Me lo quedo mirando cuando paramos a descansar un poco, me doy cuenta que es igual de alto que mi hermano por lo menos pero el tiene el pelo negro y los ojos de un marrón muy oscuro, aun asi es un chico precioso, no mentire.
- Empiezas a asustarme que me mires de esta manera tan fija.- Noté como me subían los colores a las mejillas.
- Lo siento, no quería incomodarte…
- Ey que era una broma, me alagas a menos que lo hicieras porque ves algo malo en mi.- ¿Pero este chico se ha visto? Que va a ver mal en él.
- No contestó a preguntas estúpidas la verdad, estaba fijándome en que eres muy guapo.- Esta vez fue él quien se ruborizó.- Me da que hemos cambiado los papeles.
- Callate idiota.
- Lastima que no te vayan las chicas.- Le guiñe un ojo porque sabía perfectamente que era broma y él se rio conmigo.
- Lo agradezco porque si no ahora mismo estaría muerto.- Iba a preguntar por qué pero un gruñido nos interrumpió, me giré para ver de donde provenía y mi corazón dio un salto.
Delante mío se encontraba Ethan con un pantalón de chándal y una camiseta de tirantes, ¿Lo malo? Iba acompañado de una rubia de ojos verdes que enseguida distinguí como la chica que vi en el balcón anoche. Los dos nos estaban mirando, ella como si le importemos absolutamente nada y el, el la verdad es que no sabría qué decir su mirada transmitía muchas cosas pero ninguna era buena eso estaba claro.
- Hombre por fin se digna a aparecer el señor.
- He estado ocupado Damián.- Su voz era dura y fría, ¿Y a este que le pasaba ahora?
- Buenos días.- No obtuve respuesta, al menos de él porque por lo menos ella sí que saludo con un gestó con la cabeza.
- Tú eres ... .- Damián hizo la respuesta que yo sin saber por que estaba deseando hacer.
- Soy Dana, empiezo este año el curso y soy animadora.- Solo faltaba que nos dijera su DNI, me sentía mal por estar criticando a la chica sin sentido pero así me salía.
- Sin ofender eh, pero tío desde cuando traemos a los ligues a correr y todo.
- Uno no es solo mi ligue.- Eso quería decir que en poco seria su novia.- Dos, tu estas aqui con ella.
- Ella tiene nombre. - Él lo sabía perfectamente, ¿Por qué se comportaba así?
- Lo sé.- Ni siquiera me miro al contestar.
- Ethan soy gay por el amor de dios.- Parecía arrepentido, como si hubiera recordado eso ahora.
- ¿Y vas a correr siempre con nosotros? .- Ahora si que me hablaba, increible.
- No, tranquilo, no quiero estropear vuestro momento. Damián te veo luego por la universidad supongo, gracias por la compañía.
Eso fue lo último que dije antes de irme, no me sentía agusto para nada, además hoy venia un dia duro y no quería perder tiempo en cosas que no lo merecen. A las ocho y media ya estaba duchada y preparada para empezar esta nueva aventura, mi hermano se había ofrecido a acompañarnos y a ensenyarnos todo. Como no, Lía no había tardado en aceptar pero yo necesitaba más espacio, me gustaba ir a mi aire, prefería descubrir yo las cosas.
Mientras entraba por las grandes puertas de la universidad me vinieron a la mente todas las veces que dije que no lograria entrar, que no me merecía ser aceptada, me acordé de todas las noches llorando y sufriendo para conseguir la mejor nota posible. Fue tan duro el último año, tanto en estudios como psicologicamente, no todos tenemos la adolescencia soñada, donde los amigos y los lios amorosos te abundan, yo fui más bien el juguete con el jugar siempre que quisieran, el blanco de burlas y todo por haber seguido mi estúpido corazón.
Fueron de los momentos más duros que tuve que pasar pero, a pesar de todo, aquí estoy a punto de empezar mi primer día de carrera, aquella que me dará la motivación y la titulación para poder seguir mis sueños y metas. Me siento afortunada de no haber tirado la toalla, de haber seguido por mucho que dijeran, estudiar en la universidad de mis padres me hace también sentir paz y felicidad, gracias a este lugar yo hoy estoy aquí, ellos lucharon por su carrera y paralelamente por su amor.
Tengo muy claro que no va a ser un camino fácil, va a ver mucho sudor, muchos sentimientos, lágrimas y ganas de abandonar pero por que me lo debo y me lo merezco sé que lucharé hasta al final.
Una vez dentro me hubiera gustado seguir el consejo de mi hermano, no tenía ni idea de donde ir, había un grupo de cuatro chicos y tres chicas así que me acerqué para saber donde quedaba la primera clase que tenía.
- Hola, perdona que os moleste.- Uno de ellos me miró de arriba a abajo y en ese momento me di cuenta que fui a preguntarle al peor grupito de todos.
- Tu no molestas hermosura.- Odiaba estos comentarios, poco me gustaban de mi gente cercana imaginate de gente que ni siquiera conozco.
- Podriais decirme donde queda esta clase por favor.
- Que me das a cambio.- Esta vez fue otro el que contestó, ¿Es que ni en la universidad te sacas de encima a los imbéciles? ¿De verdad?
- Un puñetazo que te reviente la nariz.- Eso hubiera contestado, bueno no tan fuerte, si alguien no se hubiera metido.
#6801 en Novela romántica
#910 en Joven Adulto
una historia llena de aprendizaje propio, amor que se construye, una familia que se crea
Editado: 14.04.2025