El Diario de Angela Scott

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Capítulo 8

 

Desde la primaria mama yenis solía darme 200 pesos para la merienda, pero esto solo alcanzaba para una paleta cuando eso... ahora ni para eso alcanza bien. Exigían excelentes notas, un gran rendimiento y desempeño académico; solían darme todo lo necesario para que no me faltase nada y así ser la primera al tener la lista de estudio completa y demás; sin embargo, tener todo eso y que no brinden un poco de atención que no fuese para entrega de notas era algo a lo que me debía acostumbrar porque no cambiaria hasta el sol de hoy.

La confianza dentro del vínculo de madre e hija era algo que no se veía hay, de que me servía decir las cosas que me sucediesen en el transcurso del día si me golpearían por algún tipo de error o como la mayoría de las veces no ganaban su atención por lo que empecé a callar todo y guardarlo para mí misma.

Como le contaba a ella, lo que estaba sucediendo en estos momentos mientras mis lágrimas salían en un recorrido por mis mejillas y mi cuerpo era tocado por alguien más que no era yo.

Ortiz: vamos a hacer que estos senos crezcan bonitos y redondos, dijo mientras acercaba y llevaba a su boca mis pechos.

Quería que ya amaneciese rápido y tratar de olvidarme de todo lo que en estos momentos sucedía, pero el tiempo parecía no estar a mi favor, cada segundo se convertía en horas para mí. Mi abuelo se separó de mí y arreglando sus prendas salió de la habitación, dejándome perdida, mirando el techo que cada vez se volvía más retorcido.

Eran las 10 de la mañana decidí ir a un café internet para hacer una tarea que habían asignado en clases y que muy pude realizar en casa, pero el servicio de energía se encontraba en mantenimiento. Tome mi memoria USB y aprovechar para descargar unas cuantas canciones de un grupo de k-pop que había empezado a escuchar hace poco.

Ángela: voy a salir a hacer una tarea ya regreso

Mami: ¿tarea del colegio? Pregunto sería

Ángela: si, no hay luz en casa y necesito del internet para eso

Mami: bueno pero no te demores

Salí de casa y en 4 minutos aproximadamente ya me encontraba en el café internet realizando la tarea y descargando música hasta que finalice y regrese nuevamente a casa. Sin embargo, cuando entre, recordé que había olvidado sacar las copias para la actividad de arte, pero decidí salir en la tarde porque debía realizar otras cosas.

A las 4 de la tarde salí nuevamente a imprimir lo necesario para tarea, que en este caso era el retrato de algún cantante y que yo había decidido a Abraham mateo por el favoritismo que le tenía una amiga, la cual me pidió que para la actividad de realizar el retrato de la impresión escogiese a su cantante favorito a lo que yo accedí sin ningún problema. Regrese a casa y me dispuse a ver televisión hasta que fue la hora de la cena, calenté un poco de las sobras del almuerzo y servía a mis abuelos para luego retirarme; mi abuelo ya no daba atención alguna y simplemente me ignoró de la noche a la mañana y para mí esto era un favor.

Al día siguiente tenía clases a las 6:30 de la mañana, pero como mama yenis era la encargada de abrir el portón a clases, ese día debíamos llegar más temprano. Me desperté a las 4 de la mañana junto con mama yenis quien había llegado de la finca a las 12 de la madrugada, nos alistamos y desayunamos adelantando de una vez parte del almuerzo; antes de salir doble toda mi ropa sucia dejándola en la esquina de la cama para lavarla cuando llegase del colegio para luego salir de casa a las 5:30.

Llegamos a la escuela y proseguimos a lo cotidiano: clases, recreo, clases hasta que llego el momento de regresar a casa; al llegar deje mi mochila en la cama y note como mi ropa ya no se encontraba de la manera en como la había dejado, pero decidí dejarlo pasar porque mínimo había sido mi abuela esculcando mis cosas como hacía con los demás.

En las horas de la tarde me encontraba realizando mis tareas del colegio cuando mi abuela sale caminando con gran afán a donde se encontraba sentada mama yenis quien luego de unos segundos volvió rápidamente a donde yo me encontraba con una cara de enojo y mostrando con una de sus manos un panti que era mía, sin embargo, esta tenía un poco de sangre del día anterior por lo que su cara de preocupación y enojo.

Mama yenis: ¿con qué hombre estuviste? ¿Por qué tienes este panti así? ¿Qué estuviste haciendo ayer que saliste de la casa? ¿A dónde fuiste y porque saliste dos veces? ¿Con quién te fuiste a ver?

Todas sus preguntas tenían respuestas y se las estaba dando, pero ninguna parecía convencerla de nada

Ángela: fui a hacer una tarea porque no había luz, pero tuve que volver en la tarde porque olvide sacar las fotocopias de la tarea de arte –dije mostrándole las copias- sin embargo, la sangre del panti no sé por qué paso

Mama yenis: voy a preguntar al café internet a ver si es verdad lo que me dices

Tomo las copias y salió de casa, sin embargo, luego de unos minutos regreso y soltando llaves y copias me dio un fuerte puño en mi mejilla dejándome desconcertada

Mama yenis: ERES UNA MALPARIDA MENTIROSA

Ángela: ¿qué?




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