Epílogo.

Adalind y Nick llevaron a Phoebe al hospital, le hicieron toda clase de pruebas y al final dijeron que estaba sana y no encontraban una explicación para que la chica hubiera perdido la memoria. Tras eso los médicos llamaron a servicios sociales para ver que harían con Phoebe, ya que la chica era menor de edad.

Phoebe habló con la asistenta social, y le dijo que la llevarían a un orfanato mientras averiguaban donde se encontraba su familia. Ahí fue cuando Adalind y Nick se metieron en la conversación. No querían que Phoebe se fuera a un orfanato, así que hablaron con la asistenta social y empezaron a arreglar papeles para que Phoebe se pudiera quedar en su casa. 
Nick fue quien se encargó de arreglar los papeles, no tuvo problema ya que él era policía. Mientras Adalind y Phoebe se marcharon a la casa de la primera y esperarían a que llegase Nick.

Todo salió bien y los días fueron pasando y dieron paso a las semanas y estas a los meses. Phoebe no recuperaba su memoria y no había ningún aviso de desaparición con la descripción de Phoebe, así que Nick y Adalind decidieron adoptar del todo a Phoebe.

La chica estaba muy a gusto con ellos, empezó a ir al instituto y sacaba muy buenas notas y eso tenía muy contentos a Nick y Adalind.

Después de estar con ellos dos meses Phoebe recordó el día de su cumpleaños y la edad que tenía. Justo al mes siguiente cumpliría 17 años, eso alegró a Adalind y Nick, pues eso quería decir que Phoebe empezaba a recordar cosas. Pero fue pasando el tiempo y a Phoebe ya no le llegaban más recuerdos, así que se olvidó de eso y empezó a vivir su vida con los Burkhardt.

Seis meses pasaron, ya estaban en verano y Phoebe se encontraba en casa, estaba esperando a que llegase Teresa, su mejor amiga y muy buena amiga de Nick y Adalind, pero algo pasó.

Phoebe se encontraba sola en casa ya que Adalind se había marchado al bufete en el que trabajaba y Nick se encontraba en comisaría trabajando en un caso. Teresa llegó un poco alterada y eso hizo que Phoebe se pusiera un poco nerviosa. Le preguntó que le pasaba, pero Teresa no respondía. Tan solo miraba por las ventanas de la casa.

- Llama a Nick – le insta Teresa.

- ¿Pero que sucede? – pregunta Phoebe con el móvil en la mano, buscando el número de Nick.

- Tú llámalo y dile que venga a casa.

Phoebe lo hace, pero no le da tiempo a decir ni una palabra. La puerta de la casa se abre de golpe y un hombre que no conocía de nada entró por ella. Phoebe se asustó al verlo. Las escleróticas del hombre eran rojas en vez de blancas y en los parpados inferiores tenía como unas venas negras que bajaban por sus pómulos, pero lo que más asustó a Phoebe fue ver los colmillos de ese hombre. Eran más grandes y afilados de lo normal.

El hombre se abalanzó sobre Teresa y fue cuando Nick contestó al teléfono.

- Hola Phoebe, ¿sucede algo?

- Ha entrado un hombre en casa – susurra Phoebe -. Teresa está luchando con él y ella ha dicho que tenías que venir.

- Voy para allá.

Phoebe se queda paralizada, viendo como Teresa se enfrentaba a ese hombre monstruoso y ella iba perdiendo. 
Vio como el hombre clavaba sus colmillos en el cuello de Teresa y esta empezó a gritar. Fue ahí cuando Phoebe reacciona. No sabía que hacer pero su cuerpo se ocupó de todo. Phoebe le dio una patada en la cabeza al hombre, haciendo que soltase a Teresa. Esta cayó al suelo inconsciente y eso hizo que Phoebe enfureciera. Le lanza otra patada al hombre en pleno pecho y lo lanzó por los aires. No tuvo que pelear mucho contra él, ya que en cuanto el hombre le puso una mano encima este se paralizó, la miró con los ojos muy abiertos y cayó al suelo convulsionando. Comenzó a volverse gris y las mismas venas negras que tenía bajo los ojos empezaron a salir por todo su cuerpo.

- Phoebe – Nick había presenciado lo que había pasado. Vio como el hombre había muerto sin motivo alguno. No se preocupó por eso, sino que se acercó a la chica y la mira de arriba abajo, cerciorándose de que estaba bien.

Segundos después entró Hank, el compañero de Nick y fue directo a por Teresa. Le tomó el pulso y presionó la herida de su cuello, tras eso dijo que Teresa estaba bien.

- Phoebe, ¿estás bien? – quiere saber Nick, pero la parálisis había vuelto y no pudo contestar.

- Creo que está en estado de Shock – dice Hank -. Phoebe, entiendo como te sientes.

- ¿Qué era eso? – susurra ella con un hilo de voz -. Yo...yo...

- Eh, está todo bien – Nick hace contacto visual con Phoebe -. Está todo bien. Tú no has hecho nada, Phoebe.

- ¡Phoebe! – Adalind entra en la casa como un remolino y abraza a la chica con todas sus fuerzas -. Oh, Dios mío. ¿Estás bien? ¿Qué ha pasado?

Phoebe al final se sentó en el sillón junto a Adalind, ya que esta no se apartaba de ella. Vio como Nick y Hank se llevaban el cuerpo del hombre y tiempo después despertó Teresa. Con mucho cuidado se levantó del sillón donde Hank la había tumbado y se acerca a Phoebe.

Entre ella y Adalind le explican lo que había sucedido y cuando llegan Nick y Hank empiezan a contarle sobre los seres sobrenaturales.

Les explican que ese hombre que había entrado en la casa se trataba de un vampiro, uno que iba tras Teresa desde hace mucho tiempo. Le cuentan que Nick y Teresa provienen de familias que eran cazadores y que mataban a todo ser sobrenatural que se sobrepasaba. Cuando Hank lo descubrió se asustó mucho, pero después se unió a Nick. Tiempo después apareció Teresa y la ayudaron en todo lo que pudieron y después llegó Adalind. Ella es una bruja, una buena según le dicen, pero no siempre lo fue.

Nick, Hank y Teresa intentaron cazarla, pero Adalind era demasiado buena en lo suyo y no lo consiguieron. Después ella quedó embarazada de un brujo, pero le quitaron a su hija, eso le hizo darse cuenta del mal camino que había llevado y empezó a cambiar. Le pidió ayuda a Nick para rescatar a su hija y este aceptó a regañadientes. Al final lo consiguieron y se enamoraron. Rescataron a la hija de Adalind. Nick y ella tuvieron un hijo. Fueron felices por un tiempo, pero el aquelarre de Adalind llegó y asesinaron a la niña y al niño. Eso destrozó a Nick y Adalind, tanto así que los dos solos acabaron con el aquelarre.