El Encuentro

CAPITULO 51

Ha pasado un mes y Aranza ha permanecido encerrada en el sótano de la mansión, Trevor realizó la hipnosis como había dicho, Alexter cumplió con lo prometido, ahora él y Marina caminan las calles del Valle sin problema, aunque todo ha transcurrido normal para Aranza es una lucha interna con su mente todos los días, no quiere salir del sótano a ver la luz del día, piensa que no se lo merece, sin embargo no ha querido hablar con nadie que se acerque, solo permanece callada y abrazada a sí misma en la misma esquina de siempre.

Alexter le hace señas a Trevor de que quizás no pueda lograr nada, aun así le da paso para que entre.

--Hola hermanita—saluda, pero ella no hace más que girar su cabeza a otro lado para no verlo a la cara, --De verdad Aranza no me gusta verte así, se que has pasado por mucho, pero eso demuestra que eres valiente, y mírate aun así estas aquí luchando contigo misma—dice amable. Pero a la vez suspira al no recibir respuestas de su parte, --Todos estamos preocupados por ti, queremos que salgas de este lugar, que veas el día, la tarde y la noche, que empieces de nuevo- Alexter escucha cada palabra del hermano sigilosamente detrás de la puerta, --Alexter te extraña mucho, Cameron, Carolain, Marina, todos Aranza—comenta. Ella se gira a verlo.

--¿Cómo crees que pueda empezar de nuevo?—pregunta, Alexter al escuchar su voz se emociona, ha pasado un mes y desde entonces no ha dicho ni una palabra, hasta ahora.

Trevor le sonríe, se siente feliz de que su hermana pueda hablarle y de todos lo que se le han acercado, es a él a quien le hablo primero.

--Saliendo de aquí primero—dice extendiéndole su mano, --vamos, es hora de iniciar algo nuevo—menciona.

Aranza le da una leve sonrisa, ya que sus ojeras la hacen ver demacrada y desarreglada, su cabello todo maltratado, su ropa algo sucia y vieja.

--Gracias por no dejarme sola—dice apenas con ánimos tomando su mano. Una vez levantada Trevor la abraza fuertemente.

--Nadie lo ha hecho Aranza—responde, y como siempre con sus chistes malos, --Deberías darte un buen baño y por favor póngase linda--.

Aranza no hace más que reírse, --¡Ay! Cállate—le da un leve sopetón por el hombro.

Alexter no aguanta más y se asoma por la puerta que estaba entre abierta, sus ojos de felicidad al verla son indescriptible, el no hace más que acercarse a ella y abrazarla como si fuera lo último que tuviera en vida.

--No sabes cuánto te extrañe Aranza—dice en susurro, ella deja caer unas lágrimas que rozan sus mejillas y le corresponde el abrazo.

--Yo también te he extrañado mucho y lo siento es que…--- y Alexter se separa de ella para mirarla y callarla con un suave beso que ella misma correspondió.

--Shhh.. No tienes que decirme nada, ahora estamos juntos en esto—le limpia las lagrimas que aun caen de sus bellos ojitos marrones intenso.

Aranza al fin sale de ese sótano, que hace un mes era simplemente su lugar de encierro, solo cuatro paredes eran su compañía y sus pensamientos eran su tormento del día, hasta que por fin respira el exquisito aire del ambiente, al subir las escaleras para llegar al salón principal de la mansión se encuentra con una gran sorpresa por parte de los presentes, un “Bienvenida a casa” en globos color dorado metalizados, globos individuales colgando desde el techo con tiras colgantes, una mesa con un pastel decorado de color blanco y degradado azul marino y en su centro una loba aullándole a la luna, cupcakes adornados en forma de flores, trufas, pasta secas, y alfajores rellenos de arequipe de varios colores, la verdad todos se esmeraron por darle esa sorpresa, se pregunta ¿Desde cuándo lo tienen preparado? Cosa que no le da importancia porque en realidad se siente en casa, observa a Carolain junto con Stefan, Lucas, Thomas, el Rey Akim, la Nana, ¿Cameron y Camill? Se pregunta internamente al verlos tomados de la mano ¿De que me perdí?, y al lado de la pareja Marina con un pequeño arreglo en sus manos.

--Bienvenida a Casa—gritan todos al mismo tiempo. La verdad me hizo sentir como una niña pequeña. No hago más que sonreír y pensar que estoy en estas fachas. Todos se acercan para abrazarme y agradecida le devuelvo el abrazo a cada uno.

--Todos te queríamos de vuelta—dice Alexter tomando fuertemente su mano.

Con los ojitos empapados, otra vez caerán las lágrimas.

--De verdad no tengo palabras para esto—responde, --Solo puedo decir… Gracias por esta linda sorpresa y disculpen mi atuendo—todos ríen.

--¡Ay! Pequeña eso es lo de menos—se acerca Carolain, --Ven, vayamos a cambiarte y arreglarte para que estés como nueva y celebrar—a lo que asiente a su petición.

Aranza se aleja de todos que permanecen sentados, Carolain y Marina suben con ella a su habitación de siempre. Pero solo tiene una curiosidad ¿Cameron con Camill? ¿Desde cuándo? No es que sienta celos o algo por el estilo, más bien se siente feliz de que tenga a alguien consigo, cosa que le sorprende. Estando ya en la habitación, se ducha mientras que las dos amigas alistan todo el atuendo colocándolo en la cama, una vez que sale del baño no aguanta más, quiere saberlo.

--Cameron y Camill ¿desde cuándo andan juntos?—pregunta a lo que ambas amigas ríen.

--Bueno durante este mes han pasado muchas cosas y entre ellas es que Cameron y Camill decidieron estar juntos ya que ambos están enamorados, empezaron a salir, y a conocerse por lo que ya sabes lo que pasa después—responde Carolain.




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