El dulce sabor del amor

10

- ¿Y bien? – Se atrevió a preguntarle deseosa por conocer su respuesta y acabar con esa agonía.

- Vine a darte mi respuesta.

- ¿Qué esperas? – susurró ella.

- ¿Eso te tenía tan pensativa hace un momento? – Preguntó dirigiéndole una mirada curiosa y divertida.

- No, tengo muchas más cosas en que pensar que solo en ti, digo, en tu condenada apuesta. – Por el rabillo del ojo vio a Silk casi derrapando en la acera, iba a pasar de largo pensando en que ella ya iba camino a Kensington, al verlos a través del escaparate de cristal se detuvo y aguardó curiosa desde su sitio. Candy emitió un suspiro un tercio cansado, un tercio divertido al ver a Silk y otro tercio realmente desesperado. – Ayer tuve una noche bastante ocupada, estoy desvelada, no tengo tiempo para esto así que, ¿podrías apresurarte?

- ¿Pues qué hiciste anoche? – Le preguntó frunciendo ligeramente el ceño.

- Nada de tu incumbencia. – Cocinar como una loca durante horas sin producir nada satisfactorio, dormir en un horno y hacer trampa, por supuesto.

- Bueno, hasta cierto punto lo es.

- Explícame por qué... - Dijo de inmediato Candy no creyendo lo que oía.

- Tenías que estar cien por ciento dedicada a nuestra apuesta y no andarte distrayendo hasta altas horas de la madrugada. – Lo dij0 tan serio que Candy quedó más confusa aun y luego rió.

- Es lo más ridículo que he oído en todo el día y mira que ya hablé con Silk.

- ¿Quién es Silk? – Preguntó con la misma seriedad y esta vez con el ceño totalmente fruncido.

- Y eso a ti que... - Empezó a decir ya enojada.

- Soy yo. – Hizo su aparición la susodicha logrando que el rostro de Drake se relajara por completo y ofreciéndole una enorme sonrisa.

- Ah bien. – Dijo Drake.

- ¿Ah bien? – Repitió Silk. – Esto se pone interesante.

- Ve a la cocina. – Fue la escueta orden de Candy hacia su amiga.

- Ni lo sueñes. – Dijo Silk quien tomó un banco y se sentó a contemplar la función.

- Sigo esperando. – Le dijo Candy a Drake desechando la idea de sacar a Silk de allí.

- Quería retrasar el momento lo más que pudiera. –Admitió él.

- Lo has logrado, créeme.

- Bien. Tú ganas.

- ¿Cómo?

- Que tú ganas. Lo que me mandaste tiene un sabor único, diferente, celestial, etc., etc. Admito mi derrota, no me gusta perder, pero en esta ocasión lo hago ante un formidable contendiente. Así que, tú dirás ¿cuál es mi castigo?

- Sabía que no perderías. – Silk aplaudía encantada. – No puedo creer que hayas pensado que no podrías. Ella es increíblemente buena ¿cierto? – Le dijo a Drake.

- Cierto. ¿Y bien? ¿Cuál es mi castigo por haber perdido?

- ¿Puedo sugerir algo? – Preguntó Silk.

 

- No. Por supuesto que no. ¿Podrías esta vez hacerme caso e ir a la cocina? – Al ver la silenciosa negativa de Silk le dijo: - Hay montañas de esas galletas de coco que te fascinan.

- ¿Con chispas de chocolate? – Al decirle Candy que así era, salió presurosa hacia la cocina no sin antes mandarle distintas indicaciones a con la mirada, se conocían tan bien que sabía exactamente lo que quería decirle: "No lo dejes ir" "El hombre está buenísimo" "Más vale escojas un buen castigo".

- ¿Estarás muy ocupado esta semana?

- ¿El castigo es irnos de viaje? Si es así no lo estoy.

- Perfecto. –Sonrió Candy con picardía.

- Entonces, ¿nos vamos de viaje?

- Mejor aún. Serás mi empleado toda la semana. Te pagaré por supuesto.

- ¿Cómo has dicho? – Nunca antes nadie había logrado sorprenderlo de esa manera, nadie. En serio, nunca. ¿Empleado, de ella? - ¿Aquí? – Atinó a preguntarle.

- No, en mi casa. Claro que aquí ¿dónde más? Empiezas mañana a menos claro que decidas echarte cobardemente para atrás y te rehúses, si es así lo entenderé.

- Mañana estaré aquí. – Contestó veloz.

- Siete en punto.

- Lo que digas, Jefa...

 



#2969 en Novela romántica
#901 en Chick lit

En el texto hay: diversion, amor, resposteria

Editado: 05.12.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.