardecer de la vida, les inyectan nueva energía y muchas ganas de vivir y de seguir soñando. Los abuelos sonreimos a través de nuestros nietos, me siento dichoso y realizado con cada uno de los logros de mi hijo y vuelvo a abrazar la vida a través de la ingenuidad de esta bebé. Los ojos son iguales a los de Oliver,¿Verdad Roxana?- Jaime habla emocionado.