Capítulo 4

—Eso no está derecho, Harry Alan— digo señalando el nuevo cuadro que había comprado Amelie como decoración está misma mañana— Acomoda esa vaina bien, eso tiene que quedar bonito

El suelta un suspiro de molestia.

—¿Cómo que no? Si yo lo veo derecho —Exclama el viendo el cuadro que claramente está choreto

—debes de tener los ojos chuecos, porque yo veo ese cuadro bien choreto — Dice está vez Vanesa

—Como diría mi mamá, las cosas de hacen bien o no se hacen—Digo mirándolo.

Este era el quinto cuadro que montamos en la cafetería, era domingo, los domingos usualmente no venía mucha gente a la cafetería.

Amelie vio perfecto el momento para decorar un poco, en si, la cafetería tenía unas decoraciones muy bonitas dándole un habiente casi que bohemio pero moderno, no sé si me entiendo.

Recogimos los viejos cuadros guardándolos en una caja y pusimos los nuevos, los cuales iban muy bien con el color de la pared, el cual era un marrón.

El cuadro el cual estábamos poniendo era de un fondo blanco en el cual se encuentra un jarrón y unas flores pintadas a acuarela con varios colores.

Un cuadro muy hermoso.

—¿Y ahora? — Harry voltea vernos— ¿Las señoritas ven el cuadro derecho? —dice ya obstinado.

Pero más obstinada estaba yo que llevábamos rato en esto.

Yo veo el cuadro y frunzo el ceño, analizando a ver si estaba derecho.

—Ahora si

—Quedo perfecto

—¡Por fin!, Ya me estaban doliendo los brazos — rueda los ojos mientras mueve un poco los brazos y hombros.

—No se de qué te quejas si solo sostuviste el cuadro—Digo

Harry voltea a verme con el ceño fruncido mientras se cruzaba de brazos.

—No solo lo sustuve querida, !lo tenía que mover a cada rato porque ustedes veían el cuadro choreto! Y eso cansa lo suficiente—Se queja el

—Ya deja de quejarte, mejor acomodemos está Reguera, parece que paso un huracán por aqui—Dice Charlie empezando a recoger el martillo y los clavos.

Vanessa recogió las envolturas de los cuadros y las cajas para luego echarlo a la bolsa de basura, yo limpio el mostrador el cual se encontraban lleno de polvo.

—Somos buenos decorando— Dice Harry con orgullo viendo los cuadros que pusimos—Podemos ser como esos hermanos que tienen un programa de televisión y arreglaban casa y ese tipo de cosa, tendríamos nuestro propio programa

—¿Te refieres a hermanos a la obra?—le pregunto

—Ese mismo, seriamos una versión mejorada de ellos —Harry me sonríe mientras se queda viendo un punto fijo imaginándose la situación

—Ni al caso, sabemos poner un cuadro por milagro sin que se doble el clavo, en vez de terminar de arreglar la casa terminaria más destruida de lo que ya está

Yo veo la cafetería, como mucho habían cuatro personas, agradecía mucho que no hubiera tanta gente.

Y no lo iba a negar tenía flojera de antender a las personas hoy, quería que el día pasará rápido para tomar un buen descanso antes de empezar la rutina de todos los días cuando llega el lunes.

¿Porque los fines de semanas tienen que ser tan cortos? Sería perfecto si fueran tres fines semanas, sábado, domingo y domingo al cuadrado.

—Amelie dijo que podríamos salir temprano si no venía más gente a la cafetería— dice Lucas saliendo de la cocina mientras revisa su celular.

—¿En serio dijo eso?—Pregunta Vanesa sin creerle del todo.

Lucas asiente varias veces, guardando su celular en el bolsillo trasero.

—Pues claro que lo dijo, sabe de sobra que los domingos no hay tanta actividad.

Dios apiadate de nosotros y has que no llegue más gente a la cafetería.

—Chevere pues— me siento al lado de ella mientras tomo mi botella de agua para luego beber un poco de ella—Deberiamos hacer algo después de salir, tenemos tiempo que no salimos los cuatro, si Lucas, estás metido en ese paquete, ya no quieres salir con uno.

El soltó una pequeña risa negando con su cabeza.

—Sabes que no es eso, por más que me gustaría ir hoy con ustedes, le prometí a Helen que vería Paw Patrol con ella—Nos explica el, asiendo que asistiéramos en comprensión.

—¿Le prometiste eso a una bebé de sies meses?—Prgunta Harry.

—¿Que tiene de malo? Mi hija entiende lo que quiero decir.

—bueno, has un espacio libre para nosotros un día de estos para salir.—Vanesa revuelve su cabello.

Sé que dije que quería ir a mi casa a descansar un poco, pero una salida para despejar la mente no me vendría tan mal.

—No es una mala idea— Harry se sienta enfrente de nosotros volviendo al tema de la salida— podríamos ir al cine, o ir a comer, he tenido mucho antojo de comer comida italiana

—No suena mal, podemos ir al cine y luego vamos por comida italiana —Apoya Charlie.

Después de un rato el café estaba completament solo, Harry levantaba las sillas y las ponía sobre la mesa, vanessa limpiaba una vez más el mostrador y yo me ocupaba de barrer el pequeño lugar encargandome de dejarlo limpio para luego pasarle un coleto.

Mientras que Lucas y Charlie se encargan de dejar la cocina impecable.

Amelie llegó hasta donde estábamos nosotros y nos sonrió.

—Veo que ya no vendrán más personas, puede tomarse el esto del día

Era justamente lo que estábamos haciendo.

—No sabes lo feliz que me hace escuchar eso— Exclamo Harry,Amelie lo ve y alza una ceja— no me malinterpretes , amo trabajar aquí pero odio estar aquí los domingos.

—Nunca hay nada que hacer—Dice Vanessa

—Es deprimente— dice Lucas saliendo de la cocina junto con Charlie.

—Si lo sé, debería ajustar los horarios, los domingos podríamos cerrar más temprano—Sugirió Ameli

—O que sea nuestros día libre— sugirió harry

¿Trabajar hasta temprano los domingos? No suena mala idea,pero, ¿Sería muy ambicioso de mi parte pedirle a Amelie un día libre a la semana para descansar?.

No trabajar los domingos seria lo máximo, que los domingos se queden trabajando los del otro turno que no conozco ya que es un dia tranquilo ellos pueden con eso.