—Disfrute mucho Agosto—Dice Harry mientras acomoda las sillas al rededor de la mesa—Siento como si agosto fuera sido hace tres días.
—Harry, agosto fue hace cinco días—Digo mientras me pongo el delantal de trabajo
El baja la última silla acomodándola dentro de la mesa, una vez lista voltea a verme, apoyando sus manos en su cadera.
—¿Hace cinco días? ¿Qué día es hoy pues? —Pregunta el confundido, se nota mucho que anda perdido en tiempo y espacio.
—4 de septiembre, Harry
—¿En serio?—yo asiento
Y sí.
Señoras y señores.
Oficialmente estamos en el mes de septiembre.
Mes del caos.
Mes en el cual vamos a estar como locos atendiendo a los clientes que van a entrar al local como un huracán.
Mes en el cual ya no tendré casi tiempo.
Bueno, casi nunca tengo tiempo en realidad.
Mes en donde considare en tomar innfuciones para relajarme durate lo que queda del mes.
—Ya me quiero ir a mi casa—Dice el mientras termina de bajar la última silla de la mesa número seis—Estoy cansado, me duele la rodilla, ya me trono como cinco veces
—Harry, apenas son las ocho de la mañana ¿Cómo vas a estar cansado?—Dice Vanesa mientras termina de colocar los floreros nuevos que se compraron.
—Cargo el peso de ser el más bello del local— Harry da una pose como si fuera una diva mientras lanza un beso al aire—Es el peso suficiente para estar cansado.
Yo me río al ver la tontería que hace.
Hay que dejarlo ser, está bien que el se crea eso.
—Y el más idiota también— Digo yo, Harry me lanza el trapo húmedo con el cual estaba limpiando las mesas directo a mi cara—¡No vale! Ese trapo huele a diablo.
Harry solo se encoje de hombros mientras se ríe.
Nosotros tres habíamos llegado temprano para limpiar la cafetería, aunque siempre antes de cerrar limpiabamos, en la mañana nos tocaba retocar, quitar el polvo de la mesa, de los cuadros, pasar un coleto... Todas esas cosas.
Y con Hank al asecho buscando cualquier imperfección para meternos en problemas, era mejor prevenir que lamentar.
Ya Charlie y lucas estaban por venir, quienes se encargaban de la cocina, bueno solo lucas, Charlie hacia de todo.
Unos tacones resuenan contra la madera del suelo,anunciando la llegada de alguien,al darme la vuelta me encuentro primero con unos taconazos, seguido de unas piernas torneadas luego caigo en cuenta que es Amelie caminando hasta donde estábamos nosotros, usa un traje de Chanel color azul claro y unos tacones negros, Amelie siempre anda a la moda.
Cada día nos sorprende con un traje nuevo o outfit distinto al día anterior, no es como yo, que uso la misma ropa por dos días, diferente camisa, mismo pantalón.
—Buenos Días chicos—Nos saludo al terminar de llegar hasta donde estamos—Les traje el desayuno, a Vanesa le traje unos waffles—Le entrega la bolsa de Waffles y un jugo de naranja a Vanesa
¿Ven porque la adoro?.
Esto es lo mejor del mes, lo único bueno en realidad, Amelie siempre nos trae el desayuno, bebidas energéticas, ensaladas de frutas, siempre estaba muy pendiente de nosotros con cualquier cosita.
Y le agradecia mucho el gesto de traernos comida, hay días en los que se me olvidaba desayunar por levantarme tarde.
—Gracias Amelie
—A Harry le traje un sándwich de pollo con su jugo de piña— le entrega la bolsa a Harry —Su favorito
—Dios, no se que hice para merecer a una gran jefa como tú— Harry sonríe tanto que se le marca los hoyuelos de su mejilla—Eres un angel
—Y para Andrea, dos empanadas, una de salchichas y otra de carne mechada con su Coca-Cola bien fría—Ella me entrega la bolsa que contiene mis dos empanadas, yo le doy una gran sonrisa a Amelie—No fue tan difícil conseguir un puesto de empanadas, en unas cuadras había un pequeño local de comida latina
Se merece un bono.
—Gracias vale, eres un sol nunca te apagues—Yo me siento al lado de los chicos y me pongo a desayunar.
Ninguno había desayunado, habíamos venido temprano a acomodar el local y hacerle una limpieza rápida para poder recibir a los clientes,todos sabían que la cafetería habría más temprano por esta temporada.
—Tienen que estar bien comidos, en la tarde van a venir unos clientes especiales—Anuncia ella mientras checa algo en su celular—Necesito que anden con las pilas bien puestas.
—¿Cuáles?
—Ah, solo unos abogados, me pidieron que les preparan una serie de aperitivos para esta tarde, tendrán una reunión super importante y necesito que todo esté perfecto—Ella nos ve y hace una mueca—Se que les estoy exigiendo mucho chicos, pero está vez cerraremos más tarde,necesitamos todo el apoyo posible. Mi esposo pidió el local para sus compañeros.
No se si lo había mencionado antes, pero el esposo de Amelie, Matt es un abogado, trabaja en el prestigioso bufet de abogados de Boston, no recuerdo exactamente cual era su puesto, pero lo que si se, es que es muy reconocido.
Siempre estaba con full trabajos, era muy solicitado, ya que se desenpeña bien en el área en la cual el se dedica.
—No te preocupes Amelie, no tengo ningún problema con llegar a las siete a mi casa—Dice Harry mientras le da una gran mordida a su sandwich haciendo que se llene de salsa la comisura de su boca
—Si es por ti amaneces en la calle— Dice Vanesa luego de darle una gran mordida a su waffle
Amelie suelta un bufido y nos ve apenada.
—Hoy no se irán a las siete, se irán a las diez
Yo dejo de comer y me quedo observando a Amelie, termino de masticar para luego hablar.
—¿A las diez? Pero yo no puedo Amelie, sabes que estudio por la noche y mi hora de entrar es a las seis, los máximo que puedo llegar tarde es a las seis y media.
¿Van a hacer un contrato con el diablo que van a durar tanto?.
—Lo se Andrea, pero... Será solo por esta vez, mira, te puedo dar hasta un pequeño espacio para que puedas terminar de adelantar tu trabajo,necesito de tu ayuda en la cocina, por favor.