5. Nueva Vida

⚠️Este es mucho más largo⚠️

Se quedaron por un momento en silencio en la sala hasta que Elizabeth, su madre, hablo.

—Lamento no haberles dicho la verdad antes, en especial a ti Moon, tuve que guardar el secreto porque tu madre me lo había pedido.

Jack la miro sin decir nada, no era la primera vez que la veía mentir. Suspiro — ¿dónde está mi habitación? —pregunto. Deseaba darse un baño y luego dormir con la esperanza de no volver a despertar jamás.

Lo miro para luego ponerse de pie —síganme —dice caminando hacia los escalones.

— ¿Has venido aquí antiguamente? —pregunto Audrey detrás de ella.

Se giró para verla —Esta es mi segunda vez aquí. La primera fue cuando me entregaron a Moon oficialmente para así demostrar en el mundo humano de que era mi hija.

Asintieron empezando a subir por los escalones del lado derecho.

—Entonces... ¿Qué pasará ahora? —Vuelve a preguntar — ¿Qué le dirán a la escuela? ¿Seguiremos yendo? ¿Cómo iremos a nuestros trabajos? Realmente no entiendo cómo nos trasladaremos de Transilvania a los ángeles todos los días. ¿Será igual como llegamos aquí? ¿Por un portal? ¿Él nos empezará a llevar a una nueva escuela o a la misma? Y...

Su madre se gira poniendo ambas manos en sus hombros —son muchas preguntas Audrey... —dice sonriendo —no tengo una respuesta para ello ahora así que, primero lo primero. Les enseñaré sus habitaciones para que se den una ducha y retiren todas esas sangres secas y el sudor y descansen. Ya después veremos que haremos respecto a la escuela, la universidad y el trabajo, lo importante es que están sanos y salvos.

Asiente bajando la mirada al suelo. Su madre se gira terminando de subir los escalones doblando a la derecha. «Negra por fuera y toda blanca por dentro» pensaron viendo un largo pasillo con paredes blancas al igual que el suelo con una alfombra verde olivo, candelabros colgando del techo hasta el fondo donde había un ventanal con vista al bosque. Había puertas grandes de color blanco y en el techo estaba plagado de querubines en un hermoso cielo azul con nubes algo anaranjadas. Era hermoso.

Caminaron hasta pararse a una puerta en donde decía "Ashley" con letras moradas.

— ¡Oh!, ¡es mía! —exclama haciéndose paso entre sus hermanos abriendo la puerta quedando impactada. Su habitación era el triple de grande que la suya — ¡Dios! La decoración era ¡hermosa!

En la pared que estaba su cama estaban BTS, en la pared izquierda Black Pink; su escritorio que ocupaba una pared entera con todas las cosas que podría necesitar tales como: lapiceros, crayones, una IPad y muchas cosas más. En la pared frente a su cama una televisión de igual tamaño de la que estaba en la sala y arriba las caras de Stray Kids. Debajo de su gigantesca cama una alfombra blanca y al frente un ventanal con vista hacia el bosque.

Se llevó ambas manos a la boca muy emocionada, se giró hacia su madre mirándola casi a punto de echarse a llorar —¿Todo esto es mío? ¿En serio? —pregunto dando saltos.

Su madre la miro encantada viendo la felicidad de su pequeño retoño asintiendo, se echó a reír cuando corrió hacia ella abrazándola dándoles las gracias —No es a mí a quien tienes que darme las gracias, es a Dorian. El mando hacer todo esto para que estuvieran una buena estadía durante su estancia aquí.

Se aleja viendo a su madre asintiendo.

—En la puerta del fondo está tu baño privado y el armario.

—Ok... —dice con voz cantarina emocionada.

—Bien, los demás síganme —habla yendo de nuevo hacia el pasillo.

La siguiente puerta fue la de Abby.

Al entrar enloqueció al igual que su hermana. La cama grande con la pared del fondo blanco con dibujos animalista de cocina con su nombre escrito de color rojo y grande. Al frente un escritorio que ocupaba toda la pared y arriba la televisión del mismo tamaño con todo lo que podría necesitar para estudiar. Al lado de su cama estaba una puerta blanca que llevaba al baño privado y al armario igual que el de Ashley.

Su madre sonrió viéndola feliz inspeccionando todo. Salió de la habitación encontrándose con los demás, caminaron hacia la siguiente puerta la cual tenía el nombre de "Audrey".

— ¡Uh sí! —exclama abriendo la puerta encontrándose con las paredes de verde pastel, una gigantesca cama enfrente del enorme ventanal. En la pared del lado izquierdo un escritorio abarcando la mitad de la pared y una puerta que daba al baño y al armario. Del lado derecho un aro de luz y una gran televisión en la pared con una chimenea pequeña debajo, en su escritorio encontró todas las cosas que utilizaba para dibujar y compartirla en sus redes sociales. Se emocionó porque al fin tenía una IPad con la que podría dibujar no solo en papel como lo estaba haciendo también digital como siempre quiso.

Se retiró lentamente dejándola ahí emocionada por todas las cosas que estaba viendo en su nueva habitación.

La siguiente habitación fue la de Moon. Las paredes eran de un marrillo pastel con pequeñas palmas de color verde oscuro pintadas. En el lado derecho estaba su escritorio igual de lleno con cosas de utilidad como el de sus hermanas, un puf amarillo oscuro cerca del ventanal con una pequeña mesita al lado y una IPad. En la pared que estaba frente a su cama y el ventanal había repisas con pompones, sus trofeos los cuales ya no estarían guardados en una caja vieja debajo de su cama porque no había lugar en donde ponerlos. Su nombre estaba escrito en grande con letras moradas brillosas; la puerta blanca estaba en frente de su cama a diferencia de las demás.

—Sam y Charlotte se quedarán contigo aquí, hablaré con Dorian para que la lleven a su casa más tarde, a estas alturas me imagino que sus padres deben de estar buscándolas—dice mirándolas.

Asintieron viendo la nueva habitación de su amiga emocionada. Era el triple de grande que las de ella.

Camino hacia la salida, pero se detuvo girándose— por cierto, el control que está ahí le das al botón rojo y la televisión saldrá inmediatamente de debajo de tu cama—dicho eso sale de la habitación viendo a Jack y Allison, los dos únicos que faltaban para ver su habitación.