El Encuentro

CAPITULO 40

Alexter después le explicaría a Stefan porque no estaba con ellos buscando pistas, pero Mayra debe estar involucrada en algo y quiere saberlo. Regresa a la mansión a esperar por ella, entra y saluda a la nana que está en la cocina, es completamente ajena a todo lo que ocurre y no quiere preocuparla tampoco.

--¿Y Mayra?—pregunta.

La nana niega con su cabeza, --No lo sé joven—

Al rato que siente la puerta principal, Alexter sale de la cocina para ver si es ella, y hasta que dio por fin.

--¿Dónde estabas?—pregunta.

--Estaba buscando a Carolain a ver si la encontraba— miente.

--Que gentil de tu parte—responde Alexter con algo de sarcasmo, Mayra se percato.

--¿Me quieres ayudar?—pregunta.

--Claro, vamos—dirigiéndose ambos a la salida.

Mayra es muy astuta, la verbena no se cultiva desde hace muchos años en esas tierras debido a que son plantas muy toxicas para los seres sobrenaturales, pero ella si sabe como ingeniárselas, Alexter se monta en la camioneta de ella, ambos viendo la carretera sin pronunciar una palabra, a lo que una pequeña jeringa es atravesada en su pierna.

--¿Qué haces?—pregunta sintiéndose mareado.

--Dulces sueños mi amor—dice la loba.

Alexter queda desmayado por la intoxicación de la planta, después de unos minutos llegan a la cabaña, esta lo baja arrastrando hasta entrar completamente.

--¡Alexter!—dice en asombro Carolain, --¿Qué le hiciste?—pregunta al ver a su cuñado desmayado.

--Tranquila solo le di un poco de verbena—comenta lo más tranquila. Lo encadena en ambas manos, a decir verdad eran muy gruesas, --Le tuve que duplicar la dosis—

--¿Dónde conseguiste verbena?—pregunta

--Eso no te interesa—responde la loba, --Ahora que Aranza está desaparecida, Alexter está aquí sin poder hacer nada, tu también y bueno Vudú digamos que eras un recurso mas—hace una mueca.

--¿Cómo que desaparecida?—pregunta Carolain.

--Pues sí, un tal Trevor la rapto—suspira sentándose en el mueble como si le pesara tanto la espalda, --Esta haciendo el trabajo que yo quería hacer, estando ustedes aquí, no lo distraen en su plan--.

--Estas Loca Mayra—dice Vudú.

Carolain se remueve en el asiento, pero le quema cada vez que lo hace, --Eres una maldita plaga— dice enojada.

--¡Ay! Carolain, siempre te vi como mi favorita—toca su mechón de pelo que sobre sale en sus mejillas colocándolo atrás de la oreja, --Pero tenía que llegar Aranza ¿verdad?--.

Su ira interna iba en aumento y sin poder hacer nada, ahora Alexter encadenado, Vudú amarrada y ella igual, simplemente están en desventaja.

[…]

Sin embargo Cameron se dirige al Castillo para buscar a Erika, camina directamente a su habitación, llegaría de buena manera para no tener que espantarla. Toca a la puerta.

--Hola Erika—saluda, --¿Podemos hablar?--.

--¿Te vienes a disculpar?—responde odiosa.

Cameron suspira internamente, <la verdad es que no te mereces nada de lo que te he ofrecido> piensa internamente.

--Si—responde firme.

--Caminemos hacia las afueras del Castillo, la verdad es que estar encerrada me aburre—comenta, cerrando la puerta al mismo tiempo.

Cameron y Erika ya se encuentran a las afuera del Castillo, caminando hacia el bosque que queda cerca.

--¿Sabes?, hay un cementerio muy antiguo, ¿quieres verlo?—pregunta.

--¿Y cómo sabes de él?—pregunta curioso y a la vez alerta.

--Solía venir antes con mi familia, hace mucho tiempo—comenta, --La verdad es un sitio relajante—.

Mientras iban caminando, iban conversando hasta que por fin llegan al cementerio.

--¿Tienes familia aquí?—pregunta viendo las lapidas salteadas en el terreno, pero le llama la atención una capilla en particular, a su alrededor son de piedras como si se hubiera derrumbado permaneciendo en su lugar, una reja negra con fondo oscuro, moho entre las piedras debido a la humedad, alguna que otras ramas sobresaliendo desde algunas grietas de las piedras que van de caída.

--Si, acá están mis padres—señala la lapida con el grabado en ella.

Pero Cameron no lo vio venir, una estaca de madera es atravesada en su estomago causándole dolor cayendo de rodillas para luego quedar tendido en el suelo.

--Hola Cameron—menciona Trevor sacándole la estaca bruscamente.

--Affs—se queja removiéndose y tratando de levantarse.

--Tu y yo tenemos algo pendiente—y le inyecta verbena en el cuello debilitándolo por completo.

Lo arrastra hasta la capilla que antes había visto curioso, ya adentro es un pequeño pasillo, en su interior no es más que piedras en escaladas, lo encadena para luego salir cerrando la reja a su paso.

--¿Sabes que es lo interesante?, que nadie sabe de este cementerio—le dice a la vampiresa pelirroja.




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