El Destripador De Wepaher 4

4x13: La Decision de Un Amigo

El sonido de los pasos retumbaba en el túnel mientras Tony, Guther y Navi corrían hacia la base secreta. Al llegar, Tony quedó impactado.
—Esto… esto es mucho mejor que en mi línea temporal —murmuró, observando el armamento, los monitores y el sistema de defensa automático que rodeaba el lugar.

La base estaba oculta bajo una vieja estación de tren, reforzada con acero y energía independiente.

En ese momento, los monitores comenzaron a mostrar imágenes de lo que ocurría en la superficie: los secuaces de los villanos avanzaban por las calles, quemando barricadas y colocando banderas negras en cada edificio tomado.

En la torre central, Redd malo, Jeff, Tom, Emi y Dalton observaban todo.
—La ciudad es nuestra —dijo Redd, con una sonrisa fría.
Emi, con pasos calculados, comenzó su propia misión: buscar a sus antiguos compañeros. Israel, Carlos y varios más estaban dispersos ayudando a civiles, sin sospechar que Emi era un traidor. La trampa fue rápida: una supuesta zona segura, una señal falsa… y todos fueron capturados.

De vuelta en la base, Guther y Navi se sentaron junto a Tony.
—Debo admitirlo, Tony… lo que estás haciendo es increíble —dijo Guther, serio.
—Arriesgarte así por nosotros… —añadió Navi.

Tony apretó los puños, desviando la mirada.
—Ustedes fueron mis únicos amigos… en mi mundo, ya no están. Y si tengo la oportunidad de cambiar eso… siempre haré todo por ustedes.
No les dijo que la verdad era mucho más dura: si el plan salía mal, solo uno de ellos podría regresar.

Tras unos segundos de silencio, Tony se levantó.
—Tengo un plan. Pero… lo haré solo.

Antes de que Guther o Navi reaccionaran, Tony los llevó hacia una sala reforzada y cerró la puerta desde afuera.
—¡Tony! ¿Qué haces? —gritó Navi, golpeando el metal.
—Si los dejo salir, o los dos morirán… o solo uno vivirá —explicó Tony, con la voz quebrada—. No pienso correr ese riesgo.
Guther golpeó con fuerza la pared.
—¡No seas idiota! ¡No puedes hacerlo tú solo!

Pero Tony ya se alejaba, colocándose su chaqueta, ajustando el arma en su cinturón y revisando las granadas de energía que había tomado del arsenal. Su mirada estaba fija y decidida.
—Esto termina esta noche —susurró para sí mismo.

Mientras se dirigía hacia la salida, la ciudad ardía en los monitores y el reloj avanzaba sin piedad. Quedaban pocas horas para que todo terminara… de una forma u otra.



#738 en Thriller
#352 en Misterio
#2192 en Otros
#174 en Aventura

En el texto hay: amistad, viajeseneltiempo, viajes suspenso y drama

Editado: 15.08.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.