El Engaño

Paseo por la ciudad

—Gracias por venir— les indico que se sentaran, dijo un hombre alto y calvo, pero con un prominente bigote negro —Disculpen el desorden, es que estamos remodelando—  camino hasta su escritorio para sentarse

—No hay problema—  dijo Richard sentándose, Nathan y Albert también se sentaron

—¿Esta es una de las instalaciones que compraron? —  preguntó Nathan

—Así es, las otras que vieron es donde será la producción, está la utilizaremos para exhibición y para nuestras oficinas

—No está nada mal—  dijo Albert

—Nuestra intención es que los automóviles estén al alcance de todos, no solo de los ricos, por eso debemos ser los primeros en tener las instalaciones para producirlos en masa, así seremos los primeros en el mercado

—¿Cuándo podremos ver los nuevos diseños que tienen? —  pregunto Richard

—Todavía estamos terminándolos, cuando los tengamos listos les avisaremos de inmediato—  se puso de pie —Ahora me gustaría mostrarles como tenemos pensado distribuir la planta de exhibición

Todos se pusieron de pie y salieron de la oficina. Aunque todo lo que les estaban mostrando y proponiendo era bastante interesante, aún no estaban convencidos. Ya les habían mostrado las instalaciones que tenían pensado comprar, pero aún no les habían mostrado los diseños de los nuevos automóviles, con los nuevos motores que, según ellos, generarían más potencia que los normales y no consumirian tanta gasolina.

—¿Cómo los ves? —  pregunto Charles

—Douglas dijo que los ve interesados—  miraron hacia donde estaban todos, mientras Douglas les explicaba como pensaba distribuir la zona de exhibición —Solo tenemos que conseguir los diseños de unos motores y modificarlos para que parezca que pueden funcionar

—¿Cómo hicieron para conseguir que los dejaran entrar aquí?

—Uno de mis amigos trabaja aquí como guarda de seguridad, me dijo que los dueños se quedaron sin dinero para seguir con la remodelación, que lo más seguro es que la obra quede detenida mínimo por dos años, así que dile a Ray que podemos usarla cuando queramos

—Esta bien

—También creo que necesitaremos algunos hombres para que se hagan pasar por nuestros empleados, si no ven a nadie más, seguro empezaran a sospechar, pero asegúrense de que no cobren tanto, los últimos que conseguimos nos toco despedirlos, estaban empezando a pedir mucho

—No te preocupes, le diré a mi padre, él conoce a varios que harán lo que sea solo por unas cuantas monedas

Desde de que Charles se convirtió en el chofer de Richard, podía manejar mejor las cosas, mientras que Ray había comenzado a trabajar en la empresa. Los dos habían logrado ganarse la confianza de Richard y podían trabajar cerca de él, lo que les había permitido poner en marcha su plan. Ray tenía acceso a todos sus contactos, ya que su trabajo consistía en atender tanto a clientes como a socios. Richard tenía la costumbre de guardar los contactos de personas que pudieran ayudar a expandir su negocio, así pudieron hacerse pasar por uno de ellos. Escogieron uno con el cual no se había comunicado desde hacía tiempo, así cuando lo buscara en su agenda, no le parecería sospechoso que ellos hubieran sido los que lo contactaran. Una vez lograron llamar su atención, solo tenían que mantener, no solo su interés, sino también el de Albert y el de Nathan, una vez lograran convencerlos por completo, pasarían a la segunda parte de su plan.

—Puedes tomarte el resto de día libre—  dijo Emma —Yo pasare por Joseph a la escuela, tengo que llevarlo al sastre, la ropa ya le está empezando a quedar pequeña otra vez

—Entonces me llevaré a Amelia— dijo Claire tomándola del brazo —Estaremos en el salón de té

—Está bien, solo no regreses tan tarde

—No señora— dijo Amelia para después salir casi a rastras, Claire la sacó de la casa tan rápido, que casi no la dejo cerrar bien la puerta

—Por fin—  dijo Claire sin soltarla —Ahora si ya no tienes ninguna excusa para acompañarme—  las dos se subieron al carruaje

—Tampoco podía negarme—  sonrió al ver a Claire tan contenta

—Ya vez que Emma te necesita cada vez menos para que cuides a Joseph, así que deberías ir considerando más seriamente mi propuesta

En ese momento si lo considero. Si trabajaba para Claire, no tendría que preocuparse de que Charles la estuviera vigilando, podría moverse con más libertad. No podía seguir así, y más si Charles tenía la idea de utilizarla para manipular a Nathan, sabía que él no la dejaría en paz hasta que lo consiguiera, si se alejaba de Nathan, Charles no podría hacer nada. También podría comunicarse con más libertad con Tom y finalmente podrían irse lejos de su familia, una vez lejos, le advertiría a Richard de que su familia intentaba estafarlo.

—¿Me estás escuchando? —  pregunto Claire al ver que no le respondía

—Lo siento, ¿Qué me estabas diciendo?

—Que si la otra semana me acompañas a escoger los nuevos manteles

—Si, claro

—Ya me dijiste que si, después no me vayas a salir con ninguna excusa

—No lo haré

El salón de té de Claire estaba al otro lado de la ciudad. Estaba pensando ampliarlo y necesitaba más ayuda y desde hacía tiempo estaba tratando de convencer a Amelia para que trabajara con ella. Quería convencerla para que aceptara el trabajo, ya que quería que fuera ella quien se hiciera cargo mientras ella se iba de luna de miel con Albert, confiaba en que Amelia, podria manejar el salon sin problemas.

—¿Qué te parece? —  pregunto cuando llegaron

—Es muy bonito— se sorprendió al ver lo elegante que era, Claire tenía muy buen gusto para decorar

—Me alegra que te guste, ahora quiero presentarte a Margaret—  se dirigieron al fondo del salón —Ella es quien se ha estado haciendo cargo del salón mientras no estoy, pero decidió irse a vivir con uno de sus hijos, su esposa está embarazada y quiere ir a ayudarla con los otros niños, por eso estoy buscando quien pueda reemplazarla—  dijo mirando a Amelia




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