Se acerco hacia ella quien se encontraba en la arena acostada. Se recosto cerca de ella quedando a pocos centímetros de Silvia. Admiraban los dos la luna que brillaba con intensidad. Volteando su cabeza David se quedo mirando a Silvia mientras ella no quitaba la vista sobre la luna.
-Como es que sabes todo esto- Le pregunto David mientras que ella cerraba los ojos.
-He tenido los mismos pensamientos en mi adolescencia. Todo lo que me dices. Me lo pregunte cuando estaba en la secundaria y preparatoria. La razón de mi existencia. Creo que todo ser humano se pregunta esto. Solo que algunos lo responden y otros lo intentan evitar- Respondió mientras abría sus ojos despacio.
-y quien te dio la respuestas a todo estas preguntas que te hacías-le dijo mientras se levantaba.
-Mi tío. Pero lamentablemente falleció en un accidenté. El me ayudaba cuando me encontraba triste. Cuando me peleaba con mis papás siempre me consolaba y me aconsejaba. Siempre me ayudaba a ver la realidad del mundo. Siempre estaba cuando lo necesitaba. Algunas de las cosas que te dicha son algunos pensamientos de él. Sin embargo solo debes de tomar lo que te ayude. Eso también fue un consejo de mi Tío.- Parándose mientras miraba de frente a David.
-Vamos ya es tarde-Le dijo David mientras extendía su mano.
-Si. Ya es tarde- Le respondió Silvia mientras tomaba su mano.
-Sabes algo siempre he pensado que todo Hombre tiene estos pensamientos de su existe. Algunos le hacen caso y otro no.-Le dijo David mientras se dirigían al edificio.
-Yo también pienso lo mismo. Esta parte humana que en un momento dado se hace estas preguntas sobre la razón de su existencia.-.
Entraron al Edificio a donde la recepcionista los recibió con un saludo. Ambos se dirigieron al elevador mientras que Silvia agarraba su brazo, mientras que su pecho se pegaba junto a la de David. Llegando al piso a donde estaban sus departamentos. Abriéndose el elevador; ambos empezaron a caminar por el pasillo que los llevaba a sus cuartos.