CAPITULO 11
Ya entrando al Castillo, Alexter estaciona para luego dirigirse a buscar a Lucia tenía una sensación extraña de verla, pero se acuerda que no está solo y lo que menos quieres es otra pelea entre las dos.
--Hola hermano, ¿sucede algo?—se llego sin avisar cosa que a Cameron le sorprendió.
--No, tranquilo—dice, --Venimos a ver a Lucia--.
Mayra hace una mueca, --Si- dice seco, Alexter se la queda mirando y Cameron trata de entender sus actitudes.
--Es por aquí—y les señala las escaleras para subir a la habitación de ella.
Lucia sin embargo se encontraba conociendo un poco más acerca de la nueva invitada al Castillo.
--Tranquila, yo también soy nueva aquí y me han tratado muy bien, una vez que te adaptes te encantara—dice para animarla.
--Gracias Lucia, lo que más quisiera es sentirme en casa—ella le asiente sonriéndole.
--Estas ahora en casa Erika—y la abraza.
El toque de la puerta las hizo separarse.
--Hola Cameron—y luego observa a los otros dos invitados, --Alexter y Mayra—dice con un tono algo molesto pero disimulando su actitud.
--¿Podemos pasar?—pregunta Cameron, lo que menos quisiera es incomodarla aparte se quiere mantener lejos de ella aunque no es lo que desea pero quiere darle su espacio.
--Claro entren—dándole paso a los tres.
--Hola Lucia—habla Alexter, --Ella como sabrás es mi prometida- dice con aquel apretón en su mandíbula, --y quiere disculparse en persona por lo ocurrido en la Mansión--.
Lucia traga en seco, esa mujer no le da buena espina aparte el plan de hacerse amiga de ella no resultara, así que tendrá que idearse otro plan, la idea de confundirla con una amiga difunta no le convence en lo absoluto.
--Tranquila es muy amable de tu parte venir, pero me gustaría escucharlo de ella—responde.
Mayra internamente estaba furiosa, pero debía hacerlo y mostrarle a Alexter que podía manejar una manada con él, aunque la persona que tiene en frente no es nada más y nada menos que la misma Aranza en persona, pasándole muchas cosas por su mente ¿Cómo es que pudo sobrevivir? ¿Acaso me estoy volviendo loca?. Mayra observa que la quedan mirando y cae en cuenta de lo que tiene que decirle.
--Disculpa, estaba pensando que…-- trata de disimular su hipocresía, --fue mi culpa, no debí haberte tratado así de esa manera, nuevamente discúlpame Lucia—
La vampiresa asiente, sabe que en cada palabra hay es pura mentira, --Espero no vuelva a pasar porque no habrá nadie que nos separe—dice sin más.
Alexter y Cameron le sorprendió esa actitud, la idea es que quede un tratado de paz, pero más bien se está tornando amenazante la conversa. A Mayra no le sorprende su respuesta.
--Tranquila, me asegurare de que no pase—y le sonríe.
Cameron saca a ambos de la habitación de Lucia, Alexter quería quedarse un poco más pero no era el momento.
--Espera puedo ir contigo Cameron—Erika se levanta de la cama.
Lucia se la queda viendo extraño cuando pasa junto a ella posicionándose al lado del vampiro, gesto que no le agrado y no entiende porque, si debía odiarlo por cómo fue con ella.
--Claro, así te muestro el Castillo y tu nueva habitación--.
Lucia no hace más que asentir a lo que le decía el vampiro tratando de disimular ese pequeño enojo, por su parte Cameron podía notarlo en sus ojos y se ríe internamente, sabía que en el fondo no podía odiarlo como piensa. La diferencia entre Alexter y Cameron es en su físico, a pesar de ser gemelos tienen algo que los distingue, la piel pálida de Cameron, los vampiros suelen ser más pálidos, el color de la piel da la ilusión de un rostro impecable, son criaturas que realza la percepción de belleza, en los hombres sus cuerpos suelen ser físicamente musculoso y atléticos, en cuanto a las mujeres parecen ser delicadas pero no lo son, sus cuerpos resaltan de buena forma.
--Affs! Vampiro estúpido—dice una vez que han cerrado la puerta de su habitación.
Por otro lado Erika tenía una orden que cumplir por parte de Trevor Hellsing, descubrir la debilidad del Rey Vampiro, para eso debe conocerlo y saber todo acerca de él, cosa que puede ser muy imprudente de su parte y que pueda venirse todo el plan abajo, su vida estaba entre la espada y la pared no le quedo de otra que acceder. Cameron despidió a su hermano y prometida, ahora se encargaría de mostrarle el Castillo a la nueva invitada.
--Me dijiste que te llamas—pregunta tratando de recordar.
--Erika, me llamo así—responde nerviosa.
Es una chica de la misma edad que Lucia, las mujeres vampiros son muy bonitas, encantadoras y algo tentativas. En el caso de Erika tiene cabello rojizo y rizado con mucho volumen, buena estructura física, y una que otras pequitas en sus mejillas que le hacían ver encantadoras.
--Bueno Erika estas son las instalaciones del Castillo, como puedes ver estas son las habitaciones de cada uno de los que viven aquí—dice Cameron, mostrándole el mismo recorrido que hizo con Lucia, --Acá esta tu habitación—le muestra abriendo la puerta de esta.