El último regalo

-¿Es enserio madre? Acabó de perder a mi padre y lo único que piensas es en mi cumpleaños, ¡Sabiendo que fue el peor día de mi vida! Vetee por favor no quiero nada- Enojada se acostó y se cubrió con sus sabanas color rosa.

- No es mío, tu padre ya había preparado tu regalo de cumpleaños con anticipación  y solo quería entregártelo.

Al oír está palabras, al instante se levantó y tomó  la caja. Su madre solo se retiró.
Al irse, Scarleth noto un cambio en su madre, pero prefirió no darle importancia, pues lo único que está en su mente, era su amado compañero, gran amigo y consejero. Antes de abrirlo recordó los momentos encantadores que vivió junto a él, cuando la protegía, cuando se pasaba todo el día junto  a ella a pesar de los problemas en su trabajo, recordaba que él siempre le decía "La niña de mis ojos"; una lágrima recorrió por su delicada cara.

Desató la cinta que la envolvía, alzó la tapa y lo que observo dentro era un portaretrato, una cadena y una carta. Primero tomó el portaretrato el cual estaba acompañado de una foto que representaba un verano en la que habían ido a la playa, ambos reflejaban felicidad en sus rostros. Luego tomó la cadena, tenía un dije de un corazón y un escrito atrás que decía: 
"Papá te ama"
Por último tomó la carta enrollada en una cinta con filos dorados, con delicadeza y mayor cuidado lo desató y empezó a leerla...

Querida niña de mis ojos.
Recuerdo el día que te vi nacer, cuando por primera vez tome tu manito, observe con dulzura y contemplete con amor la forma en como llorabas y sonreías, fue algo tan maravilloso; la fragancia que emanabas de suave piel, esa sonrisa hermosa que impregnabas en mi, te vi dar tus primero pasos, te vi crecer, estuve en tus mayores logros al igual que en tus derrotas, has sido lo mejor que me ha pasado en la vida, siempre serás mi mayor orgullo, mi princesa hermosa he compartido contigo los mejores momentos, momentos que siempre los llevaré en mi corazón y espero que tu también.
Mi  mayor prioridad siempre serás tú, y solamente tu princesa.

Feliz cumpleaños preciosa, te prometo que jamás te dejaré sola, haré lo posible para que sientas mi presencia contigo.

Gracias por haber llegado a mi vida y por alumbrarla, por traer toda esa felicidad y enseñarme a ser padre.
Te amo mi niña.

Att: Tu superhéroe.

Cada letra, cada palabra era un puñal en su corazón, comenzó a recordar todos esos momentos que habían pasado juntos, pero cada recuerdo le decía que momentos así jamás se volvería a repetir, que él  ya no regresaría.. y es ahí en donde el dolor regresaba, la vista se le oscurecia y las manos le temblaban, el dolor era peor, su vida se había desmoronado.