Una frase, un sueño y seis palabras, eso es todo lo que mi cabeza podía ahora mismo procesar, esto no podía ser cierto. Benjamin Evans, quien resulta ser el tío de el chico que me tiene enamorada y además dueño de “Evan’s books” la editorial más importante del mundo, me acaba de decir a mi, a una chica que acaba de cumplir veinte años y nos sabe nada de la vida, que quiere que publiquen el libro que ha escrito.
- ¿Se trata de una cámara oculta? .- Pregunte aguantándome la risa, por que desde luego alguna explicación tenía que tener lo que acaba de pasar en estas cuatro paredes.
- Ethan me dijo que era muy probable que dijeras eso por eso he traído el primer borrador de la novela junto a la libreta.
- ¿Ahí se encuentra todo lo que queréis cambiar? Por qué vais a necesitar más que una libreta seguro.
- La verdad es que me gustaría que empezaras a confiar más en ti misma, nosotros como editorial claro que cambiamos pequeñas cosas o retocamos para que quede perfecto cara al público pero esta libreta es para ti, para que tú nos guíes en como quieres que sea esto.
- ¿Yo? .- Se les había ido completamente la cabeza, yo no sabía cómo funcionaba todo esto, simplemente escribí una historia que se me ocurrió a través de las teclas de mi ordenador, nunca imagine llegar a esta posición.- No se como funciona nada de esto…
- Lo primero que tienes que hacer es decirme si aceptas la publicación y vendrá una semana llena de reuniones.- ¿Lo aceptaba?
No tenía que pensar nada, era una oportunidad única, claro que iba a aceptar pero él miedos seguía instalado en mi pecho y eso no sabía si era muy bueno, además eso suponía quedarme más días aquí, Ethan se iría pero yo me quedaría aquí, completamente sola…
Entonces mi cabeza empezó a reproducir todas las noches de insomnio, los desvelos, los días donde escribía una palabra o escribía miles de ellas, la frustración que significó el proyecto pero sobre todo la felicidad que me dió verlo acabado. Lo supe enseguida, iba a hacerlo, era mi momento de cumplir lo que nunca imaginé cumplir y era el momento de lograr lo que en mi mente pensaba imposible. Me levanté mirando fijamente a Benjamín y estiré mi mano derecha hacia él.
- Acepto con mucho gusto.
La próxima media hora me quedé reunida con Benjamín mientras me explicaba como funcionaria todo, esta tarde debía leerme el borrador que me había impreso con algunos cambios que les gustaría, el mismo me ha prometido que eran mínimos pero que la última palabra sería mía.
Mañana a la tarde tendría una reunión con quien será mi editora, ese será el pistoletazo de salida hacia el camino de la publicación, aun no me podía creer todo lo que acababa de vivir en una sola mañana, iba a necesitar mucho tiempo para asimilarlo. Para ser sincera ahora mismo lo que quería era encontrar a mi novio en este edificio enorme para poder besarlo hasta dejarlo sin aire, porque lo que había hecho por mi era increíble y no sabía cómo demostrarle todo el amor que sin él saberlo me acababa de dar.
Mientras caminaba por la última planta giré en una esquina donde indicaba que se encontraba el despacho de William, es en ese momento que recordé que habían dicho que se ibana dirigir hacia allí para poder dejarnos intimidad, en el momento en que me acerqué me di cuenta que antes de entrar había un escritorio donde se encontraba una chica.
- ¡Hola!, estoy buscando a los hermanos Evans.- Fuí lo más simpática que pude de verdad pero la mirada de esa chica me hizo entender que fue en vano antes de que ella abriera la boca para contestar.
- Igual que tu estan todas, tienen mejores cosas que hacer que aguantar a fans, ni siquiera se como has llegado hasta aquí arriba.
- No le estoy pidiendo que me expliques lo que quieras, solo te he dicho que los estoy buscando. - Se levantó para acercarse a mi.
- Claro que se donde estan, ellos no hacen nada sin que yo lo sepa y te aseguro que ninguno estaría interesado en alguien como tú.- Me estaba pareciendo algo surrealista esta situación, esta chica no me conocía y mucho menos a Ethan o William, es entonces cuando la puerta se abrió.
- ¿Michelle qué está ocurriendo aquí? .- Preguntó William demasiado serio, daba incluso terror hablarle, vi como la chica de nombre Michelle tragaba saliva sin saber por donde salir.- Si te hago una pregunta me contestas, ya lo sabes.
- Esta chica os busca…
- ¿Y porque no la haces pasar? .- Sus ojos se abrieron sorprendidos a la contestación de la segunda voz, la que resultaba que era Ethan.- Ella es mi novia, tiene todo el derecho de pasar.
Ese momento fue incómodo hasta para mí, no podía imaginarme para la chica pero se lo merecía después de haberme tratado así sin sentido alguno. Una vez acabada la conversación con Michelle nos adentramos a la oficina, era inmensa y llena de luz por los grandes cristales que lo envolvían.
- Podría empezar a decir lo bonito que es tu despacho Will pero lo primero que necesito es daros las gracias a los dos.- Me giré hacía William antes de que hablara y lo estropeara.- Se que tu has tenido que ver, gracias por ayudarme a cumplir un sueño.
- Solo me gusta poder ayudar a las personas que me importan y tú eres una de ellas.- Ver la sonrisa y el orgullo de William hacía a mi me hacía emocionarme por que esto no solo es por que su hermano sea mi pareja, de verdad este chico se preocupaba por mi y tenía interés en que cumpliera mis sueños.
Las siguiente hora me dedique a explicarles a los chicos todo lo que su tío me había dicho que tendría que hacer durante la semana, saber que William también va a estar por la editorial me deja más tranquila sabiendo que Ethan se va hacia Italia en tan solo dos días, aún no había podido asimilar esa noticia, íbamos a separarnos un mes y aunque al principio mi preocupación era solamente si yo no sabía estar sin él, ahora las cosas han cambiado, tenía muy claro que lo iba a echar de menos pero también sabía que el destino me preparó esta oportunidad para poder ayudarme a que me sienta capacitada a afrontar desafíos yo sola.
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una historia llena de aprendizaje propio, amor que se construye, una familia que se crea
Editado: 14.04.2025