Entré en pánico, no era eso lo que quería, ahora me sentía una estúpida por hacerlo sentir así. Vi como se levantaba poco a poco de la cama cuando yo no le decía nada así que me acerque rápidamente a su lado de la cama y me senté de golpe.
- No quiero que te vayas a ningún lado.- Vi como intentaba mirar a través de mi por si le estaba hablando enserio- Es enserio, se que a veces ni yo misma me entiendo pero estoy asi por que es raro para mi esto.
- El qué exactamente.
- Sentirme tan cómoda con alguien y más si es un chico, me hace sentir como si todo el rato estuviera en casa.
- Me estoy perdiendo, ¿eso se supone que es bueno, no?.- Vale que yo no me explico bien pero de verdad que a veces pienso que este hombre me toma el pelo para reírse de mí sin piedad.
- Si, claro que es bueno Ethan pero es algo que no he sentido nunca y entonces me da miedo.- Él se incorporó más para abrazarme.- Siento ser tan complicada.
- Nunca me pidas perdón por ser complicada por que no es así, simplemente tienes tus tiempos, no tenemos los mejores recuerdos en una relación así que es normal que queramos ir con tanto cuidado.
- Sigo sin entender tanta madurez.
- Supongo que será un halago.- Asentí con la cabeza.- Ahora si no te importa me gustaría tumbarme en la cama junto a ti, abrazarte y olvidarme de todo lo que me espera.
- ¿Te sirve abrazarme mientras hago unas cosas en el portátil?
- Mientras te tenga cerca todo me sirve preciosa.
Le di un casto beso en los labios, fui a por el portátil y me senté en la cama de manera que Ethan pudiera abrazarme, me sentía tan tranquila y natural que cerré los ojos para respirar tranquilamente y no perderme nada de esta nueva sensación que estaba sintiendo.
No entendía por que pero de repente por primera vez en mucho tiempo me habían entrado ganas de escribir una nueva historia, lo que pasará en el futuro con la ya terminada y esta no lo sabía pero mi sueño de escribir no lo quería dejar atrás. Por eso quiero aprovechar que después de tanto tiempo las ideas y las ganas habían vuelto a mi.
Sin pensarlo ni planteárlo me tiré dos horas en la misma posición sin moverme para no molestar a Ethan y escribiendo mil ideas que se convirtieron en treinta hojas llenas de historia donde casualmente el protagonista masculino se parecía a cierta persona que me rodeaba la cintura plácidamente dormido.
Cuando dio la una de la mañana decidí dejar el ordenador en la mesita y me estire observando a Ethan dormir plácidamente, esa noche me dormí con la mayor sonrisa del mundo, me sentía feliz y volviendo a conectar conmigo misma.
Abro los ojos poco a poco para acostumbrarme a la luz cuando de repente siento que mi cintura está demasiado ligera, me giro poco a poco y me doy cuenta que Ethan ya no está en la cama conmigo, no se como sentirme, no creo que sea muy tarde así que me fijo en el móvil y efectivamente me doy cuenta que son las ocho de la mañana. Prefiero suponer que ha salido a correr, al lavabo o cualquier cosa por que no quiero ponerme a pensar que se ha arrepentido y ha preferido levantarse antes que yo para no pasar un mal rato pero cuando salgo de la habitación para encaminarme al lavabo me doy contra la realidad.
Daniel estaba saliendo de su cuarto justo en ese momento por tanto me da tiempo a ver en el interior, mi vista se dirige a la cama y a que el que se supone que es mi compañero de habitación está durmiendo en esa cama tranquilamente. No quiero que se me noté pero se perfectamente que he frenado en seco y Daniel se ha puesto pálido de repente, tenía claro que algo iba a decir pero me adelanto y me meto en el lavabo para despejarme, lo único que alcanzo a escuchar es como Daniel maldice y vuelve a entrar a la habitación.
Me pongo en frente del espejo y me dedico un momento para mirarme y por muy loco que parezca hbalarme a mi misma, recordarme que estamos aqui por que el nos necesita junto a su família y no por otros temas, decido ducharme y vestirme ahí dentro, me pongo un pantalon negro con felpa por dentro, un jersey de cuello alto tambien negro y una sobrecamisa de cuadros blancos y beige. Cuando salgo casi cuarenta minutos después notó que en la casa ya hay mucho más ruido y me supongo que la gente se está despertando, vuelvo a la habitación para dejar toda la ropa sucia y espero que Ethan no este ahi sobretodo por que no quiero ahora mismo ni escuchar las respuestas de las mil preguntas que mi cabeza se está haciendo.
Pero cuando entro es a otra persona a la que me encuentro, Lía me está esperando con la cara medio dormida.
- Daniel ha venido a buscarme.- Entonces entiendo que hace aquí, se piensa que me voy a volver a romper.
- No es nada, él tendrá sus motivos por los que ha decidido ir a dormir con Daniel, no nos debemos nada.
- En eso pienso lo mismo que tu, bueno en la primera parte, en la segunda prefiero no entrar porque sois unos cabezones y vosotros sabréis lo que haceis pero donde no te apoyo es en ignorarlo, debes hablar con él para entender los motivos.
- Tiene suficientes cosas en la cabeza ahora, no hemos venido para estar de vacaciones juntos.- Vi como ella me miraba exhausta y en el fondo la entendía, a mi me cansa esta situación pero se que es lo mejor pero desde fuera debemos parecer dos críos.
- Deja de defenderlo de una vez, ¿porque él no puede ser nunca el que la cague Emm? No tienes la responsabilidad de tirar de esto y que él solamente después lo arregle con abrazos y cosas bonitas. Él es mi amigo, lo quiero mucho pero tu estas por encima de todo amiga y ahora mismo tus ojos se ven tristes.
Es cuando me doy cuenta que llevo mucho tiempo sin hablar con mi mejor amiga de lo que siento y me rompo, no llorando pero si suelto todo.
- Lo se, tienes toda la razón pero es que no se si estoy lista para una relación, para las decepciones, por que se que todo sera muy bonito al principio pero ¿Y luego que? Me daré la ostia y me caeré.
#6801 en Novela romántica
#910 en Joven Adulto
una historia llena de aprendizaje propio, amor que se construye, una familia que se crea
Editado: 14.04.2025