Buenos Aires, Argentina, 1985
_¿Listo?
_Dale.
_Ya.
Me acerqué el micrófono.
_Nos encontramos en la escuela de demonología más famosa de Argentina, con el señor Alarcón, profesor y exorcista, quien ha participado en el reciente exorcismo_ dije mientras me acercaba a él_. Dígame profesor, ¿qué se siente al estar presente en un exorcismo?
_Los primeros son lo más escalofriante que se haya podido imaginar, pero con el tiempo uno se acostumbra.
_Usted dirige la escuela de demonología más importante de Argentina, ¿cuántos alumnos se presentan más o menos a esta profesión?
El profesor Alarcón se rió.
_No creo que más de diez, con suerte.
_Son pocos, ¿no?
_Muy pocos, las posesiones están aumentando cada vez más y no hay suficiente gente especializada en este tema. Los exorcistas más especializados somos ya muy mayores, se necesitan nuevos.
_¿Le preocupa esta situación?
_Mucho.
_¿Hay algún alumno que haya destacado especialmente?
Alarcón no respondió enseguida.
_Hubo una.
_¿Una? ¿Recuerda su nombre?
_María, creo que era.
_¿Y sabe qué fue de ella?
_Creo que al final se experimentó en la demonología, pero no sé nada de su paradero actual.
Un hombre entró de repente por la puerta.
_Profesor Alarcón, le necesitamos.
_Voy_ el profesor me miró_. Tengo que irme.
_Vale, gracias por su tiempo.
Indiqué al cámara que cortara. Bajó la cámara y me miró.
_No digas nada, ya lo sé.
_No creo que vayas a sacar mucho más Lucifer, este tipo de casos lo encubren demasiado, además, a mí me da mala espina. ¿Por qué no buscamos otro reportaje?
_Porque no tengo tiempo, Ismael, tengo que presentar un reportaje interesante antes de un mes o ya lo sabes, me echan. Esta es mi oportunidad.
_Ya, pero... No tenemos nada. ¿Qué es más útil, tener un reportaje o no tener nada?
Me senté sobre el escritorio del profesor.
_Déjame ver lo que tenemos.
Ismael me acercó la cámara. La conversación con el profesor me dio una idea.
_Creo que ya sé lo que voy a hacer.
_¿Qué?
_Dile a Ramirez que me dé más tiempo y le llevaré la mejor historia que haya oído jamás.
_¿Pero qué vas a hacer?
_Voy a encontrar a María, seguro que ella tiene algún caso... O si no una entrevista.
Ismael se rió.
_Entrevista con la cazadora de demonios, a ver cómo acaba.
_Espero que bien_ dije apagando la cámara.